Thirteen || Pinta y disimula

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Hago un pequeño trazo con mi lienzo

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Hago un pequeño trazo con mi lienzo. Descanso mi pincel sobre el vaso de agua y suspiro mirando con atención la pintura.

El día de hoy quise hacer algo completamente distinto. Después de desayunar, lo primero que hice fue encerrarme en mi habitación para tomar mis materiales de pintura.

Después de unos largos minutos en los cuales me dediqué a armar todo y asegurar mi comodidad, empecé a hacer trazos sobre mi vertical de lona.

Claro, no sabía que estaba haciendo con exactitud. Simplemente... Pinté.

Justo ahora acabo de terminar y como resultado final está... Un magnífico bosque de rayones confuso para la mente humana o para cualquier ser vivo que lo vea.

Ladeo mi cabeza. ¿Que se supone que es?

Ciento un movimiento a mi lado y mi reacción inmediata es dar un respingo. Pero llevo mi mano a mi pecho, ya que solo se trataba de Kermit.

Su lengua sale de manera divertida de su boca mientras me mira con un brillo de curiosidad. Frunzo los labios hacia él.

—Hola Kermit. Oye... ¿Me podrías ayudar a descifrar este espléndido desastre de trazos?— Pregunto mirándolo con atención ante alguna reacción que me indique sus pensamientos.

El dirige su mirada a la pintura y de inmediato, mete su lengua al tiempo que ladea la cabeza. Observo también atenta la pintura, intentando inútilmente encontrar algo que logre decirme que pasaba por mi cerebro al pintar esto.

Coloco un dedo sobre mis labios, concentrada. Al final suelto un suspiro de derrota.

—Qué va, esto es un desastre— Niego con la cabeza.

—Un desastre bien bonito.

Volteo mi rostro ante la voz de Alessandro. ¿Y este qué?

En estos días se ha estado comportando extraño. Siempre que está a mí alrededor se pone nervioso. ¡Nervioso! ¡Alessandro Clark! Jamás imaginé esas palabras en una misma oración.

Además de eso, también la pasa mucho en el teléfono. A veces, incluso, me evita. Es extraño, pero aun así no me he detenido a preguntarle porque existen estos cambios tan repentinos en él.

Hasta ahora.

—Hola... Tú— Cruzo mis brazos en mi pecho y achino mis ojos.

Cuando nuestras miradas se encuentran, veo como traga grueso.

—Hola Small— Sonríe de lado con un poco de incomodidad —Eh... ¿Qué haces?

Desvía su mirada al cuadro detrás de mí. Uhm... Inteligente.

Bueno, hora de exprimir el jugo.

—Solo pintaba. — Señalo el cuadro detrás de mí con poco interés. Doy un paso delante y noto que el tambalea un poco mientras retrocede.

Una OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora