La Decisión De Hope

CAPÍTULO 31

— ¿Mala noche? —, preguntó el hibrido al ver a Hayley entrar al cocina. Era plena madrugada, el silencio reina la mansión y cada parte de ella.

— Apenas logro dormir —, murmuró sentándose frente a el.

— Somos dos —, bufó bebiendo de su copa —. Espero volver a dormir algún día.

— Como si necesitaras dormir —, se burló la hibrida robándole la copa.

— Ese es mi copa lobita.

— Ve y traerte otra —, se encogió de hombros.

— Solo —, la apunto —. Porque eres la madre de mi hija.

— Y tú cuñada —, añadió la hibrida.

— Un grano en la retaguardia.

— Que modales Niklaus — bufó —. Tu amiga, la mejor de hecho.

— Error —, negó volviendo a sentarse —. Mi alma gemela, mi compañera, mi familia —, murmuró sin dejar de verla —. Pese a todo lo que hice, jamás me dejaste, jamás te rendiste.

— No podía —, negó —. Tenemos algo en común, una mierda de padres. Si los biológicos murieron y los adoptivos me abandonaron, pero siguen siendo una mierda.

— Mi padre biológico era todo lo que quería, pero no dejaría que viviera sabiendo que conocía la existencia de Hope —, negó —. Era un padre, y lo único que quería era cuidar de mi niña.

— Y lo hiciste Klaus, mataste a tu padre, tuviste la oportunidad de conocer el amor verdadero de un padre, sin embargo, lo mataste. Se que fue una decisión difícil de tomar.

— No podía dejar que el se fuera sabiendo que Hope estaba viva, no podía —, dijo con un nudo en su garganta —. Imaginar que hubiera hecho Esther, deje que mis enemigos llegaran, nos aleje de Hope y jamás me lo podre perdonar. Si solo —, suspiro. Si solo hubiera aceptado desde el comienzo el embarazo, nada de esto hubiera ocurrido.

— Sin embargo, pese al dolor, las muertes. Estamos con Hope — dijo la hibrida tomando su mano —. Estamos con nuestra hija, no pudimos estar con ellas durante años, y jamás se podrán olvidar. Pero tendremos la eternidad para recuperar todo lo perdido. Ya no mas muertes, no más peleas, solo nos preocuparemos de nuestra hija, de nuestra familia.

— Ella creció tanto — meció la cabeza el hombre —. Esta tan hermosa, una copia de nosotros. Es fuerte, leal, noble

— Todo lo que queríamos para ella Klaus, es fuerte, valiente. Dios, ella se sacrifico por las mellizas, por el mundo y sin embargo sigue con la frente en alto —, sonrío con orgullo —. Pese a todo el pasado oscuro, sangriento y doloroso. Hope, nuestra niña, transformo todo eso es un buen legado, su legado. Jamás podre describir lo orgullosa que estoy de ella.

— Ella es fuerte como su madre, al igual que leal. Un poco terca —, los híbridos rieron —. Pero eso lo saco de ambos.

— Y sin olvidar la pisca de diablo que tiene en sus ojos.

— Eso lo saco de mí, sin duda alguna. Pero como tiene algo de nosotros, tiene algo de cada uno de los demás —, suspiro —. Ella es todo lo bueno que le paso a esta familia.

— Eso porque es nuestra esperanza, siempre lo fue. La esperanza de mejorar, la esperanza de seguir junto, tu esperanza de conocer el amor incondicional.

— Me lo enseño, siempre llevare el dolor el día que nació — miro a la mujer —. Verte sufrir y no poder hacer nada. Me enloqueció, pensar solo pensar y verte morir, casi me mata — cerro los ojos —. Pensar que nuestra lobita no conocería a la mejor mujer que he conocido, a la guerrera de su madre, no podía imaginarlo. Saber que Hope no crecería contigo, simplemente no podía, temí perderte —, admitió —. Cuando moriste —, una lagrima cayo por la mejilla del hibrido —. Estuve muerto en vida, lo único que me mantenía cuerdo era Hope, cuando ella casi muere, creí volverme loco. En menos de una semana casi pierdo a las mujeres que más amo en mi vida. Claro que amo a mis hermanas, pero ustedes —, hizo una mueca para evitar un sollozo —. Ustedes son mi todo Hayley, y no podría saber vivir si me llegase a faltar una de las dos, se que no podría.