Capítulo 38 // Morado

236 24 0
                                    

Aleene había intentado escapar demasiadas veces, pero siempre era detenida por los guardias, parecía totalmente imposible salir de ahí, incluso cuando realizaba sus actividades no podía salir del campo de vista de los guardias.

Había intentado averiguar a qué se refería su madre, pero no había podido descubrir nada, siempre que se acercaba terminaban la charla, sabía que era algo grave, pero necesitaba información concreta para poder hacer o decir algo más.

Mientras tanto George había pasado los últimos días buscándola en todos lados, por fin había conseguido la dirección que marcaba el libro al que se refería Harry, pero todo estaba perfectamente asegurado de día y de noche, ni siquiera había visto entrar o salir a la chica, y por alguna razón no podía aparecer dentro de la propiedad.

— Te ves hermosa — dijo su madre entrando a la habitación

— Aún faltan algunos detalles, Sra Relish, pero nada de qué preocuparse estará lista para la boda

— Un segundo, por favor

La chica recogió algunos alfileres y salió de la habitación

— Debes dejar de intentar escapar, Clarise, a este paso llegarás a la boda más morada que de blanco

La pelirroja rápidamente se cubrió los moretones de los brazos y dió media vuelta para tomar una bata que reposaba sobre un mueble de madera cercano.

— Serás una novia preciosa

— ¿Por qué?

— Sabes que no puedo decirte

Aleene la miró incrédula

— No puedo creer que me estés haciendo esto

— Es por el bien de la familia, no sabes las atrocidades que se pueden avecinar de la nada

— Quiero ver a Ben

La mayor tomo una respiración tranquila y asintió con la cabeza

— Por eso vine, él está abajo

Aleene quedó un poco sorprendida, y trato de no parecerlo, aunque de forma fallida, después de unos segundos, Ben estaba en la habitación. Se lanzó a sus brazos, y su hermano la abrazó con fuerza, ambos se sentaron en la orilla de la gran cama.

— Lo lamento — comenzó a decir él, tratando de desviar la mirada — en serio lo siento, tú eres mi hermana y yo, fui un completo imbecil, ahora sé que tenías razón

— ¿Razón?

El menor asintió con los ojos llorosos

— La ví, sabes, con alguien más

Aleene sintió como el estómago se le bajó hacia las rodillas, abrazo a su hermano y comenzó a hacerle mimos en el cabello como cuando eran pequeños.

— ¿Edward dijo algo?

— Nada — bufó — y ahora tú estás en este lío, y no sé qué hacer

El pelirrojo llevó sus codos a sus rodillas y escondió su llanto entre sus manos

— Me gustó por mucho tiempo, y creí que yo a ella, con la boda creí que nuestro amor se sellaria aún más, pero la otra noche llegué tarde del despacho y cuando abrí la puerta de la habitación los encontré. No entiendo cómo no pude creerte, y ahora no sé qué hacer, papá dirá que soy poco hombre — tomo un largo suspiro — mamá seguro dirá que es solo un bache en nuestra relación y que debo luchar por ella, pero creo que ahora me estoy cansando de luchar

SOUL /// GEORGE WEASLEY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora