Sucker for you. ‹𝟹 Sungsun

08

— ¡Oh, vamos! ¿En serio? ¡¿Otra vez, Sunghoon?! —comentó Jake exaltado una vez más en aquella tarde.

Resulta que la hora de salida había llegado y cómo siempre, Jake se encontraba hablando con su mejor amigo, quien claramente no le escuchaba ni un poco y se encontraba mirando sin algún disimulo al grupo unos metros lejos de ellos. Específicamente a Sunoo junto a Ni-ki que reían brevemente por algo que Jungwon decía.

— ¿Y ahora cuál es el tema? —exhaló todo el aire de sus pulmones dándose por vencido. Si no podía hablar, al menos dejaría que Sunghoon le contara sus inquietudes.

— Ahg, soy un estúpido. —se quejó frunciendo el entrecejo.— Un verdadero idiota.

El pelirrojo lo miró con completa extrañeza.— ¿Qué dices?

El rubio agitó levemente su cabeza maldiciéndose internamente. Lo había pensado y dicho en voz alta.

— ¿Y ahora por qué te consideras un estúpido? —insistió con un deje de burla en su voz.

— Porque lo soy. —respondió con simpleza.— Jake. ¿Tú crees que debería cambiar algo en mí?

Okey, esa fue la segunda frase que descolocó al pelirrojo.

¿Por qué Sunghoon estaba diciendo esas cosas? Había algo que no estaba entendiendo.

— ¿Y ahora por qué dices eso? Tú... Park Sunghoon. ¿No está contento con lo que es?

El rubio mordió levemente su labio inferior, algo inseguro de si era bueno contestar aquello.

— No exactamente cambiar, quizás... ¿Mejorar? —preguntó encontrándose perdido y sin buenos fundamentos.

— ¿Qué es lo que quieres "mejorar"? —hizo comillas con los dedos.— En todo este tiempo que te he conocido jamás me has preguntado algo sobre eso. Amas tu personalidad y todo lo que conlleva ser tú. ¿Cierto?

— Por supuesto que sí. —respondió rápidamente.— Pero tal vez algunas actitudes me traigan consecuencias para nada agradables luego, en serio que no quiero eso. —afirmó viendo exactamente el momento en que Ni-ki tomaba los hombros de Sunoo para acercarlo más a su cuerpo.

¿Cómo es que él no podía lograr nada de eso? Sunghoon estaba empezando a frustrarse.

— Oh... ¡Ya entiendo! ¿Hablas de Sunoo, verdad? —la voz alta y emocionada de Jake lo hizo entrar en pánico. Tapó la boca de su amigo antes de que pudiera decir algo más.

— Sí, Shim, haz que toda la maldita universidad se entere. —habló con puro sarcasmo, mirándolo con cierto enojo. Sunghoon decidió soltarlo y volvió a suspirar cansado.— Todo esto es una estupidez, Jake. Nunca antes me había sentido así. —su mejor amigo lo miró con total atención. La voz baja y desanimada de Sunghoon lo estaba preocupando.— No sé qué me pasa y mucho menos que es lo que debo de hacer. Todo me está confundiendo.

— Uh, espera, déjame confirmar. ¿Es por Sunoo? —el rubio asintió.

— ¡Yah! Ni siquiera encuentro un porqué, es decir, acabo de conocerlo hace unos días, unos que se pueden contar con los dedos. —resopló tratando de sincerarse.— Pero cuando lo veo, cada vez que me habla o sonríe... Siento algo diferente, estoy malditamente adorando todo lo que provenga de él y hasta ahora solo he logrado poco, casi nada. ¿Acaso eso es posible siquiera?

» Lo noto perfecto, demasiado para mí pero que de una manera me atrae, me paraliza, me intriga a conocer todas y cada una de las cosas que tenga que ver con él. Quiero conocerlo más a fondo, lograr algo pero por como soy. ¡Agh! —exclamó frustrado, tirando su cabello hacia atrás y deslizando su mano por la extensión de su nuca.— De seguro ni siquiera tiene coherencia lo que digo.

Jake se le quedó mirando con total sorpresa e incredulidad. Estaba totalmente fuera de sí.

— Wow, amigo, jamás creí escuchar todo esto de ti. Todo parece ser mucho más serio si es que me lo dices de esa manera.

— ¿Absurdo, cierto? —sonrió vagamente, con ironía.— Apenas lo conozco y ha provocado demasiado cosas en mí. Hasta suena cliché y cursi. ¡Ni siquiera me reconozco, joder!

— Eso mi querido mejor amigo, se debe a que te gusta Sunoo y quizás va a un paso acelerado. Pero no tienes porqué preocuparte, es normal. Además no sé si lo tuyo vaya en serio, te conozco perfectamente. Sunghoon. —habló con tono despectivo.— No te encierres en un problema simple.

— Quizás ese también es el problema. No sé si esto es un simple capricho. ¿No me has visto aún? —sonrió burlándose de sí mismo.— Con él todo cambia, Jake, absolutamente todo.

» Con otras chicas o chicos me siento superior, sé que todos están dispuestos a obedecer a lo que digo. Pero con Sunoo, con él, el tonto soy yo. —se indicó a sí mismo con el dedo índice.— No puedo ni siquiera hablar con normalidad, me cohíbo y quiero ser totalmente educado, sutil y respetuoso cuando estoy a su lado. ¡Me he avergonzado frente y únicamente a él!

— ¡Lo sabía! ¡Era por Sunoo! —hizo un gesto de victoria, sonriendo después.— Él fue el causante de todo eso.

— Y de seguro ni tiene la menor idea de lo que siento. Es muy dulce y amable. Tanto que seguro hasta el muy tarado de Nishimura intenta algo.

— Hey, no seas grosero. —le reprochó.

Sunghoon chasqueó la lengua.— Ya sabes cómo soy.

— Y por eso mismo tu confesión por Sunoo me
sorprende.

— ¿Qué debería de hacer?

— ¿En serio?

— ¿En serio qué? —repitió confundido.

— ¿Park Sunghoon, uno de los chicos más galantes de la universidad me está pidiendo consejos para ligar a un chico? —sonrió burlesco.

— No es cualquier chico, Shim, ya lo sabes. —lo miró con seriedad y Jake soltó leves risitas.

— Lo siento, pero es que es inevitable. —agitó sus manos en el intento de calmar su buen humor.— Pero... vamos, Sunghoon, tú no eres de esos que pide opiniones para esto. —colocó una mano el hombro del rubio.— Eres un chico seguro de sus acciones y sé que podrás hacer lo posible por conquistarlo. Te doy aquel refrán cliché: —hizo un cambio de gestos faciales como una persona más seria, frunciendo su entrecejo, entonando su voz como algún viejo filósofo y luciendo gracioso.— Si no arriesgas, no ganas.

Sunghoon sonrió levemente por lo cómico que suele ser su mejor amigo, calmando así la tensión que había en él.

— Relájate. Quizás haya algunos aspectos que debas cambiar, pero nada del otro mundo. Recuerda que debes conocer mejor a Sunoo y saber cómo es él en realidad. No te apresures, disfruta los momentos que puedas estar con él. —sonrió levemente, transmitiéndole apoyo.

— Gracias Jake, lo tomaré muy en cuenta. —Haló del brazo al pelirrojo y lo abrazó fuertemente.

— No es nada y, te recuerdo que este sábado es
nuestra salida con ellos. Tienes una oportunidad ahí.

Sunghoon asintió luego de separarse de Jake y sintió y como la emoción se anticipaba en su organismo, ojalá y todo salga bien. Quizás y todo era tan simple como eso.

A veces no es necesario meses o años para comprender lo que empezamos a sentir por alguien más. Nada se calcula con un reloj a mano o un calendario pegado en la pared, los sentimientos genuinos simplemente llegan y se manifiestan en nuestras acciones, depende de nosotros si lo reconocemos y estamos dispuestos a hacer algo al respecto.