Hermione escuchaba la discusión de sus padres por teléfono. El intentaba calmarla pero como de costumbre su madre no escuchaba a nadie más que no fuera ella misma.
En un intento de distraerse tomó los apuntes de peticiones de los pobladores del pueblo. Había un trabajo importante en la casa de los Weasley, cerca del campamento petrolero de las empresas Parkinson. Miro la espalda de su padre. Ellos no se acercaban ahí desde hace un buen tiempo.
— Está molesta porque te fuiste. — Él deja el teléfono en la mesa, suspirando mientras abre una silla para sentarse frente a su hija. Su cabello castaño está perfectamente peinado, sus manos agrietadas y con heridas, ojeras bajo sus ojos.
— No entiendo porque. Ella no me quiere ahí solo no quiere que el gobierno le quite su ayuda.— Baja la libreta, mirando como su padre se queda pensativo.
— Ella te quiere. Eres su hija. No me gusta que pienses que no lo hace. Que sufras por ella.— Su mano busca la de su hija.
— No te esfuerces. Sabemos que no.— Hermione le da un apretón, sonriendo. — Eres suficiente para mi, papá. No necesito más.— Lo mira unos segundos antes de bajar la mirada de nuevo al papel.— No tienes que ir con los Weasley, lo haré yo.—
— No me gusta que vayas.— Él mira hacia el papel también.
— Es menos difícil para mí.— Murmura.— Encárgate del resto.— Se levantó de la silla, subiendo a su habitación. Se cambia por unos jeans, sus botas negras. Cargó el arma antes de colocarse su cazadora, tomando sus elementos de trabajo.
— Si algo pasa... Dispara. No importa qué o quien sea.— Le dice sin girarse. Hermione le dio un asentimiento a pesar de que él no la miraría.
Trata de distraerse de los recuerdos mientras conduce. La radio, el paisaje, los planes nada. Su respiración cambió al momento de ingresar cerca de las tierras federales. Era doloroso volver ahí, siempre lo sería. No importa cuanto tiempo pase, siempre será lo mismo.
Miro a lo lejos la casa de los Weasley, agradeciendo que finalmente podría entretenerse con el trabajo.
La nieve había bajado su nivel de dureza, haciendo que sus botas se enterraran en ellas. Sacó su rifle, colgandolo al hombro. Acomodo su cabello suelto para que no estorbara en sus vista mientras caminaba en direccion a la granja de los Weasley. Ron y Ginny se encontraban alimentando a los caballos, dejándolo al momento de verla. Ginny abrió la verja, corriendo para abrazar a su amiga.
— Sabíamos que vendrías tú. ¿Cómo estás?— . Hermione pasó su brazo por su cintura, sonriendo levemente.
— Estoy bien. ¿Tu qué tal?—. La soltó, caminando hacia Ron que se encontraba evitando que los caballos salieran del corral.
— Estamos bien.—Responde.— Oye, Ron. Ven a saludar.— Las amigas se detienen en la entrada de la casa. El pelirrojo con su ropa de granja abraza a su mejor amiga dandole apoyo por lo difícil que es para ella ese lugar.
— Hola, Herms. ¿Lista para recorrer las tierras?—. Se para frente a ella.
— Si, trabajo es trabajo.— Dice moviéndose de un lado a otro.— ¿Y tus padres?.— Señala la casa.
— Salieron rumbo a Lander, pero me dieron las indicaciones. Algo mató a un potro hace dos días y también a un par de ovejas. Las huellas salen por el bosque pero no se de donde pueden venir. — Explica señalando el gran camino nevado. Tras la colina boscosa se encuentran los pozos petroleros.
— Bien. Iré a ver. Dejare unas trampas por si es una manada de lobos. — Se coloca sus guantes con cuidado.
— ¿Quieres que te acompañemos?—. Ginny pregunta mirando a su hermano.
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Cold River- Pansmione
FanficLa muerte inminente de su madre los lleva al estado de Wyoming donde Pansy tiene que encontrar la superación de su pérdida ahí conoce a Hermione Granger una persona que a las malas ha tenido que entender que la vida no le debe nada. *LOS PERSONAJES...