Harry Potter y El Rey de Avalon

Reunión Navideña, Los Nuevos Caballeros y La Elección de las Armas Sagradas

Harry dormía plácidamente estaba seguro que alguien lo habia acomodado pero se negaba a abrir los ojos quería disfrutar del maravilloso sueño que tenía, esta en un jardín acostado y su cabeza reposaba en el regazo de Hermione pero se veían mayores como de veinticinco años llevaban ropas que denotaban su posición de realeza, miro hacía el suelo y vio dos coronas juntas la que parecía ser de Hermione tenía detalles de rosas y llamas oro y plata en armonía con algunas piedrecitas preciosas casi inperseptibles, la que parecía pertenecerle a él tenia detalles en forma de llamas y con grabados de dragones parecía estar hecha de oro blanco y los dragones hechos de oro amarillo, podría jurar que aunque eran ellos había algo diferente en ellos.

La sensación de la brisa acariciando su rostro, el sol calentando la piel que no era cubierta por las ropa y las caricias dadas por esta versión de Hermione eran tan reales que podría jurar que no estaban dormido, ella tarareaba algo y cuándo menos lo espero la escuchó hablar.

-¿?: Arturo no te duermas, tenemos que volver a Camelot.

La voz tenía diversión y amor mezcladas, era como oír a Hermione y a la mayor Eumin, con algo de inconformidad se dispuso a hablar pero una voz un poco diferente salió de su boca era como oír al Mentor.

-Arturo: Guinevere aun es temprano y quiero pasar más tiempo contigo.
-Guinevere: A mi también me gusta pasar tiempo contigo y por más que disfrute nuestras escapadas tienes una deber que cumplir.

Harry creyo escuchar el tono mandon de Hermione en esa oración, no pudo evitar sonreír al darse cuenta que tanto él era parecido a Arturo como Hermione lo era a Guinevere, ese pensamiento lo hizo abrir los ojos creía que era su imaginación pero era tan real que podría jurar que estaba viendo de nueva cuenta un recuerdo de Arturo Pendragon, Guinevere Pendragon tenía rasgos de Hermione, de Eumin, con los ojos verdes de su madre, la sonrisa dulce y rasgos faciales eran los de Hermione el cabello castaño rubio era de la profesora Eumin y los ojos verdes de Lily Evans era como ver a todas en ella, una sonrisa comenzo a colocarse en los labios de su ancestro y juraría que diría algo cursi porque eso sentía en el pecho y en la boca.

-Arturo: ¿Sabes? Me gustan tus ojos, son de un color muy hermoso y me gustaría que nuestros hijos y los hijos de sus hijos lo tuvieran.
-Guinevere sonrio enternecida y lo beso en los labios: A mi me gusta tu cabello negro como el carbon y tan rebelde como un corcel salvaje, si nuestros descendientes tienen ambas cosas serían muy bien parecidos.
-Arturo río: Si son varones, dudo que una niña pueda lidiar con esto que tengo por cabello.
-Guinevere: Si tienes razón - Beso de nuevo sus labios- Es hora de volver.

Y de un tirón en la boca del estómago desperto en la sala de la mansión Black pero su cabeza si reposaba en el regazo de Hermione quien lo miraba con una sonrisa en los labios que no tardo en responder, ella se inclinó un poco y lo beso tiernamente habrían continuado pero Kreacher entro en ese preciso momento.

-Kreacker: Kreacher viene a avisarles que el lord comandante ha llegado, trae más personas junto con él, Kreacher debe despertar a los capitanes sino el lord comandante se enojara.
-Sirius con voz soñolienta: Deja me dormir otros cinco minutos.
-Kreacher: El joven amo Regulus nunca se habria quejado de que Kreacher lo despertará.
-Sirius: Mi hermano nunca se quejaba porque no lo despertabas como a mi.
-Kreacher: Kreacher sólo obedecía las órdenes de la señora de la casa.
-Srirus murmuro algo y se levanto: ¿Sabes si las Bones ya llegaron a la mansión?
-Kreacher: No amo, Kreacher ha estado al pendiente pero no han llegado.
-Lupin estirandose: Vamos chicos tenemos que ayudar a instalar a Arthur.

Todos se pusieron de pie y salieron a la entrada antes de si quiera poder dar dos pasos Molly Weasley la estaba abrazando a Harry quien comenzaba a ponerse blanco por las falta de aíre, Hermione la separo de él con gentileza pero aún así al mujer tenia el ceño fruncido la angustia por el chico y por su marido eran grandes y que alguien la alejara de ese niño que ella veía como un hijo más, los hermanos Weasley comenzaron a saludar a todos pero lo que llamó la atención de Harry fue ver a Fleur del brazo de Bill, ellos se acercaron para saludarlo con el respeto que se debía lo cual lo incómodo, Hermione separo por un momento a Fleur para indicarle que las chicas compartirian habitaciones al igual que las chicas quienes estarían en habitaciones para ellos, Neville salió del solar y entro a la casa, iba ensimismado que no se percsto que choco con alguien, Ginny busco a Neville con sus ojos pero no lo encontro comenzo a adentrarse hasta que choco con alguien ninguno callo pero estaban tomados de la mano con una sonrisa y sonrojados, Daphne y Ron se fundieron en un abrazo cuando este termino de saludar a todos, Sirius y Remus cargaron a Arthur con todo y silla de ruedas mientras Harry y Draco metian las maletas.