Los ojos de su madre

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Las semanas pasaron con rapidez y con ellas llegó la misión más importante para la última alianza, Harry lo sabía no debía fallar en convencer al profesor Slughorn para tomar el lugar de Snape cómo profesor de Pociones mientras él otro sería el nuevo profesor de Defensa contra las artes oscuras, Sirius y Edward estaban listos solo hacía falta que llegara Dumbledore para poder partir y alcanzar a Remus quien ya lo había localizado y lo tenía rodeado junto a los demás alphas para impedir su escapé.

-Sirius caminando en círculos: ¿Por qué debemos esperar a Dumbledore? Bien podríamos ir únicamente nosotros.
-Edward mirando por la ventana: Porqué lo necesitamos mayor Black, además su agente debe entregar información a Riddel sobre nosotros pero nos dirá algo importante.
-Harry extrañado: Osea ¿Qué el profesor Snape descubrió algo? -Edward lo miro y asintió- Debe ser algo grande si se reunirá con nosotros.
-Edward: Eumin ha tenido mucho trabajo y con la vigilancia sobre Molly Weasley digamos que hablar con Snape es un momento relajante.
-Sirius sorprendido: ¿La coronel se lleva bien con Quejicus?
-Edward serio: Mayor Black sabe que ya no es aceptable llamar así al profesor Snape -Miro a Harry sonreir tenuemente- Si se llevan bien pero no es más que lo profesional o eso me ha dicho ella.
-Harry: Espero ellos puedan entablar algo estable merecen encontrar algo que los complemente.
-Sirius lo miro intrigado: Cachorro sabes que no todos pueden encontrar el amor en estos tiempos -Harry asintió- Si ellos lo encuentran en el otro pues espero la coronel no lo intente lanzar por alguna de las torres del castillo.
-Edward suspiro pesadamente: No creo que lo lanzará por una torre más bien haría que su águila lo persiga por todos lados.
-Harry soltó una carcajada: Lord Comandante ¿Qué le han dicho los dioses de la idea que les comenté?
-Edward: ¿Sobre la nueva fortaleza? -Harry asintió- Han comentado que es una excelente idea pero por ahora no se podrá iniciar la construcción de esta hasta que definamos nuestras alianzas con los licántropos y los gigantes.
-Sirius: Me sorprende que no te quieras quedar en Nuevo Camelot, es tuyo por derecho.
-Harry sonrió: No, Nuevo Camelot es de los elfos y enanos, ellos han cuidado de la fortaleza y no quiero despojarlos de lo que Arturo les dejo -Miro a la nada- Me imagino la nueva fortaleza como una ciudadela construida con varios niveles donde todas las razas puedan habitar pero he tenido un sueño que me ha dicho el nombre de esta ciudadela.
-Edward interesado: ¿Y cuál sería ese nombre?
-Harry sonrió: Minas Caladh, se que suena trillado pero se que encontraré el lugar idóneo dónde construirla y dónde se alojé la corona del Reino Unificado de Camelot y Avalon.
-Sirius sonrió: Interesante nombre cachorro -Miro por la ventana y vio movimiento de algunos licántropos alpha- Al parecer Slughorn intento escapar.
-Edward mirando lo mismo: Si lo intentó pero se vio rodeado y como no sabe de qué bando son prefirió esconderse.
-¿?: Lamento la tardanza caballeros pero hay demaciados guardias por todo el pueblo y no he podido llegar antes.
-Edward serio: Espero que sea por eso profesor y no por otra cosa, tenemos el tiempo en cima y no podemos desaprovecharlo.
-Dumbledore: Lo sé Edward, por ello me disculpó -Harry asintió y los otros solo chistaron- Bien ya estamos listo, Severus vendrá en cuanto se desocupe de su reunión con Tom.
-Sirius: Bien procedamos entonces, Remus debe estar ansioso lleva un buen rato esperando indicaciones.
-Edward: Vamos -Comenzo a caminar- Majestad si es posible no comenté nada sobre nuestras sospechas de que Slughorn sea un objetivo de Riddel.

Harry asintió y con cautela tomo su capa de viaje y salió junto a los adultos para dirigirse a la casa donde seguramente estaría escondido el ex profesor Slughorn, la gente del pueblo ya se encontraba en sus casas resguardados del frío nocturno pero en las calles con pasos sigilosos andaban los miembros de la división de cazadores Remus se sentía orgulloso de cada uno de ellos hombres y mujeres lobo alphas, elfos de oscuridad y de luz que perseguían con gran maestría a los objetivos que la alianza les indicaban, faltaba menos para que se unieran a sus filas animagos del grupo de aurores pero Remus ya tenía a una metamorfomaga en sus fila pero en esta misión no lo acompañaba y eso lo hacía sentir extrañamente decaído, salió de sus pensamientos cuando escucho el silbido de Sirius para indicar que estaban cerca, espero unos minutos cuando los vio llegar.

Harry Potter y El Rey de AvalonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora