Del amor al odio por West [West#0]

6- Mi Compañera.

Primer año de April

April Miller

Mi padre se detuvo, me puse mis gafas de sol y bajé del auto. El viaje se había vuelto un poco incómodo a medio camino y es que la verdad, no teníamos mucho de que hablar, éramos padre e hija, pero lo sentía como un extraño. Después de la muerte de Jackson, papá intentó acercarse a mí y realmente logramos volvernos un poco cercanos, pero no lo suficiente. Estaba claro que él me quería, no dudaba de ello, pero... no era lo mismo de antes, había descubierto demasiadas cosas, él durante mucho tiempo me hizo a un lado, no podía solamente fingir que todo estaba perfecto entre nosotros. Con el tiempo quizás las heridas iban a sanar y yo iba a poder perdonarlo de verdad, pero era muy pronto, a penas hacia unos meses atrás me había ido a vivir a su casa, por mi hermano, y tan sólo habían pasado unos meses desde que él ya no estaba.

Realmente la universidad para mí significaba un escape, un escape de la mujer que decía ser mi madre, un escape de una casa que no era mía y a la cual no sentía que perteneciera y principalmente un escape de una relación con mi papá que no estaba yendo tan bien como él quisiera. Noelia después de la partida de Jackson, siguió siendo buena conmigo, pero supuesto ella había cambiado, no conmigo, en realidad en todo, ya no era la misma, en algún momento la escuché decir que había perdido una parte de ella y la entendía, yo sentía que había perdido una parte de mí con él se fue y eso que a penas lo estaba conociendo, pero ella era su madre, lo había llevado en su vientre, lo había visto crecer, había estado con él en todo momento. Porque ella era una buena madre, ella no merecía perder a su hijo.

—Cariño, quiero que sepas que si necesitas algo sólo debes llamarme —la voz de mi papá me sacó de mis pensamientos. Puso sus manos en mis hombros y me vio a los ojos—. Mira, sé que no vamos a recuperar el tiempo perdido, pero quiero que no perdamos más tiempo, la vida es corta.

Aparté la mirada de él, porque sentía que mis ojos empezaban a llenarse de lágrimas y sabía que si lo veía, iba a llorar. La vida Jackson había sido muy corta y realmente nunca pude recuperar el tiempo perdido con él.

—Lo sé, pero es cuestión de tiempo, hay heridas que aún no han sanado, pero sé que aún se puede recuperar algo de lo que éramos antes —sonrió un poco.

—Sé que te lastime, no hay justificación, pero lo que más deseo, es que tú y yo estemos cerca, que puedas tener al padre que no tuviste antes —bajé la mirada—. No quiero perderme más momentos de tu vida, sin importar cómo pasaron las cosas, eres mi hija y te amo.

—Sé que en el fondo también te amo, papá —sonrió y abrió sus brazos

—¿Me das un abrazo? —rodeé los ojos por debajo de los lentes.

—Bien, pero tampoco abuses de esa confesión —lo abracé y me apretó fuerte—. Papá, me asfixias —besó mi mejilla y me soltó.

—Primer año de universidad, mi hija va por ti —suspiré.

—Desearía que estuviera aquí —dije sin pensarlo.

—Ten por seguro que él está aquí contigo, él siempre está —asentí y apreté la mandíbula para no llorar.

—Lo mejor será que me vaya, en la hermandad le hacen un recibimiento a las nuevas, así que... —tomé mi mochila.

—Claro —sacó mis maletas—. Cariño, ¿estás segura de que estarás bien ahí? Porque sino, podemos pagar algún lugar...

—En serio quiero estar ahí, quiero conocer nuevas personas y si me quedo en alguna habitación de la residencia o en algún departamento o algo así, no lo haré, me conozco y no lo lograré.