58. Paraíso de omegas y gammas- Omegaverse - Larry Stylinson- Terminada

Treinta

Un nuevo día llegó y como de costumbre, al despertarse Louis miró al otro lado de la cama, el cual ya estaba vacío.

Tras soltar un profundo suspiro de resignación, este se fue al baño para darse una ducha e ir a desayunar con Zayn y Liam.

Mientras las gotas de agua caían por su cuerpo, el omega recordó la noche anterior, en la cual se había quedado dormido en los brazos del alfa.

No podía dejar de sonreír pues sentía su omega interior flotar de gusto, al recordar también, el que a partir de ese día, Harry vendría en cualquier momento sin necesidad que fuese la noche de sábado.

Minutos después, este salió, se secó y se vistió para a continuación subir al apartamento.

...-Hey buenos días dormilón-le saludó muy sonriente el delta, el cuál estaba ya en la cocina-...¿Qué tal estás?

-Buenos días, Turbo...emm, ¿Dónde está Liam?

-Oh, él todavía está en la ducha, lo cierto es que hemos tenido una noche muy movidita-hablo nuevamente el mayor-...está muy enérgico por el nuevo trato con ese alfa tan guapo que viene a verte.

Louis sonrió con tristeza.

-Si, me imagino, aunque no me gusta que el ojiverde gaste tanto, está pasando un mal momento y no debería ser así...crees que si le pido permiso a Liam me dejará salir, me gustaría hacer algo.

El delta se encogió de hombros.

-Supongo que no tendrá inconveniente pero ¿Quién sabe?, aunque esta casa es tan mía como suya y tu eres tan hijo mío como suyo, así que tranquilo.

-Gracias Zayn, eres genial.

-Oye pero dime, ¿qué es lo que vas ha hacer?, ¿tú nunca has querido salir?

-Me gustaría comprar unas cosas para recibir a Harry ahora que estará por aquí a menudo, me gustaría hacer algo más por él.

El delta suspiró con pesar.

-Ten cuidado, solo es un cliente, no te ilusiones demasiado.

El omega asintió.

-Lo sé, cada vez que viene me lo deja muy claro...solo busca compañía, ama demasiado a su esposo muerto.

-Bueno, eso puede cambiar-hablo el ojimiel entrando en la cocina y caminando hasta su delta-...algún día puede darse cuenta que su omega no volverá.

Louis negó.

-No, aún así...él me ve como un indefenso niño al que tiene que proteger, nada más...Está demasiado ligado al recuerdo de su idealizado esposo y al amor que se tuvieron, sinceramente creo que jamás encuentre a nadie que le supere.

El alfa chasqueó la lengua con fastidio.

-Ayer yo lo vi muy desesperado por verte, incluso acepto darme el triple de lo que acordamos en el primer contrato.

El omega resopló con molestia.

-No deberías haber aceptado, su hermano le ha robado y puede que necesite cada moneda.

-Claro que no, esos tipos son millonarios, me he informado, su empresa es una de las más solventes del país.

-Aún así, no debiste aprovecharte de su desesperación-Habló el delta.

El alfa miró seriamente a ambos.

-Esto es un negocio y como tal, yo cobro por cada uno de vosotros, que pasa si ocurre algo malo, ¿Cómo sufragaré los gastos del hospital y otros?...esos tipos vienen y van, yo debo velar por todos nosotros.