Amor Entre Alfas

Capítulo 16

El club fue construido sobre un acantilado cerca del océano. Sus torres rozaron el cielo, y se hundió profundamente en la tierra debajo, con niveles por el acantilado. Diseñado con ladrillo rojo y piedra gris, presumía de una sensación de renacimiento del Viejo Mundo, así como impresionantes vistas del mar y las montañas al norte de Virona. Al salir del nuevo auto que el padre de Kao había entregado a Ohm y Singto como regalo de inauguración de la casa, Ohm admiraba el tweed de Pavel, el traje de espiga de color caqui y la camisa a rayas de color marrón y blanco debajo del chaleco. La corbata tenía el único toque de color, un toque de naranja en el patrón, y todo el conjunto realzaba la piel blanca y rosada de Pavel, de alguna manera lo hacía parecer más joven y más relajado. Oh tal vez simplemente estaba más relajado después de la agradable semana que habían tenido.

Pavel había hechizado a Ohm, cuerpo y alma. Por lo que podía ver, Pavel sintió lo mismo. Siempre manteniéndose a cierta distancia de Ohm y tratándolo con el respeto que mostraría a un omega, y no a cualquier omega, sino a uno con el que fue contratado. Como Singto había ordenado, habían "llegado a conocerse". Y no solo de manera desnuda. Hablaron, caminaron y exploraron los terrenos juntos.

Ohm había escuchado historias de los días de Pavel en la universidad antes de establecer su nueva clínica e hizo preguntas sobre New. Hizo sonreír a Pavel, y descubrió que realmente quería saber más sobre el hombre que Pavel había amado y perdido. Le dolía el corazón pensar en el dolor de Pavel cuando New y su hijo murieron, y se dio cuenta de que el dolor se alivió cuando Ohm preguntó por él, y que hablar de su Érosgápe perdido hizo feliz a Pavel. Ohm quería que él fuera feliz. Quería que fuera tan feliz que nunca se iría. Los días se habían convertido en una hermosa, brillante y dorada neblina de esperanza, algo que Ohm nunca había experimentado antes.

Singro parecía muy complacido, tratando a Pavel con tanta amabilidad que Ohm se sintió casi delirante al ver a su omega interactuar con su amante. Las líneas alrededor de los ojos de Pavel eran más claras, y la tensión que solía tener en sus hombros, un hábito de años, probablemente, había desaparecido casi por completo. Una bocanada de orgullo levantó el pecho de Ohm. Él había hecho eso. Había dejado a Pavel saciado y satisfecho.

Off se había ido hace una semana y Singto había alentado a Ohm y Pavel a salir a la ciudad.

Kao también lo había sugerido enérgicamente ya que el jodido entusiasmo de Ohm y Pavel estaba haciendo que el pobre Gulf se sintiera más cachondo que nunca.

Pavel extendió la mano y ajustó el sombrero de Ohm, hecho de una nueva mezcla de lana gris y fieltro de chinchilla con una banda de seda gris más oscura. Lo había comprado localmente para llevarlo al sastre, y Singto había declarado que estaba tan bien hecho como cualquier otro en la ciudad.

-Te ves guapo -dijo, cepillando los hombros del traje favorito de Ohm, una mezcla de lana y algodón a cuadros gris y negro con pequeños corazones rojos bordados en todas partes. Lo había adornado con una corbata negra con rosas exuberantes. Un traje romántico para una noche romántica.

Ohm se puso más alto, mirando a su amante, con el corazón en la garganta y zumbando de emoción. No podía creer que Pavel estuviera aquí con él en público, y estaban juntos. Nadie más lo sabría, por supuesto, pero fue suficiente que Ohm lo supiera. Saber que el hombre apuesto y mayor a su lado era suyo y solo suyo hizo que sus instintos alfa posesivos cantaran de alegría.

-Es una buena noche -dijo Pavel, mirando hacia el cielo lleno de estrellas-. Pero el viento del océano es frío -Se estremeció ligeramente. Habían dejado sus abrigos más pesados con la esperanza de que el clima más cálido que habían disfrutado en el jardín más temprano en el día se mantuviera.