20

1.3K 130 66
                                    

El reino se mantenía en espera, no sabían en que momento serían atacados.

Tres días después de la llegada de Mirio y Endevor, recibieron noticias de los rastreadores. Los hombres de Hisashi habían dejado de avanzar. Ahora estaban estancados, al parecer los soldados eran leales a su rey, pero no los bandidos a quienes había reclutado. La mayoría se había dispersado y se dirigían a diferentes poblados creando caos a su paso.

Los batallones que habían enviado los reinos Todoroki y Togata se habían detenido y separado, la mitad se dispuso a defender los poblados y atacar a quienes llegaban a hacer destrozos, y la otra mitad seguían avanzando hacia el reino Bakugo, aún así, en el camino se encontraban con más criminales.

El rumor de la caída del reino Bakugo y el resurgimiento de AFO se había esparcido por cada reino como pólvora. Por lo que muchos criminales se habían unido y atacaban a los batallones. No tenían ningún control u organización, por lo que no les costaba mucho acabarlos, pero si los retrasaba.

Los poblados pequeños también trataban de defenderse, pero necesitaban la ayuda de los soldados. Así que eran menos los que podrían ayudar directamente al reino Bakugo. Todos lo reinos estaban en caos.

Izuku se preocupo por su pueblo, así que con ayuda de un águila de Koda, envío una carta a Asui, una chica hija de un soldado y una modista del reino a la que conoció de niño. Le pidió que le informará de la situación lo antes posible. No quería pensar que estuvieran en peligro.

Tardó en responder dos días más, en su carta se disculpaba por la tardanza, pero estaban siendo vigilados, no les permitían comunicarse con el exterior y no podía enviar tan fácil al águila de regreso.

Por ella supo que se encontraban bien, pero aislados, parte del ejército los resguardaba, ya que eran en su mayoría las familias de los soldados. También le decía que muchos estaban inconformes con lo que sucedía y que ya había rumores sobre una rebelión de la gente. Aún era pronto, pero se estaban preparando para pelear contra Hisashi, no querían a un rey tirano de nuevo.

Izuku se alivio de que no estuvieran en peligro por el momento, pero sabía que debía ayudarlos. Y la mejor forma era acabar con la amenaza principal... AFO.

Todos seguían en guardia, no podían fiarse solamente de lo que sabían de la gente de Hisashi. Aún no sabían dónde se encontraba Katsuki y eso solo ponía peor a Izuku que se mantenía ocupado entrenando y ayudando con las estrategias para defenderse.

Pasaron dos semanas hasta que llegó el batallón del reino Togata. No eran tantos como quisieran, pero era ayuda y le agradecían a Mirio que los hubiera llevado.

Los soldados del reino Todoroki tardaron cinco días más, eran aproximadamente la misma cantidad, pero se habían encontrado con más problemas. Dabi los había atacado directamente hacia unos días, iba con otro sujeto que al parecer podía hacer clones, por lo que les costó mucho sobrevivir y hacer que se retiraran. Endevor estallo ese día, no podía creer que aún después de tanto tiempo su propio hijo atacará a su gente. Pero ahora sabía que su magia no era tan fuerte.

Izuku ya había logrado dominar su poder casi por completo, le era natural. Aisawa le decía que era su herencia, por lo que no le era difícil manejarlo. Izuku se esforzaba cada día peleando contra Eijiro, Tetsu y Mirio.

También se habían sumado dos guerreros más para ayudarlo. Iida, era un general del reino Togata, era excelente con la espada y el mejor estratega del reino, después de Tamaki, quien lo había enviado especialmente para ayudarlos. Y Tokoyami, un soldado del reino Todoroki, era temido y respetado, ya que era sumamente ágil, fuerte y además tenía una maldición que habia logrado controlar con exito, mantenía a un demonio dentro de su cuerpo, Dark Shadow habitaba en el, y aunque ya se entendía y Tokiyami lo controlaba, aún en ocasiones se salía de control al estar en total oscuridad.

LEYENDA (Katsudeku-Omegavese)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora