Solsticio de Verano (Caitlyn x Vi)

Capítulo 4: Amistad

La Sheriff de Piltover, la mejor investigadora de la ciudad, aquella a quien nada ni nadie se le escapaba, estaba ahora parada en la entrada de su propio despacho atónita. Fuera lo que fuera aquella nueva cercanía que había desarrollado en tan poco tiempo, tenía que ponerle un alto.

 La mente de Vi corría a mil por hora. Caminaba apurada bajando las escaleras, necesitaba llegar a su habitación. ¿Qué había hecho? ¿En qué universo estaba bien que ella tuviera aquellos comportamientos con una... una vigilante? Caitlyn representaba todo lo que había odiado toda su vida: un alto mando de las fuerzas de Piltóver, aquella ciudad que siempre le había dado la espalda. Seguramente habría sido criada en cuna de oro, con todas las oportunidades y comodidades que a ella le habían faltado. Pero sin embargo la veía tan... diferente. Tan humanamente hermosa que no podía sacársela de la cabeza.

Estaba llegando a su habitación cuando fue rápidamente interceptada por una muchacha menuda, baja y de cabellera castaño claro.

— ¡Vi, hola! — saludó con confianza la extraña.

— ¿Te conozco? — preguntó Vi con cara de pocos amigos.

— Si y no, vamos juntas al curso de la Sheriff. Quería felicitarte por ganarle hoy y también a Thunder. Mi nombre es Skylar.

— Ajá, si, gracias. ¿Se te ofrece algo más? Estoy apurada.

— No, en realidad solo quería invitarte a cenar en nuestra mesa. Somos un grupo de varios y creo que encajarías muy bien. ¡Nos vemos a la noche!

Sin esperar respuesta la animada chica se volteó y se fue por donde había llegado. Vi quedó con la negación a la propuesta en los labios. Le dio muy poca importancia y solamente entró a su cuarto. Se quedó el resto de la tarde allí, divagando y juntando fuerzas para sacar de su mente a la oficial.

Caitlyn había estado debatiéndose todo el día si sería correcto enviar a Vi a otra clase que ella no dirigiera. Pero luego de darle muchas vueltas al asunto, decidió que era la peor elección. "Eso solo hablaría mal de mi como institutriz, además de que Vi es muy buena en sus clases de físico...". Se encontraba muy frustrada, pensando en su habitación. Sin darse cuenta había caído la noche y era hora de cenar. Suspiró, se levantó y bajó al comedor. Era bastante temprano así que no estaba tan concurrido como lo estaría más tarde. Allí se desplegaban varios grupos de policías, algunos comiendo y otros vigilando, y también grupos de presos que comenzaban a formarse.

 Vi, como era usual, había llegado sola y se dirigía a buscar su cena, cuando una vez más una voz ahora conocida la interrumpía.

— ¡Vi! — la llamó Skylar yendo hacia ella — estuve buscándote, mirá, aquella mesa del fondo es la nuestra. Tendrías que venir a conocer a todos.

Vi observó una mesa no tan alejada, donde había caras poco amigables que la miraban fijamente. Skylar seguía balbuceando cosas sobre el entrenamiento del día, pero la pelirosa fijaba su atención en aquellas personas. Había otras tres mujeres y cuatro hombres. De lejos concentró su mirada para discernir algunos tatuajes. Varios de ellos portaban algunos indicando que habían asesinado a vigilantes. Y otros tres tenían tatuajes coincidentes en el lateral de su cuello, pertenecían a una pandilla de Zaun.

— ... así que eso es lo que pienso de las clases de primeros auxilios. En fin, vamos — Skylar no preguntó, solo le ordenó seguirla.

— Yo paso — dijo Vi rechazando la invitación.

— ¿Cómo?

— Que paso. No me junto con esa clase de escoria. Puedo divisar muy bien las huellas de aquellos tatuajes. Se de donde vienen y me dan asco.