El Último Rey. Sungjake

015

- ¿Me concede esta pieza? - la mano de Riki fue extendida hacia Jake como si de la época victoriana se tratara. Sim rio suave mientras tomaba la mano de Nishimura.

En el otro lado de la esquina estaba Jungwon bailando sexy a Jongseong, mientras este con sus ojos le pedía ayuda a Heeseung que un poco más alejado reía ante la escena.

- Creo que pronto me pasaré de copas. ¿Seré el padrino, no?

Sim rio asintiendo. - Pues sí. ¿Qué? ¿Acaso ya te arrepentiste?

Riki bailaba de manera suave con Jake. - ¡No!, claro que no. Solo quiero asegurarme que Choi no me quite el puesto.

Jake solo negó. - Él me ha ayudado bastante todo este tiempo... Creo que sin él aún no hubiera aceptado mi presente.

Riki entrelazó sus dedos con los de Sim. - A veces Dios nos quita algo muy importante para darnos otro sentido a nuestra vida. Muchas veces somos renuentes al cambio y tendemos a despreciar lo nuevo que viene. El pequeñín en camino será la forma más bonita de darle otro sentido a tu vida.

Antes, Jake hubiera llorado ante esas palabras, pero ahora era diferente. Ahora sí quería olvidarse de todo, perdonar y empezar de nuevo.

- Me iré a Jeju en unos dos meses. - le confesó. - Siempre quise vivir cerca a la playa. En Jeju no hay mucho frío, ni es tan caluroso, hay escuelas y guarderías. El tren pasa todos los días a diferentes horas... Planeo dejar mi cargo pronto y desaparecer de los medios. No quiero que el niño crezca bajo los flashes mediáticos por-

- ¿Niño?

Riki era astuto.

Sim soltó una risa nerviosa. - Jajaja... Sí. Es niño.

Nishimura iba a decir algo, pero de un momento a otro abrió sus ojos grandes. Jake volteó sobre su espalda, Jungwon y Sunoo habían escuchado todo.

Oh oh.

- ¡¿QUÉ?! - gritaron ambos llamando la atención de todos. - ¡ES UN NIÑOOOOOOOOOOOO!

Por más de una hora, todos fueron a preguntarle si lo que habían gritado aquellos jóvenes era verdad. Genial, pensó, la mentira no duró menos de una hora.

Hubo un momento donde las formalidades desaparecieron y el alcohol llenó el lugar. Por parte de los novios, Riki no dejaba de tocar la cintura y caderas de Jungwon, este último por cada canción que empezaba, le daba sonoros besos a Nishimura. Por otro lado, estaba Jongseong y Heeseung, como nunca Jay había dejado la timidez y soltaba sonoras carcajadas mientras que el imponente rey deslumbraba su lado más cariñoso y tierno cuando un borracho Jongseong le daba cumplidos subidos de tono. Sunoo no paraba de tomarse fotos para su Instagram, había capturado a una chica de catering para que sea su fotógrafa. Beomgyu podría haber sido quien tome aquellas fotos, pero el chico había desaparecido hacia una de las habitaciones con un tipo que había dejado su placa de policía tirada en la mesa. Algunos pasados de copas bailaban, otros hacían chistes y seguían bebiendo. Otros como Soobin se morían de sueño.