Después de la presentación del equipo en la fiesta Marco me dijo que lo acompañara por las cervezas a su auto. Al salir de la casa me encontré a Raquel y su amigo besándose.
Cuando se separaron me voltearon a ver, me quede en mi lugar sin moverme, tenia que esperar a Marco con las llaves del auto. Se formo un silencio incomodo, a los pocos segundo la puerta se volvió a abrir dejando ver a una hermosa Malena y a mi amigo.
Mi chica los saludo con un movimiento de cabeza, Marco se aclaro la garganta, —Vamos.
Ella lo siguió y espere unos minutos para ir tras ellos. Tome una caja de cervezas y la lleve a la cocina. Malena dejo las botellas en la mesa y sonreí al verla tan concentrada en acomodarlas para que no se cayeran.
—¿No me vas a felicitar?— pregunte coquetamente.
En repuesta se paro de puntitas, pensé que me besaría en la boca pero me dio el beso en el cachete, —Felicidades y gracias por el gol.
—Quiero uno aquí— señale mis labios y ella se puso rojita.
—Que sutil— reímos y se acerco a darme un corto beso.
No perdí la oportunidad, la jale de su mano para acercarla más y volver a besarla, pose mis manos en su cintura y las suyas viajaron al rededor de mi cuello.
Cuando nos separamos volví a hablar sin dejar de mirarla, —Eso sí fue una buena felicitación.
—También fue un agradecimiento por el gol.
Sabía que eso había sido una buena idea, —Creo que el plumón con el que me escribí es permanente— me acerque a su oído y susurre, —Me tendrás que ayudar a quitarlo.
Sonrío, —Tal vez— no pude resistirme y la volví a besar.
Durante toda nuestra conversación sentí la mirada de alguien clavada en mi espalda y cuando por fin volteé a ver quién era, Raquel y su amiga estaban paradas viéndonos como si quisieran hacernos daño.
Cuando clave la mirada en ellas bajaron la cabeza y se fueron.
—¿Sí o no?— pregunto Malena y volví a poner mi atención en ella.
—¿Sí?— respondí dudando, no escuche lo que me había preguntado.
—Entonces vamos a bailar.
Después de estar bailando, tomando y besándonos ella fue con sus amigas, mientras que yo fui a la terraza para poder fumar.
Llegue a la terraza y perdí el cigarro, el aire un poco frío pegando en mi cara me hizo sentir bien. Cuando el cigarro iba a por la mitad se escuchó un ruido y cuando volteé Raquel estaba en el piso.
—Mierda, Raquel.
—No me toques— respondió a la defensiva cuando intente levantarla.
—¿Cuánto has bebido?— arrugue la nariz.
—Lo suficiente— la tome de las manos para sentarla en una silla, —Lo suficiente para olvidarme de los besos que te estabas dando con Malena.
—Entonces vas a tener que tomar siempre que nos veas— no quería ser grosero pero tampoco quería fallarle a Lena.
—¿Por qué haces esto Ares?— sus ojos parecían llenarse de lagrimas, —Sabes que siempre he estado enamorada de ti.
—No hablemos de esto Raquel.
—Espere demasiado tiempo para poder tener una oportunidad contigo y cuando entraste mi ventana pensé que la tenía— sonrió con tristeza, —Pero que equivocada estaba.
—Raquel, no era mi intención hacerte sentir mal, cuando entre por tu ventana por la contraseña de Wifi fue una equivocación de Apolo.
Tomo mi mejilla con su mano y su tacto me hizo sentir extraño, no como cuando me toca Malena, con ella siento felicidad solo con su tacto.
Me intente apartar pero antes de hacerlo Raquel se inclinó y junto nuestro labios, le seguí el beso.
Le seguí el maldito beso.
La imagen de Lena pasó por mi mente, ella no merece esto, ella es la mejor persona que conozco.
Rápidamente me aparte, —Olvida lo que acaba de pasar, tú y yo nunca vamos a tener nada.
Recibí un vomito como repuesta, alcancé a moverme y Raquel termino vomitando en una planta.
Cuando termino de hacerlo la cargo en mi espalda intentando no ensuciarme. Dudo si regresarla a la fiesta pero al final decido ir al único cuarto que no ha sido utilizado como motel.
Al entrar veo a Marco, Luis y Gregory jugando videojuego y bebiendo. En la cama Maya, Malena y una morena están platicando.
—¿Y esa quién es?— pregunta la morena.
—La acosadora de Ares— responde Luis riendo.
Raquel murmulla, —¡Bájame!
Les doy una mirada seria, —Todos afuera, ahora— intento no centrarme en la mirada de condición de me da Malena.
Marco levanta una ceja, —¿En serio? ¿Para que necesitas privacidad? Ella está borracha— le da una mirada fugaz a Lena, —Y te aseguro que no quieres tener problemas, amigo.
—Huele a vomito— volvió a hablar la morena.
Intercambie miradas con Marco, el entendió lo que quería decir, alzo las manos, soltando el control de la consola, — Entiendo mi capitán— el sarcasmo en su tono es obvio.
Gregory le da palmadas en el muslo a la morena, —Vámonos nena.
Antes de irse, Marco tomó se la mano a Lena, —Vamos Lena, no necesitas esta mierda.
El tono enojado que utiliza me hace sentir culpable y no puedo dejar de pensar en cómo se siente mi chica.
Malena me da una mirada antes de salir, no logro sostenerle la mirada, me siento tan culpable. Mantengo mis ojos clavados en el piso hasta que escucho la puerta cerrarse.
Deje a Raquel en la cama, a los pocos segundos se quedó dormida. Por otro lado yo no pude dormir en toda la noche, me siento culpable por ese beso.
Malena no necesita toda esta mierda, Malena merece alguien que no se deje llevar por sus impulsos.
••••••
¡Espero les haya gustado este capítulo!Es corto porque es una parte del capítulo anterior pero desde la perspectiva de Ares.
Las faltas de ortografía serán corregidas al terminar el fanfic.
Comenten y voten, les quierooooo<3
ESTÁS LEYENDO
Intentos fallidos (Ares Hidalgo)
FanficMalena Ross, vecina de los Hidalgo, Ares siempre a intentado llevarse bien con ella pero todos sus intentos han sido fallidos, hasta que le pide ayuda a su hermano menor y eso resulta en un lío con su otra vecina. Fanfic del libro A través de mi ven...