Una Visita Sorpresa

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"Sesshomaru"

Esa simple palabra, ¿ese nombre en particular porque? ¿Que significaba?

Esas eran la preguntas que se hacía la azabache pero decidió no darle importancia  así que se preparó para dormir ya que le vendría un duro día de trabajo mañana, y no gastaría tiempo pensando en eso.

El amanecer ya había hecho su aparición entrando por la ventana los primeros rayos del sol que daban en la cara de nuestra chica que empezó a abrir esos ojos color chocolate, se sentó en su cama y se dió cuenta de que se le iba a hacer tarde para el trabajo se ducho y alistó lo más rápido que pudo y salió corriendo en el camino se compraría algo para desayunar, apresuró el paso pues no quería llegar tarde ya que solo faltaba unos pocos días para que le dieran sus vacaciones, en fin llegó a su trabajo seguida de Akio quien nunca se despegaba de ella.

Su trabajo siguió con tranquilidad ese día en particular estubo algo aburrido, ya que su mejor amiga no estaba.

Kagome: Ahh (bostezo) este día si que está aburrido, parece que a Eri le adelantaron sus vacaciones- se quejaba.

Sora: Oye kagome ¿no vas a almorzar?preguntaba un chico de cabello por los hombros junto a ella.

Kagome: Ah Sora me asustaste, pero si ya es hora de comer valla que vuela el tiempo jeje.- respondió mientras buscaba su comida.

La comida paso con naturalidad entre risas y comentarios absurdos de parte de Sora.

En otra parte.

Sesshomaru: Rin- llamo el demonio a la niña.

Rin: Dígame amo Sesshomaru- respondió curiosa.

Sesshomaru: Aún piensas en esa miko?- se extraño por preguntar eso, pero no le dió importancia.

Rin: Ah eh pues...... La verdad es que si yo de verdad le tengo un gran aprecio es como una madre para mí, ¿porque la pregunta amo?.

No obtuvo respuesta alguna Sesshomaru solo se fue dejándola cerca de la cabaña, lo que nadie esperaba es que Sesshomaru realmente no se fue del todo de la aldea.

Inuyasha: Oye Rin, que quería el idiota de Sesshomaru esta ves?- pregunto un tanto irritado ya que su aroma seguía presente en la aldea.

Rin: Usted no puede hablar así del amo Sesshomaru no está bien, además no le diré nada fue muy grosero.- hablaba mientras se dirija con Sango.

Inuyasha: Khe yo le hablo como yo quiera, ja está bien no me digas ni me interesaba tampoco.- resongaba mientras salía de la cabaña.

Inuyasha se dirija al pozo por alguna razón había sentido el aromas de Sesshomaru en ese lugar pero antes de llegar algo lo detuvo en seco, un olor familiar, de alguien que no veía hace tiempo.

???: Inuyasha ya volví, ¿como has estado?- preguntaba una chica.

Inuyasha: K...kikyo, ya volviste te habías tardado!- reclamaba el hanyo molesto y alegre a la ves.

Kikyo: Hay Inuyasha, te dije que tardaría unos días, esa aldea a la que fui estaba un poco lejos, pero ves ya estoy de vuelta no hay de que preocuparse.

Inuyasha abrazo a Kikyo y le dió un tierno beso para después irse a la aldea olvidando por completo el motivo del porque se encontraba por ahí.

Mientras tanto Sesshomaru se encontraba justo al lado del pozo devorador de huesos, el aroma de la miko era algo fuerte en ese lugar así que sin pensarlo dos veces saltó dentro del pozo siendo envuelto por una luz rosa, extrañamente el pozo lo había aceptado.

En el futuro.

Hora 7:30pm una chica de cabellos oscuros caminaba por la calle con su mascota de regreso a su casa, ese día había sido realmente aburrido y su casa no era la excepción, cuando subió las escaleras del templo sintió una corriente eléctrica cruzar por su espalda. Sintió una energía demoniaca muy poderosa pero extrañamente familiar, decidió caminar un poco para investigar junto con Akio quien se había puesto delante de la chica al sentir esa energía

Camino y camino pero no encontró nada así que decidió entrar en su casa pero lo que no sabía era que el causante de esa energía estaba observándola cuidadosamente desde una de las ramas del árbol sagrado

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Camino y camino pero no encontró nada así que decidió entrar en su casa pero lo que no sabía era que el causante de esa energía estaba observándola cuidadosamente desde una de las ramas del árbol sagrado.

Kagome entro como si nada a su casa, encendió las luces y se dispuso a cocinar algo para cenar.

Kagome: Akioo!!!!!! Ven a comer!!!- gritaba la chica a su mascota.

El zorro obedeció la orden de su ama y salio corriendo para entrar a la casa. Esa noche era raramente calurosa así que se ducho y se vistió con un short negro un poco indecente con una camisa rosa pastel larga, bajo y salió de la casa para limpiar un poco pero todavía sentía esa energía y no bajaría la guardia por nada.
Empezó a barrer las hojas que caían del árbol sagrado cuando terminó se sentó bajo el árbol junto a ella estaba Akio de pronto soplo una brisa fría que removió el cabello de la chica pero por alguna razón Akio se alteró y se puso en alerta de la nada empezó a chillar mirando la copa del árbol cuando Kagome miro hacia arriba lo que vio no se lo espero nunca.

Kagome: Kyaaaaaaaa!!!!!

Kagome: Kyaaaaaaaa!!!!!

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Se...se..Sesshomaru!!??, Que haces aquí- tal como se asustó se tranquilizó. Ya que ese youki que sentía pertenecía a alguien que ya conocía y no representaba un peligro.

Kagome: Vamos responde, te hice una pregunta, pero lo más importante es como lograste cruzar el pozo?- de nuevo si respuesta.

Espero y les haya gustado no olviden votar, comentar y compartir.

Nos vemos..

De Humana a YoukaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora