TWD:Te odio {Carl Grimes} #1

CAPITULO 17

Carl Grimes 

Tenia ganas de ver a Allana, también quería hablar con ella sobre Daryl, no tenia ni la mas remota idea de porque Negan decidió llevárselo y me dio demasiada rabia que el hiciera eso, joder nos estaba controlando demasiado y esto estaba llegando ya muy lejos.

Teníamos un plan, un pacto con los del basurero para derrotar por fin a Negan, por mucho que me doliera no poder contárselo a Allana tenia que hacerlo, si ella decía algo adios al plan y todo saldría mal, claro esta que sin Daryl el plan seria nulo. 

Por eso teníamos que recuperar a Daryl a toda costa.

Abrí las verjas del orfanato para poder pasar, parecía que All aun no sabia venido siempre que ella llegaba antes quitaba el candado y lo dejaba entre abierto para que yo pudiera entrar.

Unas ramas crujieron atrás mío, como acto reflejo saque mi pistola y apunte en menos de un segundo.

-¿Vas a disparar vaquero? -dijo con una sonrisa y mirándome de esa manera que solo ella hacia.

-Nunca princesa -dije sarcásticamente inclinándome ante ella con una notoria sonrisa dibujada en mis labios.

Vino hacia mí enseguida y me dio un cálido abrazo para luego plantarme un ligero beso en los labios que me pillo por sorpresa.

-Creo que voy a tardar en acostumbrarme a eso -reí 

-Pues ve haciendo lo -sonrío ella.

Estuvimos un largo rato mirando las demás habitaciones que tenia la construcción, ya se estaba haciendo tarde y pronto oscurecería.

Subimos a una especia de buhardilla, estaba llena de plantas de decoración que caía desde el techo hasta el suelo, obviamente no eran de verdad sino de plástico, estanterías adornaban las paredes con diferentes objetos en ellas y algunas plantas colgantes caían, cambien tenia una ventana en lo alto en la que se veía perfectamente el cielo aunque algo sucia si que estaba.

Esa habitación le fascino a Allana, por lo que decidimos investigarla un poco más.

-Oh por dios mira esto Carl -dijo señalando un tocadiscos antiguo -¿crees que funcionara?-pregunto ella. 

-Es un trasto viejo no creo que funcione... 

Enseguida una melodía comenzó a inundar la sala, con diferentes acordes que se mezclaban sutilmente entre ellos.

-¿Vaquero me concedes este baile? -levanto su mano en mi dirección y yo la acepte sin ningún problema.

Posicione mi mano en su cintura mientras que sus dos brazos estaban en mis hombros, sus manos se iban enterrando en mi pelo y su mirada causaba diferentes cosas en mi estomago, miles de mariposas revoloteaban en él. 

Mi mano fue hacia su nunca para acercarla mas a mí, coloque un beso en sus labios esperando una respuesta que no tardé en recibir, ambos nos tuvimos que separar por falta de oxigeno.

Cada vez ella me estaba gustando más, me gustaba lo que provocaba en mí, me gustaba como me hacia sentir, pero sobre todo me gustaba ella.

La canción dejo de sonar y con ella nosotros dejamos de dar vueltas por la habitación al compas, un ligero rayo de sol naranja se colaba por una rejilla, lo que se llevo prácticamente toda mi atención, esperando que hubiera algún sitio por donde subir al techo. 

Ambos nos miramos y sonreímos por la situación en la que estábamos.

Mire al pequeño rayo e intente adivinar de dónde salía, lo seguí con la mirada, parecía ser que en el techo había una puerta en forma de cuadrado, quizá podríamos subir por ahí. 

Sabia que a Allana le encantaba quedarse viendo el atardecer y amanecer, le gustaba el cielo por lo que me había dicho. 

Cogí las escaleras y abrí la pequeña puerta situada en el techo, daba lugar a un balconcito donde nos podríamos sentar, ademas al estar en lo alto se veía todo perfecto.

-All corre sube no te pierdas esto -le dije ofreciéndole mi mano para que se impulsara y pudiera subir.

Ella subió casi al instante y nos logramos sentar y ver el maravilloso espectáculo que había puesto en el cielo.

-Es precioso Carl -apoyo su cabeza en mi hombro y rodeo sus rodillas con sus brazos.

-Tenemos que hablar All, tu padre.... no.... no puede seguir haciéndonos esto, se ha llevado a Daryl, ¿joder porque Daryl? -no sabia como empezar esta conversación con ella.

-No te preocupes por el Carl, le llevare comida, intentare que no lo maten, se lo importante que es para muchos de vosotros, de veras que lo sé, pero es cabezota y testarudo, tendrá que cambiar de actitud si quiere sobrevivir allí con mi padre -suspiró.

-Es paractica mente el hermano de mi padre, si algo le pasara... no sé si el grupo estaría listo para eso.

-Vaquero, te prometo que no le va a pasar nada, ¿vale? confía en mí -me miro después de decir esas dos palabras.

-Ya lo hago All, ya lo hago.

[...]

Estuvimos bastante tiempo hablando sobre gustos musicales, que hacíamos antes de todo esto y ella me estuvo contando un poco cómo fue crecer con los salvadores, también me contó por qué Negan se volvió así.

Su madre Lucille, falleció de cáncer y algo en el interior de Negan cambio, tuvo la necesidad de hacerse con el control de todo, una historia bastante larga y complicada a decir verdad.

Ya sabia oscurecido por completo y los dos teníamos que volver a los sitios de donde pertenecíamos. 

-¿Te veré mañana? -me pregunto mientras que colocaba sus brazos en mis hombros para luego rodearme con ellos, yo coloque mis manos en su cintura. 

Mis manos bajaron un poco hasta su trasero y las posicione allí con delicadeza. 

-Mañana no podré salir pequeña, pero nos vemos pasado mañana a la misma hora que hoy, te lo prometo -le dije.

Ella simplemente me beso en los labios, lo que note es que no fue un beso normal, si no uno con ganas, desesperación, uno de esos que solo le di en la habitación aquella noche.

Su boca y la mía jugaban entre sí, comencé a apretar su trasero y a atraerla más hacia mí, quería que notara el efecto que tenia en mí, su boca dejo la mía y comenzó a bajar desde la mandíbula hasta el cuello quedando se ahí y probando cada zona de él. 

-Para All -dije en un tono grave debido a la adrenalina del momento.

-Dímelo otra vez y paro -susurro ella en mi oido intencionadamente.

-Para o el que no parara sere yo.

Y me hizo caso, paro de hacerme eso, aunque yo quería que siguiera, estábamos en un bosque, nos podría ver cualquiera y no queríamos eso.

-Te odio Carl Grimes -sus manos no soltaron mi rostro y sus ojos brillaban como nunca antes lo habían echo.

-Te odio Allana Smith -le dije conectando miradas.

Los dos sabíamos que los te quiero eran muy difíciles de conseguir hoy en día, que cada persona tenia una manera de decir te quiero, esa era nuestra forma.