¡Púdrete Bieber! / Madison Beer y tú G¡P

Capítulo: cinco

Madison Beer

— ¿Por qué carajos no me dejaste insultarlo Miranda? — contesté subiendo a la camioneta.

— Es la hermana de Bieber Madison — respondió mi amiga.

— Jamás oí hablar de ella, no es tan famosa parece — dije viendo mis uñas indiferentes.

— Era bailarín para su hermano en los conciertos, Justin lo empezó a sumergirlo a la música. Sacará su primer álbum en una semana.

— ¿Y cómo sabes todo eso? — pregunté mirándola con una ceja levantada.

Mi amiga solo mira sus manos y me mira con una sonrisa.

— La sigo en Instagram, Dios... es un bombón comestible — comentó mordiendo su labio.

— No puede ser tanto — hablé tomando mi teléfono.

Abro la app de Instagram y tecleo el nombre de Bieber, cuando carga su perfil me impresionó por la cantidad de seguidores que tenía. Voy a su última publicación que salía los dos hermanos mostrando su cuerpo definido, salían los dos mirando al teléfono. Al contrario de su hermano esta no tenía ningún tatuaje en su cuerpo, excepto una flor aún costado de su cuello como lo tenía su hermano. Deslizo y veo que había tres fotos más del par, algunas posaban graciosamente haciéndome sonreír, pero rápidamente me salgo y dejo mi celular aún lado.

— No es tan impresionante — hablé mirando a mi amiga.

— ¡Pero ¡qué dices, esta buenísima!

Le doy una mirada a lo que ella se calla rápidamente. Giro mi vista viendo el cuerpo de Joy durmiendo, se me había olvidado que estaba con nosotros.

— ¿Que vas hacer con él? — dijo mirándolo.

— Ahora sé que me puso los cuernos ya no sé qué hacer ¿lo perdono? — dije mirándola.

— Serias una estúpida Madison y te lo digo con cariño. Yo que tú lo mando a fregar los platos, y le compraría un vuelo para que se vaya directamente al carajo.

— De acuerdo, pero no te alteres, me gusta cuando eres pasiva y tímida — comenté.

— Sí, tienes razón — dijo comenzando a respirar.

Yo solo asiento y dejo mi vista en Joy. Supe que me había puesto los cuernos cuando recibí un video en pleno acto sexual del mismo Joy. El maldito idiota se equivocó y me lo mandó a mí. El video duraba unos 15 segundos, pero se veía todo, tan siquiera alcancé a verlo por 5 segundos cuando lo dejé de verlo.

Llegó a la disco borracho y me hizo un verdadero escándalo. Aunque agradezco que le hayan pegado quería hacerlo con mis propias manos. Aunque todavía tengo la oportunidad.