Treacherous [j.b]

Humana.

Humana

POV'____

Tú me hiciste insegura, me dijiste que no era lo suficientemente buena, pero ¿Quién eres tú para juzgarme? Estoy segura que hay algo en ti que te gustaría cambiar. No soy la reina de la belleza, solo soy hermosa por mí. Tienes todo el derecho a una vida hermosa. ¿Quién dice que no eres perfecto? ¿Quién dice que no vale la pena? ¿Quién dice que no eres hermosa?

Desperté gracias al sonido de mi alarma tronándome los oídos, busque mi teléfono y la pause. Siempre me decía que cambiaria la alarmo por una linda canción, quizás una de Justin y así cada mañana despertaría con su voz. Pero al final del día nunca lo hacía. Me talle el rostro con flojera y me hundí de nuevo en las sabanas de mi cama. Se sentía tan jodidamente bien. Pero...

-¡____, hija ya despierta!- pero mi segunda alarma sonó, mi madre. Gruñí molesta y me senté.

-Ya estoy despierta.

-Vale, cariño. No te duermas, ya subo tu té.

Me limite a hacer un sonidito de afirmación y ella se marcho. Tenía ganas de gritarle que nadie me jodiera el sueño y aventar mi lámpara. Como cada mañana. Pero solo me puse de pie para darme una ducha que me quitaría el mal humor.

Así fue, Salí del baño con una bata cubriendo mi cuerpo y una toalla envolviendo mi cabello; me sentía mucho mejor; despierta y dispuesta a ir al colegio. No disfrutarlo, pero si ir. En la mesa de mi tocador ya estaba mi taza de té de manzanilla de cada mañana junto a un platón de avena, frutas y yogurt natural. Di un pequeño trago para comprobar que estuviera perfecto y con la bebida en mis manos me senté para humectar mi rostro. Un poco de avena. Y fui a mi armario para vestirme. Después de aventar un par de peredas en el sofá me decidí.

Una blusa larga negra, leggings del mismo color y una playera básica de manga larga azul grisáceo, calentadores color vino y botas estilo militar negras. Me cubrí con un suéter beige –aun que aúna si ocuparía campera- y una bufanda vino para terminar.

Bailado por la música que sonaba desde mi baño me senté frente al espejo para maquillarme y peinarme; maquillaje liquido, rubor, delineador y un poco de mascara para pestañas. Peine y seque mi cabello y lo ate en una coleta algo con algunos mechones sueltos. Para terminar puse un poco de labial favorito y estaba listo. Termine mi desayuno, ordene mi cama y lave mis dientes. Justo a tiempo para que mi madre llamara. Justin estaba abajo.

Perfume, mochila. Vamos.

Baje las escaleras a pequeños saltos; saber que era Lunes, pero que vería Justin, me ponía emocionada. Al llegar a la sala, el estaba charlando con mi padre, con un vaso de Starbucks en la mano. Estaba de espaladas, así que camine hacia el haciéndole señales a mi padre para que no dijera nada y cuando estuve lo suficientemente cerca pellizque sus costados, haciendo que saltara. Me arrepentí por que un poco de café quemo su mano.

-Mie....-callo de golpe mordiéndose el labio.- Miércoles. Lunes hoy es lunes.

-Lunes, Justin-bese su mejilla-Lunes. Lo siento, lindo.

-Está bien-limpio su mano con el pantalón. Salude mi padre.

-¿Nos vamos?-Justin asiento. Nos despedimos de mis padres y les pedí permiso para que comiera con Justin. Ellos entendieron que él se iría por la noche y solo me pidieron que avisara si necesitara algo.