"...El hombre que restauraba libros antiguos y cuidó de mi pierna lesionada no era un asesino. Pero del hombre que acababa de ahogarme hasta casi hacerme desmayar, no estaba tan seguro..."
||2Jae||
||Adaptación||
Inicio: 26/08/2020
Fin: 15/11/2021
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~⸙~
El sheriff Crow y Rory atravesaron la puerta principal mientras inclinaba a Jaebum contra la pared del vestíbulo. Los llamé tan pronto llegué al alcance del Wi-Fi de la casa.
—¿Cuánto tardará la ambulancia? —Comencé a quitar el abrigo húmedo de Jaebum.
—Diez minutos más o menos. —Rory se arrodilló y abrió una mochila de suministros médicos. El sheriff Crow se unió y ambos me ayudaron a quitarle la mojada camiseta.
—Solo es un rasguño. —Jaebum no abrió los ojos. Rory apretó los dedos en el cuello de Jaebum y se congeló.
—Mierda, el pulso es lento.
Demasiado lento. Saqué la gasa del agujero de bala de Jaebum debajo de su clavícula.
—Ahí.
El sheriff Crow inclinó a Jaebum hacia adelante y se quedó mirando la herida de salida.
—Salió limpia, pero perdió mucha sangre.
—Tenía suficiente en mi botiquín de primeros auxilios para ponerle alcohol y la gasa, pero no pude detener el sangrado. Y el ruido en sus pulmones ha empeorado. —Metí el cabello de Jaebum detrás de su oreja. Se apoyó en mi tacto.
—Rojo.
—¿Rojo? —preguntó el sheriff Crow.
—Así me llama. —Comencé tirando de la camisa húmeda el resto del camino, pero perdí el equilibrio y caí al lado de Jaebum. El sheriff Crow agarró mi codo y me miró a los ojos.
—Rory, llévalo arriba y caliéntalo. Parece que no puede mantenerse más en pie.
—No, estoy bien. —Negué y alcancé la mano de Jaebum.
—No, no estás bien. —La preocupación arrugó los ojos del sheriff—.Rory, adelante.
—Sí, señor.
—Esperaré con él la ambulancia. Estará aquí pronto. —El sheriff Crow se movió alrededor de la bolsa de lona mientras Rory me ayudaba a levantarme—. Hasta entonces, comprobaré su herida. Va a estar bien.
Rory me estabilizó y me condujo hacia las escaleras.
—Espera. —Apartó la mirada de la bolsa y la dirigió a mí— ¿Viste a alguien? ¿Alguna pista de quién intentó dispararte?
—No.
—¿Podría haber sido otro accidente de caza? —Se quitó el sombrero y lo tiró al pequeño asiento—. ¿Una bala perdida?
