58. Paraíso de omegas y gammas- Omegaverse - Larry Stylinson- Terminada

Treinta y tres

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Louis estaba dispuesto a castigar al guapo alfa por no haberlo visitado en muchos días y por tenerlo siempre esperando a tener sexo, sin éxito alguno.

El omega nunca había tenido esa necesidad pero desde que el guapo alfa había irrumpido en su vida y le había quitado su virginidad, la inocente coraza también se estaba cayendo poco a poco.

Realmente no le iba ha hacer nada malo a Harry pero si le quería demostrar que no era un tierno e indefenso omega, al que necesitaba proteger pues era ya mayor de edad y estaba lleno de ganas de experimentar.

Este se había estado asesorando con sus dos amigos, Stan y Lukas, quiénes le habían enseñado un par de trucos para enloquecer a los clientes y dejarlos locos de deseo.

Por ello, el castaño estaba tomando la iniciativa y aunque se moría de miedo por si el alfa lo rechazaba, pesaba más su ansia de volver a sentirlo dentro.

Tras llenarlo de besos en el cuello y la cara, este fue un paso más, así que suavemente levantó la camiseta del alfa a la altura del vientre, dejando a la vista sus múltiples tatuajes y continuó dejando suaves besos y seductores roces con los labios y la lengua, los cuales hicieron que este soltase un ahogado gruñido.

-N-No pe-pequeño, no de-deberías hacer esto, no e-está bien.

El omega entonces lo miró con una sonrisa lasciva.

-No puedes cuestionar nada, ya has aceptado el castigo.

Tras decir eso, tiró de la camiseta de este hasta la altura de su cuello, haciendo que finalmente el ojiverde se incorporarse un poco, entonces se la sacó por la cabeza.

-Eres tan sexy, mmm, me encantas-Le susurró el ojiazul al oído.

-Oh n-no...oh jo-joder, pequeño...

El castaño sonrió ante el nervioso balbuceó del mayor y a continuación le dio un tierno beso en la frente y otro en la nariz.

-Voy a tener que amordazarte, no eres un buen rehén.

El alfa negó con asombro pero nada pudo hacer pues el moreno estiró su brazo y tras abrir el cajón, cogió dos negros pañuelos de seda y se los puso en la boca, atándoselo por detrás de la cabeza y también en las manos.

-Quédate quietecito.

El joven empresario muy sorprendido por esa nueva faceta del omega, asintió con la cabeza.

-Así me gusta... bien, entonces sigamos

Louis le besó tiernamente en los pezones, por lo que el mayor sintió un espasmo en su columna que lo hizo estremecerse, así que este volvió a rozarlos esta vez con la lengua.

Harry gruñó mientras con los ojos muy abiertos, vio como el omega se deslizaba sobre su cuerpo como un sigiloso felino acechando a una presa y se detuvo en la cintura del pantalón.

Mordiéndose nuevamente el labio inferior, el omega desabrochó el botón y bajó la cremallera de los pantalones que alfa le había cogido y a continuación de un tirón se los sacó.

Louis quiso igualar condiciones, así que caminó hasta la cómoda y puso una suave y linda música en la cadena musical.

-Como no has venido a mi show, te haré uno solo para ti-le susurró empezando a moverse.

Hsrry resopló y entonces se incorporó hasta quedarse sentado.

El ojiazul se acariciaba el cuerpo lentamente y con erótica intención, mientras las feromonas de ambos flotaban por el aire entrelazandose entre si.