Treacherous [j.b]

El Final.

Capitulo Cuarenta y Cinco;

POV' _____.

17 meses antes...

La historia empezó cuando hacia calor, era verano y yo lo tenia todo, lo tenia a el, justo donde quería. Ella lago y lo atrapo, escuchamos los aplausos. Se lo llevo mas rápido de lo que puedes decir "sabotaje". Nunca lo vi venir, siquiera lo sospeche, subestime a quien estaba tratando. Ella no es una santa, ella no es quien piensas. Ella es una actriz. Ella es mejor conocido, por las cosas que hace en la cama. Ella piensa que yo soy como una tendencia y ella esta muy por encima de mi, pero tener clase no es a quien conoces o que usas o empujar a la gente para llegar a donde quieres. Pero ninguna cantidad de vestidos o fiestas, te dan dignidad.

Si te pones a pensar, la vida es fácil, casi simple; tan fácil y simple que duele. Un simple día, todo puede cambiar, un simple día, todo acaba. Un simple día, no tienes nada. La vida es fácil y ese es el problema. Fácilmente este puede cambiar, fácilmente, puedes quedarte sola.

La vida es tan fácil, que simplemente duele.

La música a todo volumen resonaba en cada rincón de aquella casa; llena de adolescente ebrios y chicas que perdieron el significado de respeto propio. Frunci el ceño, al percibir el amargo aroma a marihuana y alcohol, mientras me escabullía entre los cuerpos sudorosos, en busca de John.

Hace un par de minutos estábamos juntos; charlando con los del equipo de Soccer y entonces, el dijo que iría al baño. Le dije que si y lo fui marcharse, mas no lo vi regresar.

—¡Hey, _____!— alguien grito sobre la música, mire a mi alrededor, topándome con la mirada de un chico, amigo de John y del cual no recuerdo el nombre— ¡Feliz aniversario!— bramo y estae armo una ola de gritos y miradas; todos en mi y para mi.Reí sonrojada, mostré una sonrisa de agradecimiento, antes de huir y seguir con mi basureada.

Estaba por rendirme y regresar a la fiesta, ciando vi a Joanna, con su falda de fiesta favorita y que según ella entallada su pequeña sonrisa y un vaso de bebida rojo en la mano.

—Joanna ¿Has visto a John?

La rubia entrecerró los ojos, notoriamente ebria y negó con la cabeza.

Bufe.

—Vale, bueno. Gracias

Joanna sonrió y yo me gire para marcharme, pero entonces me detuvo:

—Ya me acorde.— chillo, haciéndome reir. Joanna, nunca cambiara— estaba con Nikky, estaban hablando, creo que esta arriba.

—¿Arriba? De acuerdo, gracias.

La chica me guiño un ojo y regreso a su trivial conversación con un grupo de apuestos atletas. Yo, busque entre el mar de cabezas las escaleras de la casa de John, al identificarlas corrí hasta ellas. Deseosa de por fin encontrarlo y huir por un momento de todo ese lio.

John había creído que seria lindo de su parte una fiesta para celebrar nuestro aniversario (aun mas que eso, quería hacer una fiesta) uno, por que no me agradan las fiesta y el lo sabe y dos, por que no conozco a la mitad de la personas que se encontraron en aquel lugar. John, Joanna y Nikky si, son parte del circulo social, pero yo no. Nunca lo había sido.

En el segundo piso habían pocas personas, un par de parejas besandose, algunos ebrios ya inconscientes, que tuve que saltar para llegar hasta la ultima puerta del pasillo; la habitación de John.

Lo sabia por las contadas veces que hablamos ido ahí; solos o con Nikky y los chicos. Es aquel el único lugar que se me ocurrió pudieran estar, ya que de camino a la habitación; no los vi y dudaba realmente mucho que se encontraran en el baño.