Capitulo Treinta

660 76 64
                                    

- Como es posible que esa niña nos halla tomado a todos como estupidos- dijo su madre enojada. - ¡Diablos! Todos pensaban que un escándalo podría pasar pero siendo tú la que engañase a tu esposa. Pero mira como nos salió el tiro.

Hacia más de dos horas que había salido de su casa. De la casa de su esposa. Ya no era suya, al menos por un tiempo.

Se había dirigido a uno de las habitaciones de los hoteles cercanos a su antiguo hogar para facilitar el acceso a Jisoo para cuando decidiera terminar con lo que quedaba de aquel matrimonio.

Pero para terminar de acabar con su día de mierda, su madre la había seguido hasta allí.

- Estoy segura que ya está vergüenza está por todos los medios como si fuese comida típica. Ya puedo imaginar a las viejas del club burlándose de esta situación y restregándomelo en la cara. Esa chica no la quiero ver en pintura. Y fue buena decisión el dejarla inmediatamente.

Jennie exploto.

- Vete, ahora

- ¿Que no entiendes la situación? Nuestro apellido está siendo criticado por todos y cada uno d ellos socios por el error que esa chica ha cometido. Como siquiera pudo darte la cara después de que se esparciera la fotogalería. Es una ramera.

- Ya está bueno, mamá- Jennie no lo soportaba más. Ella podía permitirle todo a sus padres, que tomaran desoxigenes sobre su vida. Pero no permitiría que insultaran a Jisoo como se les diera la gana. - Si ponemos a Jisoo al lado de papá lo que ella hizo solo fue como un caramelo de un dólar a los millones que ha costado las salí ditas clandestinas de tu esposo. Así que no quiero que la trates como si fuese hecho algo de lo cual pueden juzgarla sin saber. Es mi esposa, porque hasta que ella no presente los documentos firmados lo sigue siendo.

- ¿Aún crees que puede llamarse tu esposa? Esa chica se besó con otra mujer mientras tú trabajabas. Te engaño...

- Un beso. Eso no fue ni un 15 por ciento de loq ir ella ha tenido que sufrir por mis acciones. - le interrumpió Jennie- Madre desde que nos comprometieron a ambas, lo único que Jisoo recibió de mi fueron golpes, gritos, engaños... fui capaz de presentar a mi Prostituta en nuestra casa. Y ella solo me sonreía con mucho amor, solo me daba amor sin esperar nada a cambio. Ella era igual a ti cuando te casaste con el hombre frío que es papá.  Así que no eres quien para señalarla.

La señora Kim se callo.

Después de todo ninguno d ello adultos tenían el conocimiento de los fallos que tuvo Jennie con su matrimonio.

- ¿T-Tú... la engañabas desde que se casaron?- preguntó consternada la señora Kim

- Si, solo hace menos de tres mese fue que empezó a tratarla como lo que en realidad era... mi esposa. Pero ya es demasiado tarde - dije mientras le daba la espalda a mi madre. Las lágrimas querían salir nuevamente- Le daré su espacio, dejaré que ella sea quien decida si en verdad quiere seguir con el monstruo de mujer que la ha tratado mal todo el tiempo o la persona que le está dando la oportunidad de sanar sin ser lastimada como lo fue conmigo.

Y rompió en llanto.

Le dolía. Como la mierda le dolía el imaginar que Jisoo solo pudiese ser feliz con otra persona gracias a que ella solo supo brindarle llantos y situaciones que serían mejor olvidarlas.

Por primera vez, luego de muchos años, supo lo que era recibir un abrazo con varios sentimientos.

Su madre la había abrazado. Intentaba de todas las formas demostrarle que ese dolor pasaría que podría arreglar las cosas y que comprendía ahora porque su aptitud.  Y también le daba a entender que era su madre y así no lo demostrara iba a estar allí cuando lo necesitara.

ENGAÑO - JensooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora