Los días continuaron normales, una extraña rutina que se había desarrollado con el pasar de los días, aunque eso no evitaba el estrés que conllevaba, el ajetreo cada vez mayor ¿Sería por la cantidad de exámenes?
No, obviamente era por muchas más cosas y yo sabía que tipo de cosas, pero tampoco sabía cómo abordarlas para ponerles fin. - Y por eso pienso que Adora debería ir en bikini a clase. - Si, sin duda una buena idea, espera ¡¿Qué?!
- ¡¿Qué?!- Toda la mesa estalló en carcajadas tras mi respuesta.
- ¿Ves? Te dije que volvería a la realidad. - La rubia a mi lado rio mientras yo continuaba sin entender lo que estaba pasando. - Te pasa por estar en tu mundo. - Dijo Glimmer, seguramente disfrutando de mi clara confusión.
-Yo también te quiero, brillitos. - Aquellas palabras prácticamente salieron en medio de un gruñido. Su respuesta, nuevamente, fue una carcajada.
-Vamos, admite que por un momento fue una imagen tentadora.
- ¡Glimmer! - Adora regañó con clara comedia.
-Eso sí que no lo puedo negar.
- ¡Cat! - Irrumpió con sorpresa.
- ¡¿Qué?!- Renegué. - Es la realidad, tú en bikini es una imagen que siempre va a ser bien recibida. - Su reacción instantánea fue apartar la mirada mientras sus mejillas tomaban aquel tono rojizo que tanto me gustaba.
Y era obvio que las carcajadas a lo largo de la mesa no iban a tardar en aparecer, provocando que intentara ocultar su rostro con sus propias manos.
-Al menos es sincera. - Añadió Mermista entre risas.
-A veces demasiado. - Dijo la ojiazul con su voz opacada tras sus manos.
-Y eso lo hace más divertido. - Añadí con clara comedia debido a su reacción. - Pero ahora en serio ¿De qué hablabais?
-No hablábamos de nada, - Glimmer fue la que respondió. - Más bien buscamos formas de hacerte volver a nuestro plano terrenal para que respondieras a la pregunta que te hice como cuatro veces.
-De acuerdo. - Mi tono mostrando mi conformidad ante la explicación. - Ya tienes mi atención ¿Qué querías?
-Mi madre preguntó si te apetecía venir a cenar y pasar la noche.
- ¿Noche de películas? - Era obvio que había empezado a pasar tiempo con los padres de Glimmer desde que descubrí que eran mis padrinos, descubriendo que realmente había esperado a que les dejara la puerta entreabierta para intentar entrar con cautela en mi vida, algo que en verdad agradezco, no lo puedo negar, pues en verdad Micah siempre fue lo más cercano que pude ver a una figura adulta positiva en mi crianza. Es cierto que no intercedía mucho y apenas lo llegaba a ver una vez al mes, generalmente discutiendo con mi tutora y apenas relacionándose conmigo, pero siempre me regalaba aquellas sonrisas que no conseguían transmitir malicia alguna, siendo el único adulto que me regalaba algo por mi cumpleaños y navidad, a espaldas de mi tutora, pues ambos sabíamos que sería inmediatamente confiscado.
Pero no era solo eso, dije que eran pocas nuestras interacciones directas, pero sin dudas significativas, no por nada fue en la única persona en la pude pensar para pedir ayuda una vez estaba llegando a un límite en aquella casa.
-Noche de películas. - Glimmer respondió a mi pregunta, cortando mi hilo de pensamientos, me encogí de hombros tras su respuesta.
-Una vez deje a Adora en casa, no veo ningún problema en ir.
-Cat, puedo ir sola a mi casa, te evitarías bastantes vueltas. - La rubia a mi lado pareció recuperar su seguridad inicial mientras centraba su atención en su almuerzo.
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Típica chica mala. (Catradora AU)
RomanceAl final todos pasamos por una etapa en nuestra vida en la que nos atraen los chicos o chicas malas, los típicos macarras. El día a día en el instituto de Adora se verá severamente cambiado debido a la presencia de una nueva alumna que, a pesar de s...