Takemicchi del y para el pueblo [Tokyo Revengers]

Policía

Nunca creí que me vería involucrado en otro asunto con la policía, digo, ¿Cuál fue el mal que yo hice para tener encuentros con la policía más de lo que debería? ... ¡No me respondan! Solo... son cosas que pasan y no debería ser así... ¿Mi vida cambiará ahora?, ¿me convertiré en un delincuente? ... ¿Qué sigue?, ¿robar autos?, ¿nadar con vagabundos? ... Sin más dilatación al asunto les contaré el porqué de esta preocupación...

El aburrimiento... maldito aburrimiento y lo que ocasiona en los jóvenes, unos comen por aburrimiento, otros duermen por aburrimiento y otros salen a hacer deporte por aburrimiento, pero, cuando nuestros lindos chicos y chicas están aburridos se ponen en un estado de... descontrol, sin excepciones.

Todos tienen un pasatiempo tan extraño y este es ver pelear a Rigoberta II con cualquier miembro de la ToMan menos Mikey y Takemichi, la gallina sabe sus límites y pelear con su dueño sería la manera más rápida de encontrarse con Roberto V... Pelear con Takemichi sería una pérdida de tiempo, ella nunca dañaría a su lindo chico y él no sería capaz de tocarla de mala manera. Todo cambia cuando se trata de cualquier otro chico, y hasta chica, Rigoberta II se convierte en el animal más feroz del mundo y ataca sin reservas a cualquiera de ellos, mucho más si este es Mitsuya.

El verdadero problema se dio cuando quisieron ir a jugar con Rigoberta II en un parque, cuando lo hicieron... no les fue muy bien que digamos...

- ¡MIERDA! ¡LA POLICÍA! ¡TODOS AGARREN A LOS PEORES Y CORRAN!

Gritó Kazutora y todos se pusieron alerta, agarraron a las personas y echaron a correr. Esa era una señal que ellos y ellas conocían muy bien. Entre todos se podían clasificar entre los mejores y peores corredores, para evitar asuntos legales unos llevaban a otros; esto se clasificaba de la siguiente manera:

Draken cargaba a Emma porque no podía dejar que otro de ellos la tocase... no malpiensen, solo lo hacía porque ella era una dama y debía ser tratada como tal... Ay ajá.

Baji cargaba a Hina porque según, era el menos idiota al momento de correr con ella, aunque la llevase como un saco de papas, era el menos grosero, fuerte y ágil.

Nahoya, obviamente, cargaba su hermano menor porque él sabía como tratarlo para que no saliese lastimado.

Mikey llevaba a Takemichi, ustedes se preguntarán, ¿Por qué el enano? Pues él lo decidió, dijo que podía hacerlo y aquello era totalmente cierto.

Los demás corrían por su cuenta al ser lo suficientemente rápidos para igualar a los que llevaban peso encima. Llegaron a su casa y decidieron no volver a hacerlo nunca más... en un parque, porque a la semana siguiente volvieron a tener la pelea dentro de su casa, en el patio específicamente.

Con lo que todos no contaban era que sus gritos iban a ser lo suficientemente altos como para que los vecinos llamasen a la policía y esta tocara su puerta. Mitsuya fue a atender al guardia que estaba en la entrada de su casa.

- Buenas tardes, ¿en qué le puedo ayudar?

- Buenas tardes, se nos informó que en este residencia se escuchan sonidos bastante alarmantes para los vecinos y nos han pedido que vengamos a verificar que todo esté en orden.

- Ay, no se aguantan nada esos tipos -giraron a ver a Mikey que se había posicionado junto a Mitsuya y esto hizo que un sudor frío corriese por su sien- Nosotros no nos ponemos a llamar a la policía cuando los gritos de la vecina interrumpen el sueño de mi-

- Lo lamento -Chifuyu llegó y le cubrió la boca a su comandante para luego sonreírle al oficial- Este niño a veces se pone molesto cuando no le damos su danonino.

- Entiendo... -el guardia intentó ver en el interior, pero solo veía a jóvenes por todo el lugar- Me gustaría hablar con él o la encargada de la casa.