Parte 18

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La hora llego, Lena y Gayle se posicionaron en la línea de salida. Kara y las demás estaban en el palco VIP viendo como salían a toda velocidad, Kara podía sentir como el corazón le subía a la garganta al escuchar rugir esos motores que llevarían al límite a dos de las mujeres que habían vuelto su mundo al revés. Unos monitores transmitían en vivo lo que pasaba en la pista de carreras desde diversos ángulos desde donde todos los presentes podían ver la acción, excepto por Kara.

Kara mantuvo sus ojos fuertemente cerrados sin poder disipar el malestar creciente en su corazón, no lo hacía sentido todo esto, a su aparecer era absolutamente innecesario. Le dolía en más de un sentido: por el hecho de que Gayle se esforzara a tal grado de tener que lidiar con su fobia para mantener a Kara en la escuela, y luego Lena que igualmente prefería arriesgar su vida en la pista de carreras con tal de poder deshacerse de Kara. La había juzgado y culpado de lo sucedido con Gayle sin darle ninguna oportunidad de defenderse. Era ridículo lo mucho que le dolía el desprecio de Lena, pero era una realidad en su atormentado ser.

En la pista Gayle había tenido un despegue perfecto, y dejo a Lena rápidamente. A la joven heredera Luthor le había costado concentrarse por lo que había visto hace un momento, pero no tardo en darle alcance a Gayle y logró rebasarla sin dificultad, aunque no por mucho. Gayle permanecía cerca de ella, acechando, esperando cualquier error de Lena.

Lena estaba descolocada, nunca creyó que Gayle pudiera competirle, ni mucho menos seguirla tan de cerca, pero ahí estaba detrás de ella, cada vez más cerca

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Lena estaba descolocada, nunca creyó que Gayle pudiera competirle, ni mucho menos seguirla tan de cerca, pero ahí estaba detrás de ella, cada vez más cerca. La rubia por su parte sentía que había dejado su alma en la línea de salida, pero estaba enfocada en los movimientos de Lena delante de ella, era difícil decidir el momento exacto para tomar las curvas a esa velocidad así que simplemente imitaba los movimientos de la pelinegra y así seguiría esperando hasta el último momento para rebasarla en la recta final.

No le fue difícil a Lena adivinar lo que Gayle tramaba cuando vio que no hacia intentos reales por rebasarla, Lena enfureció y decidió dar la estocada final, acelero más, pero ni la adrenalina de sus venas por el subidón de velocidad podía contrarrestar lo furiosa que estaba, su amiga, de sus mejores amigas de la infancia se había convertido en una astuta zorra que pretendía conquistar a Kara, su Kara, la única mujer de la que se había enamorado hasta ahora. A su mente volvió esa visión de Gayle estrechando entre sus brazos a Kara, los dedos de Lena se presionaron más sobre el volante. Otra imagen cruzo su mente, el rostro sorprendido y ruborizado de Kara cuando recibió un tierno beso de Gayle. Eso no le podía estar pasando a ella, su amiga del alma seduciendo a Kara.

Lena perdió la concentración un segundo, un segundo fue suficiente a esa velocidad para que derrapara erráticamente, y por su propio bien y el de Gayle tuvo que volantear al acotamiento de arcilla levantando una polvareda roja acompañada del rechinar furiosos de sus neumáticos. Gayle vio el polvo, al acercarse más redujo la velocidad hasta casi frenar, vio el auto de Lena completamente detenido, pero intacto y a Lena golpeando el volante con ambas manos. Su amiga estaba bien, así que era su momento de vestirse de gloria, sin pensarlo acelero el auto y después de un momento vio la banderola que indicaba la línea de meta.

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