Cuando Mariana, una joven que huye, es mordida por un lobo en el bosque, descubre un mundo que no sabía que existía: un mundo de hombres lobo. Ahora Mariana debe adaptarse a su nueva vida en la manada Sombra de Luna bajo la dirección de un seductor...
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Me sentí más aliviada cuando Sky finalmente se detuvo en un Cadillac SUV, sentada en el asiento del pasajero, mientras un tipo rubio a su lado conducía.
-¡Ahí estas! -gritó, ayudándome a entrar en el auto. Todavía me retorcía de dolor por estar tan lejos de Jungkook.
-Te dije que no podías irte. ¿No es así? -me regañó.
Asentí con la cabeza.
-Sí, sí. Lo sé.
El auto se puso en marcha y pronto nos dirigimos en dirección al hospital. Cuando más me acercaba, más disminuía la presión sensual. Gracias a Dios.
No creía que mi cuerpo pudiera soportar otro pensamiento sobre Jungkook sin su ropa. El mero hecho de recordar algunas de las imágenes que habían pasado por mi mente me hacían sonrojar.
Noté que los ojos del conductor rubio me miraban por el espejo retrovisor.
-Así que esta es la nueva Luna, ¿eh? -preguntó, sonriendo- ¡bienvenida a la familia!
Se parecía mucho a Sky por alguna razón. La misma complexión, la misma estructura ósea. Solo sus ojos eran diferentes. Mientras que los de Sky eran de color verdes jade, los suyos eran de color marrón rojizo. Eran ojos amables.
-Soy Alex el hermano de Sky -dijo- es un placer.
-Yo también estoy encantada de conocerte -dije, frunciendo el ceño- perdón, ¿acabas de decir... Luna? ¿Que es eso?
Sky le golpeó en el brazo de forma fraternal, sacudiendo la cabeza.
-¡Solo tenías que abrir tu gran pico, ¿no es así?! Se supone que no debemos entrar en detalles hasta que ella llegue a la casa de la manada, ¡tonto!
-Lo sé, lo sé -dijo Alex, haciendo una mueca de dolor y frotándose el brazo.
-Espera -dije- ¿a donde dices que vamos?
Sky suspiro y se giró para mirarme.
-Bueno, supongo que no tiene sentido ocultrsratelo por más tiempo. Vamos a la sede secreta de la Manada Sombra de Luna. Tu nuevo hogar.
Trague saliva. De repente, todo se había vuelto mucho más complicado.
***
La casa de la manada no era en absoluto lo que había esperado. Lo que Sky había descrito como un escondite se parecía mucho más a un maldito castillo.
Me quedé con la boca abierta cuando nos acercamos a la enorme y pintoresca estructura, rodeada de bosque por todas partes.
Había una extraña mezcla de equipamiento moderno (autos estacionados en el exterior, faroles) y los antiguos caminos empedrados y el puente levadizo. Parecía de otro mundo.
