La semana había pasado, ninguno de los dos se había visto en todo ese tiempo, desde esa situación y era algo que la estaba matando; no sabia como se encontraba su hermano conociéndolo era probable que siguiera entrenando sin importarle nada, había días que deseaba que el solo pasara por su casa, que la envolviera en sus brazos compartiendo su calor en ella. Un grito se escucho por todo el vecindario desde la casa midoriya, desde su habitación donde el recuerdo de su hermano junto con esa rubia aparecía en su cabeza. Se encontraba vestida con una falda negra, una camisa de botones con el ultimo botón desabrochado y unas medias negras que llegaban hasta sus muslos.
Mika: ¡Maldita zorra ¿Cómo se atreve a tomar mi lugar? desgraciada, ¿Cómo se atreve si quiera a dignarse a dormir en su presencia?!
La habitación se torno en fuego tras sus palabras y los aspersores de agua se activaron para evitar que el hogar se tornara en una pila de ceniza por un incendio. Rápidamente por las escaleras ella escucho a su padre subir con algo de molestia en conjunto de desesperación, tal vez porque hacía menos de cuatro horas que la chica había tenido otro ataque de ese estilo.
Hisashi: Midoriya Mika ¿Cuántas veces tengo que decirte lo mismo? Deja de quemar la casa cuando te molestas.
Mika: S-si, perdón.
Hisashi: No se que te pasa pero no es para que estés destruyendo todo.
Mika: Si padre.
Hisashi: Ahora ¿Quieres hablar del tema?
Mika: Supongo.
Hisashi: Bien entonces ¿Por qué estas maldiciendo al aire y quemando todo a tu paso?
Mika: Veras hay alguien que una amiga quiere mucho y se llevan muy bien, a ella le gusta; creía que tenían algo especial pero un día en la calle lo vio junto a otra chica demasiado pegados y eso le da celos así que me molesta a mi también.
Hisashi: Haz pensado que tu amiga tal vez deba aclarar las cosas con ese alguien porque puede haber una confusión.
Mika: Pero mi amiga no puede mirarlo sin estallar en un nerviosismo que no controla.
Hisashi: Pues que lo controle y deje de buscar excusas para quemar su casa a menos que tu amiga quiere que su padre vaya a hablarle a su novio.
Pudo sentir como su rostro se acaloraba ante estas ultimas palabras así que rápidamente tomo sus cosas para salir corriendo de su habitación. El hombre dio un suspiro ante lo que hacía su hija, la imagen de Izuku apareció en su cabeza junto a la princesa de Gales quien se mantuvo siempre a su lado después de todo lo sucedido en el festival; después de la victoria abrumadora que tuvo ante sus rivales y sobre todo después de la felicitación de la reina quien no le pidió que se arrodillara como si de toda la vida se conocieran.
Alfred: Mi señor, ya encontré lo que deseaba.
Hisashi: Bien, entonces dime cual es la relación de Izuku con mi familia y porque mi cresta mágica reacciona ante el.
Alfred: Entendido vera...
El solo echo de ver dos ataques elevarse por el cielo hacían que su cuerpo temblara ante el pensamiento de quienes se enfrentaban. Cada momento donde se acercaba a la residencia de su hermano la hacía temblar más y más, no obstante tenia que avanzar si quería poder arreglar las cosas antes de que llegara el regreso a clase; la semana se estaba acabando y con ello eso significaba la vuelta. Dejo de pensar en aquello para centrarse en la realidad o mejor dicho en lo que estaba frente a ella, poseía la ventaja de tener las llaves de la casa; dadas por el propio Izuku en cualquier caso de necesidad o si quería dar un paseo por ahí así que tomo ventaja de esto.
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Danza de Hierro y Fuego: El regreso al Ragnarok
FanfictionIncluso después de que la era de los dioses debió haber terminado, incluso después de mandar a nuestros mejores guerreros contra ellos, aun así ellos siguen controlando todo.