El Último Llanto (Cassunzel)

Cap. 6

—¡¿Por qué la dejamos?!.— preguntaba enojado un niño de tez morena. —¡La abandonamos a su suerte!.

—Ella estará bien.— contestó el chico albino restándole importancia al asunto. —¿Además desde cuando te preocupas por alguien que no sea tu?

—Porque ella era amable... Nos ayudó y tu solo le tendiste una trampa.— habló el niño mientras su voz se apagaba por el llanto que parecía querer venir. Además ahora ni le importaban los pronombres o el hecho de que fuera niña, lo único que podía pensar era que no se merecía esto.—Al menos dime porque

—Ella no podrá con el mundo exterior.— comenzó el de cabello platinado, mirando hacia la nada en el profundo bosque. —No podrá enfrentarse contra rufianes, o animales salvajes, mucho menos sobrevivir sola...

—Pero ella no estaría sola, nosotros la cuidaríamos como una familia.— interrumpió el azabache sin querer aceptar el hecho de que la dejaron, con una pizca de esperanza de hacer comprender a su compañero de su error y volver para rescatarla a pesar de estar demasiado lejos de ahí.

—Claro... pero, ella aún no estaba preparada, ¿tu qué harías si estuvieras en una situación donde deberías salvar solo a uno de los dos?.— enfrentó el contrario, dejando sin habla al de tez morena. —¿Y qué harías si ella caía accidentalmente en trampas para osos de los cazadores, acaso serías capaz de cortarle la pierna para salvarla?.— volvió a preguntar el albino alzando un poco más su tono de voz, sabia la respuesta de su compañero, a pesar de que las preguntas eran oscuras y perturbadoras así era la realidad que ambos se habían arriesgado a tomar—¡¿Y que tal si una serpiente la muerde?! ¡¿Acaso serías capaz de verla agonizar mientras intentas llegar a un pueblo?!.— él mismo comenzaba a lloriquear entre gritos.

Él había planeado días antes del escape una trampa para ella y Lance, le daría un auricular que no tenía conexión con los demás después de delimitado tiempo, por lo que al principio le haría creer que tenía comunicación con ellos lo cual era falso, después solo quedaría ir por Lance y sacarlo de ahí, Black Moon al no obtener ninguna respuesta además de escuchar un grito programado y tardarse lo suficiente iría a buscarlos, lo que les daría la oportunidad para escapar sin ella, Lance claramente esperaría a Black Moon pero él le mintió que habían tardado y ella probablemente ya estaría afuera esperandolos, después de cruzar el muro solo quedaría cortar la soga de su lado por si él quisiera regresar a por ella, y su plan había ocurrido con un enorme éxito. Estaban a metros de la casa hogar que los había retenido durante trece años. Y ahora cada quien tenía un camino que recorrer, estaba claro que Lance se alejaría de él por "traicionarles" aunque sabía que algún día se lo agradecería.

—...No...— musitó por lo bajo, odiaba que él tuviera la razón, siempre la tenía y ambos lo sabían.

—Entonces, aquí debemos decir adiós.— empezó el albino lamentando internamente que el momento fuera tan pronto, pero era lo mejor. El de tez morena parpadeo con confusión.

—¿Adiós? Pero... Esta bien.— comentó el azabache cansado de todo, no quería comenzar otra conversación fuerte, y aún estaba conmocionado con el hecho de dejar a su amiga atrás.

—Fue un gusto Lance...— empezó el de tez pálida ofreciendo su mano, justo como el primer día que se hicieron amigos, tenían solo cinco años.

—Igualmente...— tomó su mano y la estrechó, con ligeras lagrimas asomándose en las esquinas de sus ojos. —...Adira

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La azabache tenía varios planes en mente para escapar mientras seguía revisando el orfanato, había cruzado todas las tuberías de ventilación a pesar de haber tardado un par de días de lo extenso que era el lugar. Conocía cada escondite para burlar a las madres y las cámaras, a pesar de eso no se sentía demasiado confiada para idear un plan e irse, estaban varias posibilidades que tal vez no se cumplan por la seguridad de la actualidad, las cámaras tenían un recorrido constante y fijo, había algunos puntos ciegos, pero no los suficientes, antes de llegar a la pared que daba al exterior había una cerca y, a pesar de que esta no era tan alta le podría quitar el tiempo suficiente para ser detenida.