Treacherous [j.b]

Solo personas.

Solo personas.

POV'____.

¿Recuerdas las paredes que construimos? Bien, cariño...se están viniendo abajo sin ni siquiera poner resistencia, sin siquiera hacer ruido alguno. Lleno de pena, lleno de dolor. Sabiendo que soy yo quien tiene la culpa. Y sé que te vas marchar.

-____...-su voz suena rota, apenas suena del otro lado. Frunzo el ceño tallándome el rostro ¿Qué hora es? Toda la habitación está a oscuras y por la ventana noto que sigue siendo de noche.

-¿Justin?-pregunto extrañada sentándome en la cama de mi habitación, estoy un tanto desorientada y cuando escucho un sollozo del otro lado del teléfono, mi corazón comienza a latir con fuerza y velocidad.-Justin ¿Qué pasa?

Otro sollozo, apenas se audible, pero me hace un nudo en la garganta. Mi respiración comienza a ser pesada.

-_____.

-Justin ¿Qué sucede?

-Dios yo... te necesito.

Lamo mis labios sintiendo la creciente sensación de estar en la cúspide de una montaña rusa, casi sin aliento.

-Justin ¿Qué pasa?

-Necesito verte.

-Si-no dudo en contestar enseguida.-¿donde estas?

-Afuera.

-Ya voy.

El reloj marca las tres de la madrugada y mis pies se hielan cuando salgo de entre las cobijas de un salto. Nada de eso importa. Voy por la habitación tratando de despabilarme buscando algo para vestir; hay un dolor en mi pecho, como cuando estas preocupada. Y estoy más que eso. ¿Qué sucede? ¿Por qué Justin estaba tan afectado? Sobre el sencillo pijama pongo un par de pantalones de chándal negros, y una sudadera que creo es de mi padre. Zapatillas deportivas y una liga atando todo mi cabello en una coleta.

Estoy segura de que tengo cara de dormida o que incluso tengo alguna marca en el rostro de la tela de la almohada, pero sin importarme nada de eso; salgo a hurtadillas por la puerta de la entrada. En la acera contraria hay un auto negro. No era el de Justin, pero por la ventanilla podía verlo; recostada en el respaldo del asiento, llevaba una sudadera con la capucha cubriéndole la cabeza. Corro hacia él y con los nudillos golpeo la ventanilla.

El se sobresaltar, casi parece que iba a golpear a alguien con sus reflejos. Pero se calma al verme; todo lo contrario a mí.

Tiene los ojos rojos y parece un tanto más pálido ante la anaranjada luz del auto al abrir la puerta. Subo en el lugar del copiloto y antes de que pueda decir algo, Justin se abalanza y me abraza. Sus brazos me rodean como si no quisiera dejarme ir y no me alejo como acostumbro hacer, me quedo ahí, frotando su espalda en silencio.

Escucho un leve sollozo, que trata de ahogar contra mi hombro. No digo nada, aun que a decir verdad no sé qué decir. Así que hago lo más sensato, espero a que el este más tranquilo para poder entender que sucede.

Sus manos no dejan de aferrarse a mí. Apoyo mi mejilla contra su cuello y noto un casi imperceptible olor que definitivamente no es de él. Amargo, horrendo. No a mujer (porque si es así, alguien debe de cambiar de perfume) es como si hubieran quemado algo; pica la nariz.

-Justin-susurro cuando su aliento se calmo un poco. El hace un corto gemido como repuesta aun contra mi cuerpo.-Justin ¿Qué ocurre?

El no contesta. Pero sé que lo escucho. Más no quiere contestar. Pero espero y lo haga, entonces un escucho un estremecimiento de su parte. Me tenso