Contrato de amor (Varian X Tu)

Capítulo 44

Sus ojos color rubi se posaron con intriga en el rostro de ella. Lucía dolía, notó aquella pequeña lágrima que bajaba por su mejilla.

¿Qué le habrá hecho ese hombre para hacerla tomar tan drástica desicion?

Sin tener el valor de mirarlo a los ojos, ella comenzó a relatar esa trágica historia de amor-odio que se desarrollo entre ella y Varian, intentaba ocultar que aún le dolía. Se sentía tan estúpida.. ¿cómo no vio antes sus mentiras y engaños?

Al llegar a esa última noche que vivió en Corona se le hizo un nudo en la garganta, relato todo lo que sus ojos presenciaron esa noche y como au mundo se vino abajo en ese momento, relato el dolor que sintió en su rostro por ese golpe... pero que nada era comparado con el dolor que esa traición lo provoco.
Bakugo escuchaba con atención todo, y no creía que existieran personas así de cobardes y malditas.  ¿Por qué la necesidad de mentir y engañar a quién deposita su confianza y cariño en ti? ¿Por qué no hablar con la verdad desde el principio y evitar destrozar ilusiones?

-Por eso no quiero volver... si... si regreso posiblemente me obliguen a cumplir ese contrato de matrimonio y no quiero, no quiero estar cerca de él- explicó

-No merecía nada de eso su majestad y lamento si provoque que esas heridas se abrieran de nuevo- se disculpo apenado

No era su intención hacerla sentir mal, sólo quería saber sus motivos para tomar tal desicion

-N-no se disculpe... es normal que duela aún, supongo- suspiro mientras abrazaba sus rodillas

-Si, lo es... y quizá siga doliendo por algún tiempo más, y es completamente normal su majestad- trato de animarla pero nunca fue bueno en eso -Y... no debe preocuparse, no vamos a delatarla, su ubicación esta segura con nosotros-

Ante esas palabras ella lo miro con una sonrisa emocionada

-¿Enserio?-

El chico solo asintió ante su pregunta y sintió sus mejillas arder cuando esta lo abrazo feliz... ¿por qué la gente hacía eso cuando estaba feliz?

-¡Gracias!-

Dos risillas los hicieron mirar hacia la puerta, allí estaban los hermanos del rubio mirandolos entre risas

-¿De qué se ríen par de bastardos?- pregunto irritado el rubio alejando cuidadosamente a la joven

-De tu cara- respondió Shoto entrando a la habitación  -Me encargaron entregarle esto majestad- se acerco a ella con una bandeja de comida -Y me tome la libertad de prepararle un té.. le ayudara a relajarse después del estrés producido por lo de hace rato-

-¡Muchas gracias!- menciono feliz

Él chico de cabello bicolor mostró un ligero sonrojo, la chica era bastante tierna y ver su cambio de ánimos era agradable, le alegraba verla sonriendo.

-Provecho majestad- respondió esbozando una pequeña sonrisa

-Tengo que hablar con ustedes, vamos- menciono el rubio

Los tres chicos salieron de la habitación, y vieron con curiosidad como algunos de los niños entraban para ver como seguía la joven.

-¡Hola!- les saludo una niña -Vengan, les hemos preparado algo de comer para que puedan descansar, de verdad les agradecemos que hayan ayudado a nuestros hermanos-

Apenas responderian algo cuando la niña tomo la mano de Shoto para llevarlo a otra habitación, seguido de sus hermanos, donde les ofrecieron de comer, allí Bakugo podría relatar toda la historia que la joven le confeso.