Solsticio de Verano (Caitlyn x Vi)

Capítulo 32: Calma

Nota: Como ya sabrán, espero y supongo, este fanfic contiene contenido sexual explícito. Como no quiero que nadie se sienta fuera de lugar, marqué con unos *** donde comienzan y terminan esas escenas NSFW. Así que pueden sentirse libres de salteárselas si no son de su agrado y pueden continuar leyendo sin esas partes ♥ 

— ¡Vi, vamos a llegar tarde! — exclamó Caitlyn desde la sala de estar.

Con un casual vestido negro corto esperaba a su novia, quien terminaba de cambiarse en la habitación. Minutos después, Vi hizo acto de presencia ya vestida con un jean suelto negro y una remera blanca manga corta. Se acercó a Caitlyn y acarició su brazo, justo donde los puntos de la sutura habían estado semanas atrás. La herida había sanado por completo, pero una pequeña cicatriz aún permanecía, recordándoles aquel día y la deuda pendiente con Jinx. Desde entonces, habían vuelto a tener paz. Ningún incidente había ocurrido, y ningún informante la había avistado. Lejos de estar tranquilas, aquello las aterraba. Si bien evitaban hablar del tema, ambas sabían que compartían pensamiento: Jinx volvería a atacar. Y los días pasaban con aquel eco de terror constantemente en sus mentes.

— Te ves deliciosa, Cupcake — la halagó Vi tomándola en sus brazos.

Caitlyn soltó una risa, pero se salió del agarre. Sabía que si comenzaban aquel juego, no llegarían en horas a la casa de Deacon.

La pareja había organizado una íntima cena para que sus más allegados amigos conocieran a los nuevos integrantes de la familia: Anne y Luc. Hasta la fecha, nadie además que Caitlyn y Vi había conocido a los pequeños. Los habían visitado varias de veces, pero eran las únicas. Hettie y Deacon se habían tomado un tiempo para que se adaptaran antes de presentarles a todos.

Caitlyn y Vi subieron al auto, y en pocos minutos estuvieron en casa de sus amigos. Habiéndolo meditado mucho, habían decidido mudarse al centro de Piltover, bastante cerca de ellas. La decisión había sido tomada principalmente por seguridad. Ante la inminente amenaza de Jinx, querían estar a corta distancia de sus amigas y de la estación de vigilantes. No podían correr riesgos, no con los niños a su cargo.

La nueva casa que habían comprado era espaciosa, y resguardada tras un gran portón de seguridad que solo se habría con un botón interno. Caitlyn tocó el timbre, y cuando la cámara captó sus rostros la puerta se abrió lentamente para luego cerrarse detrás de ambas. Caminaron por el cuidado jardín frontal tomadas de la mano, hasta llegar a la entrada. Allí fueron recibidas por Hettie, con Luc en brazos. La mujer les dedicó una amplia sonrisa y las invitó a pasar.

Cuando las vio, el pequeño soltó una risa y estiró sus bracitos hacia Caitlyn, quien lo recibió alzándolo con un abrazo. Hettie aprovechó la cercanía para abrazarlas a ambas, en forma de saludo. Así era cada vez que visitaban: la casa rebalsaba de amor y afecto.

— Gracias por venir — les dijo mientras las saludaba.

— No nos lo perderíamos por nada — respondió Caitlyn abrazando a Luc.

Ambas siguieron a Hettie hacia la sala de estar, donde el resto ya se encontraba comiendo algunos aperitivos. Jayce y Viktor conversaban entretenidamente con Deacon, mientras Ninnie jugaba apilando unos bloques con Anne. Pero cuando la pequeña se percató de la entrada de ambas en la habitación, su atención se desvió instantáneamente hacia Vi. Se levantó del piso a toda velocidad y corrió a su encuentro sonriendo.

— ¡Vi! — gritó feliz.

— ¡Ey! — respondió Vi riendo.

Se agachó y ambas se fundieron en un tierno abrazo. Acto seguido, Anne trepó hasta quedar alzada por la pelirosa. Sonriendo tocó su cabello y soltó una risa. El rosado de la cabellera de Vi la había cautivado desde el momento que la vio. La pequeña señaló el grupo de bloques mientras sonreía, indicándole a Vi que la llevara ahí. Una vez en el lugar, se bajó del agarre de la pelirosa y tironeando de su mano comenzó a apilar los juguetes.