| C A P Í T U L O 17 |

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Después de esa revelación en el cuarto junto a Dante, el día pasó rápido y fue más complicado de lo normal

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Después de esa revelación en el cuarto junto a Dante, el día pasó rápido y fue más complicado de lo normal. Stefano estaba muy enojado porque aún no "sabíamos" nada sobre nuestro enemigo que nos había declarado la guerra. No estaba para nada contento. En mi caso aún no sabía si Marcos, el hombre poeta, era el mismo hombre del cuál Dante había mencionado, una parte de mí decía que sí. Era mucha coincidencia y explicaba como era que sabía cosas sobre mí, sobre mi pasado, aprovecharía la nueva alianza que estaba por hacer para descubrirlo.

Había tomado la decisión de llamar al número que me había dado, pero no encontré ningún momento libre para poder hacerlo. Sólo esperaba que a este hombre no le importara que llamara a la hora de la cena, tenía que hacerlo sola y en donde Dante no me pudiese escuchar. No estaba segura si él volvería a dormir en mi cuarto, no quería asegurar nada por sentado, no me arriesgaría.

Le comenté a Lorenzo sobre mi problema de la forma más discreta que pude, pero terminó sin entender nada. Este hombre a pesar de ser fuerte e inteligente, era un completo inútil a la hora de entender indirectas. Solté un suspiro de frustración y cansancio. Esto era difícil, necesitaba un lugar tranquilo donde no me molestaran y dónde no pudieran escucharme, pero hoy parecía que todo el mundo necesitaba mi ayuda. ¿Qué acaso no tenían sus propias responsabilidades?

Salí de la ducha, el día había sido agotador y la hora de la cena se acercaba, debía darme prisa si quería realizar esa llamada, miré mi imagen algo borrosa en el espejo, lo que veía era a una mujer que había pasado por una mierda de vida que estaba a punto de tomar las riendas de su vida y destino para poder cumplir su sueño de tener una vida normal de una vez por todas. Salí en una toalla con la mente decidida hacia la mesita de luz donde se encontraba lo que necesitaba, agarré el celular junto con el dispositivo que interfiere la señal de micrófono y demás, y volví al baño. Prendí de nuevo la ducha esperando que el ruido camuflase el sonido de mi vos, siempre y cuando nadie de afuera me escuchara todo estaría bien. Lo mismo hice con el dispositivo y con mi celular, busqué la aplicación que me había descargado para hacer grabaciones telefónicas y la prendí. Después de eso, marqué el número que había en la tarjeta que había obtenido. Tuve que esperar un par de segundos, al terminar el cuarto tono de llamada escuché la voz de un hombre.

—Sabía que llamarías, Verónica.

Su voz sonó aún más aterciopelada que antes. ¡¿Pero en qué estaba pensando?! Verónica ¡concéntrate!

—Marcos —respondí con voz monótona.

—Me han comentado que quieres unirte a mí, pero que tienes tus propias condiciones. Te escucho.

Dudé al principio, pero esto es lo que quería, este hombre era el fin para mi cometido, para lograr lo que quería. Pero eso no significa que iba a confiar ciegamente en él, no, no había chance de que hiciera eso. Por el momento creería en su palabra, pero no me usaría como su peón como hizo Stefano. Este ahora era mi juego y se jugaría según mis reglas.

Breaking The Chains Of Cruel Fate [+18] (BREAKING #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora