MARQUÉ [TINCAN]

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Tharn estaba viendo el paisaje, estaba muy concentrado que se fue a sus propios pensamientos, pensaba ir a su casa, establecer a su omega con él y presentárselo a su padre y madre.

Un pequeño, pero muy hermoso cuerpo le saltó encima, lo alcanzó a tomar para que no cayera, sonrió su omega era un poco infantil, le dio un beso en la frente y el menor besó sus labios al instante, el mayor acepto gustoso y apretó al menor de los glúteos ligeramente.

- Tenemos que ir a casa —dijo el mayor al separarse, Type puso cara de disgusto.

- No quiero volver ahí, siempre estoy solo —dijo haciendo un lindo puchero que el mayor no dudo en besar.

- Tú vas a vivir conmigo, no puedo estar un día más lejos de ti —dijo el mayor bruscamente, el menor sonrió, su alfa estaba siendo posesivo.

- No los quiero dejar solos, ellos viven aquí porque nadie tiene hogar, esta casa es de Tum, pero él se encarga de cuidarlos ya que varios son acosados— dijo el menor triste.

Tharn pensó, sabía que el menor no quería irse sabiendo que estarían desprotegidos y sabía que si se lo llevaba a la fuerza el menor le odiaría, suspiró, sabía qué hacer para tenerlo feliz.

Tharn bajó a su omega ya que vio los vanos intentos del menor en zafarse de los brazos del alfa, el menor sonrió y besó rápidamente al mayor para posteriormente salir corriendo, suspiró para después entrar a la casa, vio al alfa hablando con su madre, se acercó y suspiro.

- Type se tiene que ir conmigo, pero él no quiere dejarlos y yo no me puedo quedar aquí ya que tengo empresas que manejar —dijo pensando lo siguiente que diría.

- Estaba pensando, ya que él me contó la situación que tienen, eres solo tú y dos betas para cuidar a todos, así que pensé en que se vinieran a mi residencia, está a un costado de mi casa, en donde viviría con Type, antes de que te niegues piénsalo bien Tum, es por el bien de todos, ustedes necesitan protección o al menos los demás, aquí en medio del bosque es peligroso, tienen una omega embarazada y necesita cuidados, la comida se acabará, necesitan mejores lugares para dormir, yo se los ofrezco —dijo con esperanza de que el alfa de piel pálida aceptara.

- Bueno, pero tenemos que ayudarte con gastos —dijo el alfa como orden, su tan conocida voz de alfa.

- Me alegra que aceptaras, aunque realmente no lo necesito, si quieres puedes trabajar en mi empresa o si te sientes incomodo conmigo puedo acomodarte en la de un amigo —dijo pensando en su amigo Tin.

- Está bien —dijo y se fue a ver los alrededores dejándolo solo con la madre del alfa, la beta que ayudó a su omega.