EL término headcanon se utiliza cuando un personaje o grupo de personajes no siguen la linea temporal o personalidad de una serie o personaje. Es decir, son historias que los fans empiezan a tomar como ciertas, pero no lo son.
En este libro, coloca...
-Y bueno, ¿qué decides?-Dijo Takano, acostado en su cama mientras sacudía en su mano uno de sus bóxers.-Sales desnudó o vuelves a la cama conmigo, apúrate y toma tu decisión.-
-¡¿Por qué solo tengo esas dos opciones?!-Replico Onodera en su mente, usando una playera demasiado grande para ser suya.
Luego de que su jefe lo volviera a empujar a una noche de sexo desenfrenado, Onodera volvía a su estado normal de víctima que fue arrastrada por su jefe para una noche de sexo desenfrenado y deseaba volver a casa. No obstante, Takano iba un paso adelante y puso a lavar sus ropas antes de que el castaño se despertara. Era un desgraciado ya que él sí traía puesta algo de ropa interior.
Punto para Takano.
-¡Cielos!-El menor apretó el borde de la camisa con sus manos, haciendo un pequeño berrinche. No solo tenia que usar esa ropa que le recodaba la gran diferencia que había entre él y el pelinegro, sino que también debía soportar las constantes molestias de este último.
Rápidamente y con gran sigilo, Onodera regresó a la cama junto a Takano. Pero se enrollo con toda la sábana y se acomodo en una de las esquinas.
-Esperaré hasta que la lavadora termine.-Dijo el castaño, dándole la espalda al pelinegro.
-Me parece bien.-El mayor se volteó en dirección a Onodera y lo cubrió con sus brazos. Sintió el leve estremecimiento del castaño.-¿Por qué se esfuerza tanto en irse si sabe que esto le gusta?-Pensó sonriendo.-Mmm...-Las rojas orejas del menor le indicaban al editor en jefe lo avergonzado que se encontraba su subordinado.-¿No tienes calor?-
-No.-Respondió Onodera, con una voz que temblaba suavemente.
-Yo tengo calor de solo verte así de arropado.-El pelinegro se alejó un poco para apoyar su mejilla en la palma de su mano.-Vamos, debes tener calor.-
-Estoy prácticamente desnudó, no tengo calor.-Onodera se movió dentro del pequeño refugio que había construido. Sí tenía algo de calor, pero no saldría.
-¡Ya quítate eso!-El mayor se levantó y agarró del borde la sábana, haciéndola girar.
El castaño dio unas cuantas vueltas sobre la cama antes de que lo poco que lo cubría desapareciera. Ahora se encontraba en pleno campo de guerra, sin nada que lo cubriera salvo la camisa de su jefe. Se sentía como un conejo a punto de ser comido por un lobo.
-¡Ah!-El castaño se sentó en la cama y se bajó todo lo que pudo la camiseta, buscando cubrir parte de sus piernas con ella.
-Sabes...-Takano se colocó encima del menor, cerrándole todas las salidas con sus brazos.-Tienes unas piernas muy largas para ser tan pequeño...-Acariciaba desde el muslo de Onodera hasta el comienzo de su rodilla.
-¡¿Pe-pequeño?! ¡Tú eres muy alto!-Replico el castaño, indignado, avergonzado y sonrojado completamente.
-Supongo que eso es bueno...-El pelinegro se fue acercando al rostro del menor. Onodera solo trataba de alejarse lo más que podía.
-¿Po-por qué?-El castaño se golpeó con el espaldar de la cama y se percató de que no tenía más lugar a donde correr.
-Porque así puedo rodearte por completo cuando te abrazo.-El pelinegro lo abrazo con fuerza, pegándolo todo lo que pudo a su cuerpo.
-Ta-Takano-san...-El menor acomodó sus manos en el pecho de su jefe, sintiendo sus mejillas calentarse cada vez más.-Su-suélteme, por favor.-Trato de separarse del mayor pero simplemente la calidez que emanaba el cuerpo del pelinegro lo incitaba a aferrarse con más fuerza.
-No quiero.-Susurró Takano cerca de su oído, haciéndolo estremecer. Los acomodo a ambos mejor en la cama y lo siguió abrazando como si la vida se le fuera en ello.
-Mmm...-Onodera estaba avergonzado pero también se sentía horriblemente cómodo en sus brazos, tanto que se estaba quedando dormido de nuevo.-Solo esta vez...-Rodeó el cuello de Takano y escondió su cabeza en su cuello.-Tonto...-El castaño sonrió al sentir las manos del pelinegro acariciarlo con suavidad.
¿Por qué me abrazas como si fuera lo más importante para ti?
¿Por qué se siente tan bien?
Te amo... pero no lo dire.
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Esta es la escena de un extra del manga. Siempre quise saber qué pasó después y pues quería escribir algo para hoy que es el cumpleaños de mi precioso bebé hermoso, Takano-san.
