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Pero era imposible calmarlos, inesperadamente, en lo que Baji me miró; Sanzu le da un puñetazo.

-Bastardo...-se limpió la sangre del labio-¡Ya vas a ver!

Baji se le lanza encima a Sanzu y le da puñetazos sucesivos, Sanzu apenas podía reaccionar.

-¡BAJI POR PAVOR!-gritó desesperada, volteó a ver al chico de cabello lila-¡Mitsuya, deja de andar comiendo mocos y ayudame!

Sanzu toma del cabello a Baji acercándolo hacia él, en ese momento con sus dos piernas aparta a Baji.

-¿Ahora peleas como una mujer?¿Tomandome del cabello?-Baji rió.

Sanzu seguía con el ceño fruncido.

Los dos se volvieron a acercar, de la nada Draken sostuvo a Baji y Mitsuya a Sanzu. Ella se colocó en medio de los dos.

-¡Basta! ¿Acaso tiene que venir todo un pelotón a detenerlos cada vez que se ven?¡Esto es inaudito!

-¡Él fue el que empezó a molestarte!-gritó Baji.

-¡Yo no hice nada que no me permitieran hacer!-gruñó el ojiazul.

Baji miró a la chica.

-Yo... pensé que él era alguien más, por eso grité-dijo la verdad-Yo no te necesito como niñero Baji-san, sé que Sanzu-kun no me va a hacer daño. Si me disculpan, voy a caminar.

_____ abrió la puerta, y para su sorpresa todos estaban allí, Smiley cayó de cola cuando ella abrió la puerta.

-¡¿Estaban escuchando detrás de la puerta?!

Angry le dio un codazo a Smiley.

-Ves, te dije que era mala idea.

Pero _____ los apartó y siguió hacia el ascensor, presionó el botón pero alguien la alcanzó por detrás.

-¡Esos dos están mal! Ellos nunca antes se habían peleado.

Emma entró al ascensor con ______.

-Me tienes que contar todo lo que pasó.

×

_____ había guiado a Emma a un piso privado de aquel edificio. Era un departamento, tenía habitaciones, baños, lo normal que tiene uno. Claro, sus decoraciones eran algo infantiles pero era una casa.

Se encerraron allí.

-Sanzu me besó-espetó.

Emma abrió sus ojos como platos.

-¡QUÉ,QUÉ,QUÉ!

-¡SIII!

Emma emocionada como una niña se tiró a la cama.

-¡Cuentame todo, y con detalles! -se posicionó boca abajo de la cama y tomó una de las almohadas de la cama.

______ rió.

-¡Por Dios Emma!¡Me da muchísima verguenza!

-¡Daleeee!¡Quiero saber!-suplicó.

-Bueno...si tanto insistes...-tomó aire y luego lo soltó-¡Fue mi primer beso y fue demasiado salvaje!-su cara enrojeció.

-¡ESPERA!¿Lo viste sin...?

-¡Sí!

Emma se tapó la boca.

-¡¿Cómo es?!

-¡Un Dios griego!Dios mío todavía no me lo creo-se dio palmadas en las mejillas por un inúltil intento de borrar el carmesí de sus mejillas-Luego él me subió en la mesa de Hockey y me besó con más intensidad que...no me lo creo.

-Quién lo diría,los callados tienen sus secretos-dijo juguetonamente.

-Pero... él se dejó llevar y yo casi. Hasta que vi a otra persona en vez de él. Me asusté, por eso grité.

-¿Qué?¿A quién viste?

_____ no le iba a decir a Emma, ¿Y si luego la juzgaba por eso?

-No, sólo como esos asesinos que pasan en las películas. De repente fueron los nervios.

-Puede ser-le sonrió abrazando aquel peluche-Este lugar además de restaurante ¿Es hotel?

-No sé decirte, esta habitación la usaba cuando mi papá estaba en el restaurante pero el edificio no es como tal un hotel.

-Oh, creo que comprendo. Podríamos hacer de esto nuestra guarida, ¿Sabes? a veces es tedioso estar con mi hermanito todo el día.

-¿Hermanito?-repetí.

-Sí, mi herma...¡Cierto, eres nueva! Mikey es mi hermano-le sonrió.

-¡Dios, Emma!-estalló en risas.

-¿Qué es tan gracioso?

-Tienes a alguien que te ayude con Draken-le dió unos codazos-Pídele ayuda a Mikey.

Emma se puso toda como un tomate.

-¡No me atrevería!¿ y si...?

Se lanzó a los brazos de la contraria y la apapachó.

-Entonces yo te ayudaré.

×

Los días después de ese ______ no pudo salir más de casa por el hecho de que su madre luego de que su pequeña niña se escapara para irse con unos pandilleros casi le da un infarto, tanto así que tuvo que cancelar sus preciados viajes al extranjero.

Pero ella siempre encontraba como salir, de una forma u otra. Ya sabía el plan, podía ver la silueta del pelinegro más allá de las barras de metal que llevaban al bosque. Salto de la ventana aferrándose del tuvo del techo.

Y así era su rutina desde que su mamá le empezó a echar más el ojo.

La mayoría de las veces Baji y esa chica se desvelaban estudiando, pero claro, los métodos eran divertidos. Ella nunca había sido tan felíz, ahora tenía dos personas especiales en su vida; Chifuyu y Baji, alguien quién le llamaba mucho la atención (Sanzu), el chico de cabello lila que siempre la ayudaba cuando se volvía un completo desastre con los chicos y claro, los colegas de la Toman y su nueva amiga Emma.

Su corazón dió un vuelco en los últimos días cuando Sanzu la invitó de paseo a un parque. No pudo evitar sonrojarse ante tal acción. ¡Le había llevado un llavero con un conejito con uniforme de doctor! Era un regalo algo inusual pero lo había aceptado.

Toda su vida parecía haber mejorado y todo gracias a Baji-san, ella estaba tan agradecida con él. No tenía palabras para expresar cuánto lo quería.

Bajaba las escaleras con su mochila en la espalda, estaba sonriendo y de oreja a oreja sabiendo que en esa tarde estaría con Baji-san y su lecciones de motocicleta.

-¡No vemos!-apenas agarró el picaporte y alzaba su mano para despedirse, pero el ambiente fue interrumpido por su madre.

-Hoy es el día en el cuál tu hermano regresa, estará de vacaciones del internado. Así que tú deber es buscarlo-comentó mientras caminaba de un lado a otro haciendo sonar esos molestos tacones y aquel vestido rojo que se meneaba de un lado a otro.

La mochila se cayó al poco tiempo, sus ojos se fijaron en aquella descarada mujer.

-¿Por qué no me dijiste nada?

Esperó un momento para sacar aquel cigarro de la boca y soplar aquel humo con tal delicadeza que era desesperante.

-¿No te lo había dicho ya?-agregó con cierto tono-Aaaah, cierto. Ahora como te la pasas con esas bola de ratas buenas para nada ya ni te acercas a la familia ¿No es cierto, _____?

Se quedó estática, pero las palabras de su madre no iban a paralizarla y mucho menos iba a dejar que insultara a sus amigos.

-¡No voy a permitir que...!

Su madre bostezó.

-Ahorrate tus palabras, ahora ve y busca a Tsuyomi, que no tengo todo el día.

𝐀𝐦𝐧𝐞𝐬𝐢𝐚|𝐊𝐞𝐢𝐬𝐮𝐤𝐞 𝐁𝐚𝐣𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora