SNK: -"la última bruja"
el clan Ilazki era uno de los mayores misterios para todos los que alguna vez preguntaron sobre el mismo. nadie sabía con certeza las atrocidades por las cuales las mujeres de ese linaje habría pasado pero si se tenían rumore...
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0.61.
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Brujas del pasado.
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Tres días después.
Las tropas se habían puesto en marcha nuevamente, tenían verificar que todo estuviera bien para que la gente que estaba en la ciudad subterránea pudiera volver a sus hogares. Esto tomaría su tiempo ya que debían de investigar también el por qué habían aparecido los titanes en el pueblo de Ragako, pueblo en dónde vivía la familia de Connie.
Por ahora todos se mantenía en la sede central de Trost, lugar en donde el mismo comandante estaba aún descansando tras haber perdido un brazo después de la terrible pelea contra Reiner y Berthold que ahora estaban en paradero desconocido. Por mientras esto pasará la legión seguiría con sus planes al igual que las otras tropas, aún que con Erwin casi sin poder salir de ella cama quienes tuvieron que tomar las decisiones fueron Levi y Hange, quienes a su vez habían hablado con Pixis; a partir de ese momento varios rumores se comenzaron a expandir por la guarnición.
—¡Hace cuanto está dormida?— Maxine preguntó mirando hacia su amiga quien aún descansaba en su cama.
—Lloró toda la noche, es normal que este agotada— la castaña a un lado de su pareja comentó, habían escuchado a la joven lagrimear por mucho tiempo y era completamente normal que estuviera así de cansada.
—Oigan, intenten despertarla, la teniente Hange la mando a llamar— Bianca se acercó con una pequeña bandeja en sus manos, llevaba un vaso con agua y lo que parecía ser un sándwich simple de queso.
—Que intensidad tienen los de la legión últimamente, por cierto, ¿cómo está Astra?— la rubia movia un poco el brazo de Amaris para despertarla a la vez que observaba a la azabache que depositaba la bandeja sobre la pequeña mesa que había en la habitación.
—Mejor, aún que ahora que se fue con esos de la legión, no tengo idea de que estará haciendo— negó, se acercó a la cama y tocó la nariz de Amaris con lentitud, no había forma de despertarla.
—Ojala dormir como un oso, ni se mueve ni nada, solo babea.
Berta señaló a la joven en la cama haciendo reír a las otras dos que estaban a su lado, la castaña seguir de costado y aparentemente el sueño se había apoderado completamente de ella, no encontraban manera de hacerla despertar.
