Capítulo 4: Beatriz.
|Harry|
—Buenas noches princesa.— me despedí de ella dejándola en la entrada del portón de su castillo.
—Buenas noches, príncipe.— hizo una pequeña reverencia, sonreí— Nos vemos... pronto.— dijo con inseguridad.
Puse los dedos en mi frente e hice un pequeño gesto de despido militar, ella me miró con desagrado por unos instantes y luego dio media vuelta para poder ingresar a su hogar. Observé a los dos guardias que estaban en los extremos de la puerta, ambos llevaban una larga porra entre sus manos manteniéndola firmemente contra el suelo.
Les hice un gesto con la cabeza saludándolos y despidiéndome al mismo tiempo, ellos ni se inmutaron en responder, solo siguieron manteniéndose como estatuas alertas a cualquier movimiento peligroso que ronde al castillo.
Comencé a caminar de vuelta hacia el parque, mi cuerpo me pedía un poco de entretención. Hace tres días que estoy en Windsor y no extrañaba para nada mi país, aunque si sus bares y costumbres, acá era todo un poco más diferente y esperaba que fuese más entretenido, al menos por los seis meses que me quedaré.
Es la primera noche que pude salir de mi hogar y no necesariamente para ver a la princesa. Cuando supe que había escogido a Francis para su cita prolongada me había puesto muy feliz por él, sabía que estaba mucho más entusiasmado en poder convertirse en el Rey aunque no se las verdaderas intenciones que tiene con Katherine.
Por mi parte, realmente no tengo interés alguno por todo este rollo, estoy aquí gracias a mi padre quien fue la persona que prácticamente me obligó a venir, él no podría soportar en que alguno de sus hijos no sean escogidos; aunque sabía que todas sus esperanzas iban por Francis y deseaba que fuese él, tenía que traer a su segunda opción, yo.
No voy a mentir, mi objetivo principal es que la princesa se fije en Francis, es por eso que le ofrecí mi ayuda. Si Francis coronaba como rey de Inglaterra, el Reinado de Bélgica quedaría completamente en mis manos por ser el único descendiente restante, mientras eso no suceda, Francis seguiría siendo la primera opción de mis padres. No podía decirle a Katherine que si me interesaba la corona como ella lo dijo hace unos instantes, porque si me interesa, pero no precisamente la de Inglaterra.
Es por eso que intentaré sacar un buen provecho de esta situación.
Además, se que los Baskerville son muy partidarios de la familia y si me preguntan, no tengo interés en tener hijos.
En tanto, disfrutaré estos seis meses que son más que unas vacaciones mientras finjo tener interés por la princesa.
Caminé aproximadamente diez minutos hasta llegar a la entrada del puente, solo se escuchaba el pacífico del agua del río chocar contra las piedras y contra las propias olas que iba creando. Pude divisar a dos vigilantes de espaldas, aquellos que se desviven para evitar el ingreso de la gente del pueblo.
Las piedrecillas sonaron bajo mis zapatos poniéndolos alerta en la dirección contraria, no pude evitar sonreír al ver que no tenían ni el más mínimo sentido auditivo; me agaché para recoger una roca del suelo y juguetear con ella en mi mano lanzándola hacia arriba y atrapándola al mismo tiempo. Cuando llegué allí, golpeé la reja haciendo un pequeño sonido entre el contacto de ambas durezas.
Ellos no tardaron en darse la vuelta. Sus rostros parecieron relajarse cuando vieron que era alguien de Windsor y no de Tangier Lane.
Mi sonrisa se enanchó.
—¿Qué se le ofrece, príncipe?—preguntó una de ellos, alto y robusto. Si, la mitad del pueblo ya me conoce, ser príncipe de Bélgica es algo de que hablar, y más si hay dos hermanos peleándose por el corazón de la futura reina.
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Baskerville |h.s|
FanfictionCuando lo vi por primera vez, no hubiese imaginado todo lo que iba a provocar. Esos ojos esmeralda podrían enamorarme solo con una mirada, esa sonrisa que podría derretir hasta al iceberg más sólido en solo un par de segundos, esa voz que penetraba...