Capítulo 14

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Observo atentamente su expresión fácil mientras él se sienta correctamente sobre su taburete inclinando su cuerpo hacia mí.

— Sigue con la historia — le recuerdo para que se olvide de una vez de sus puñeteras apuestas.

— De acuerdo, pero que quede claro que no me olvido de la apuesta que has perdido.

— Deja de meter el dedo en la llaga.

— Pero es que me encanta.

— Puto — susurro achinando los ojos mientras se ríe otra vez.

— Pues mi abuela ha sido y sigue siendo mi maestra.

— Qué bonito, no lo sabía.

— Pues claro que no lo ibas a saber — hace una pausa negando con la cabeza — te lo estoy explicando ahora.

Borde, puto, capullo.

— Ya empezamos — ruedo los ojos negando con la cabeza — ¿Por qué eres tan...?

Me callo al instante al percatarme de que Jake no es de las personas que se abren a los demás con tanta facilidad, además ahora mismo me está confiando su vida privada. A mí, Kaira Jones.

Rápido vuelvo a concentrarme en su rostro y me doy cuenta de que me está observando con las cejas fruncidas y una ligeramente elevada con una sonrisa agradable.

— ¿Tienes algo que decirme Kaira?

— Bueno.... desde temprana edad siempre me ha gustado la pintura ya que sentía que podía crear nuevos mundos y sobre todo poder expresar tanto emociones como sensaciones gracias a los colores, las texturas, pero sobre todo sentía que podía ser yo misma.

— ¡Qué hermoso! — menciona observándome atentamente.

— Poder mezclar diferentes colores y ver como al combinarlos creaban uno nuevo me fascinaba al igual que poder sentir diferentes tactos en la yema de mis dedos siempre me ha llamado la atención.

— Ósea que si te llevo a un museo y ves un cuadro que te gusta a pesar de que haya un cartel que pone: ¡No tocar! sentirías el impulso de hacerlo y cuando nadie mire aprovecharías la oportunidad de hacerlo.

— Pues sí, que bien me has leído.

— Seguro que si yo escribo el cartel no harías lo mismo.

— Lo haría igualmente, aun sabiendo que después irías a mi habitación a tener una charla conmigo — con mis dedos hago el gesto de entrecomillas causándole diversión.

— Esta Kaira me sorprende cada vez más— menciona causándome gracia.

— Para mí todo lo que relacionado con el arte me encanta, además si te das cuenta todo tiene un toque de ello. Tan solo tienes que fijarte.

— Te entiendo.

— Cada obra que hacia la guardaba y guardo con cariño, porque con tan solo imaginar poder plasmar lo que me gusta, lo que siento, me inspira o emociona — me inclino hacia delante — para mí eso es mágico.

— Poder ser tu misma — añade con una voz calmada.

— ¡Exacto!

— Sin importar lo que los demás opinen, es tú obra y es única, es una parte de ti que se queda plasmada en aquello que has creado.

Observo como Jake me mira y siento como si me entendiera. Me siento muy a gusto con él.

— Qué profundo.

Todo empezó por ti ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora