La Invitación al Baile, Duelo entre el Rival y el Mejor amigo

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Sirius iba con ánimos para despertar a Harry, tenían que hablar todos los miembros de Pendragon antes de irse a entrenar, cuando entro a su habitación sintió un calor agradable y vio que Harry seguía dormido y junta a él un pequeño bulto, cuando se acercó a la cama vio lo que era ése bultito y guardo silencio, sacudió a Harry y este se medio despertó se coloco sus lentes y vio como Sirius pedía explicaciones a base de señas, Harry le pidió que lo dejara cambiarse y despertar al dragoncito, Sirius salió y dejo que Harry hiciera sus cosas, él desperto al pequeño dragón, ya con el uniforme de entrenamiento bajo con Aragón en su hombro, los demás estaban impresionados con el dragoncito quien parecía un poco tímido y se escondía.

-Edward: Vaya así que nació anoche -Harry asintió- Es increíble es casi idéntico al que tuvo Arturo Pendragon.
-Harry sorprendido: ¿Como era él dragón de Arturo?
-Eumin: Según los registros del torreón, era negro con destellos azules y rojos, ojos azules y los cuernos y garras eran dorados.
-Sirius: Es muy pequeño aún, podría crecer más en unos años.
-Edward: Lo hará, la raza dragón emperador crece muy rápido, lo raro es que sólo cuando son pequeños se alimentan como cualquier ser vivo pero con formé van creciendo dejan de alimentarse de eso y empiezan a comer magia.
-Lupin sorprendido: ¿Cómo hacen eso? La magia es intangible ¿cómo se la comen?
-Edward: Por el lazo que generan con su "padre" y no me refiero al dragón de Dios, sino a su aliado en este caso Harry.
-Draco acercándose para ver mejor al pequeño: Es curioso ver a un dragón tener miedo.

Aragón rugió pero todos escucharon su voz, era la de un niño pequeño.

-Aragón: ¡Yo no tengo miedo!
-Draco perplejo: Esta bien pequeño, sólo bromeaba.
-Sirius: Vaya tiene mal genio el dragoncito.
-Harry: Dejen a Aragón en paz, de todos modos debo dejarlo en el torreón mientras entrenamos.
-¿?: No puedes, aún es muy joven para valerse por si mismo.

Por la puerta se hicieron presentes los seis dioses que los habían entrenado el que había hablado fue Quetzalcoalt, los Pendragon sintieron un escalofrío al saber que deberían volver al infernal entrenamiento, cuando estuvieron frente a ellos Zeus dijo.

-Zeus: El pequeño aún necesita estar contigo, por ello lo llevarás junto a ti, por hoy no los entrenaremos tan fuerte -Los cuatro suspiraron de alivio-
-Odín: Sin embargó, príncipe tenemos asuntos que tratar antes de entrenar -Miro directamente a Harry- ¿Seguirán comiendo aquí o las mesa se movera de vuelta al gran comedor? ¿Tomaran clases con los demás? ¿Cuando se reunira con los lideres de cada raza?
-Harry serió: Lo medité mucho y nos conviene convivir con los demás, creo que si deberíamos regresar la mesa al gran comedor, sobre las clases -Miro a Draco y este asintió- Igual deberíamos volver aunque sea para demostrar que no nos sentimos superiores, a los lideres los pienso reunir en unos días ya que ahora estan de vuelta sus divinidades.
-Quetzalcoalt: Eres listo chico, toma en cuenta que Aragón deberá acompañarte a todos lados, eso debes explicarlo en clases y en el gran comedor.
-Harry: Lo sé, pero no lo puedo dejar sólo siendo aún tan pequeño.
-Ares: Bien entonces ya hablado esto, Huitzilopochtli, Thor y yo los entrenaremos con un nivel intermedio.
-Zeus: Edward y yo iremos a hablar con Dumbledore antes del desayuno para llevar la mesa de Pendragon.
-Odín: Eumin y yo veremos que hace falta en el botiquín para reabastecernos y tener lo necesario si salen heridos de nuevo.
-Quetzalcoalt: Yo supervisare que estos tres -Señalando a Ares, Huitzilopochtli y Thor- No los maten o los dejen medio muertos, mientras mando las cartas para los lideres, los centauros los veremos antes del solsticio de invierno.

Con esto dicho todos se dirigieton a sus actividades, todos los curiosos vieron como los dragones volvían a sus entrenamientos habituales, Draco y Harry realizaron una carrera mientras arrastraban un trineo cada uno donde iban sentados Thor y Huitzilopochtli, Ares volvió a enfrentar con dos espadas a Sirius y Lupin, vieron a Júpiter acompañando a Edward rumbo al castillo, Hermione fue la que más se acercó al lugar del entrenamiento, viendo que el único "desocupado" era lord Coalt ella se aproximo a él para decirle.

Harry Potter y El Rey de AvalonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora