Típica chica mala. (Catradora AU)

Esto da más miedo de lo pensaba.

-No lo entiendo. - La albina se encontraba sentada en el borde de la cama con los codos en el regazo y las manos juntas frente a su rostro, su expresión por otro lado... bueno, su expresión solo parecía decirte que comenzó a replantearse la existencia.

-No sé qué tienes que entender. - Intervino Catra, a mi lado.

-Oh, yo sí sé que tenemos que entender. - Mencionó DT mientras alzaba la mano como si estuviera en clase. - Vosotras, - Nos señaló a ambas. - os partisteis la cara hace un mes. - Expuso con su tono más alegre e inocente.

-Tres semanas, en realidad. - Puntualicé.

-Y tres semanas son muchos días. - Remarcó Cat ¿Sirvió como argumento? Las miradas de todos los individuos en la habitación hacia nosotras me indicaban que no.- ¿Qué tiene de malo que salga con ella? - Dijo quizás algo molesta.

- ¡Nada! - Respondió Scorpia al momento. - Pero dada vuestra situación, pensábamos que tardaríais en volver a la normalidad.

-Y aún más en volver a avanzar en vuestra relación. - Determinó Kyle.

-Entiendo vuestro punto de vista. - Intervine convirtiéndome en el centro de atención. - al fin y al cabo, nos dijimos... cosas, durante la pelea, pero...

-Pero ayer también dijimos cosas que... ¿Nulificaban? Las que dijimos en la pelea.

-No que nulificaran si no que...

-Se contradecían.

Asentí una sola vez. - Exacto. - Las miradas sobre nosotras solo transmitían confusión. -Mirad sabemos que desde fuera se puede ver complicado.

-Y también que tenemos muchas cosas que aclarar.

-Pero...

- ¡NO! - Lonnie interrumpió con un fuerte grito, asustándonos a ambas todo sea día dicho. - ¡Ya vale! ¡Poneros de acuerdo y que hable una nada más! ¡Por que como tenga que soportar como conectáis y completáis las frases de la otra UNA sola vez mas! Juro que alguien sale de aquí con las piernas partidas.

- ¡¿Para eso gritas?!- Respondió la castaña. - ¡Cabrona, no asustes!

- ¡Pues perdón si no quiero morir bajo una montaña de azúcar, par de tórtolas! - La expresión de Catra y su inmediato silencio ya daban suficiente risa de por sí, así que seguramente la guinda del pastel fue el irremediable color que fueron tomando sus mejillas ¿Qué quien fue la primera en reír? Obviamente yo, dando paso a que el resto del grupo pudiera hacerlo.

- ¡Tú no te rías! - Se quejó específicamente hacia mí, aunque no pude frenar mi risa, tanto así que acabe apoyándome sobre mis propias rodillas, en verdad su cara era un cuadro. Pude ver cómo me sonreía tiernamente. - Te lo perdono, solo porque tu risa es hermosa. - Me susurró de tal forma que solo oyera aquel comentario y entonces sí que paré mi risa en seco mientras podía notar el calor subiendo por mis mejillas, ahora fue Catra la que carcajeo, esa carcajada baja que tanto me encantaba y que pude oír perfectamente ya que el resto habían dejado de reírse, aunque no se bien cuando.

- ¿Se puede saber que le has dicho? Es un tomate ahora mismo. - La castaña volvió a reír y mi única reacción fue esconderme tras ella, como si fuera una niña a la que le avergonzaba conocer gente nueva.

-Nada interesante, tranquilo ¿Qué tal si os vais? Mañana tengo clase y tengo que remontar tres semanas de teoría de dos asignaturas más.

-Ah no.- Irrumpió la albina. - De aquí no me voy sin saber cómo disteis el paso a ser pareja. - La castaña sonrió arrogante con una ceja alzada.

-Si os lo digo ¿Os vais? - El grupo asintió. - ¿Seguro? - Pregunto mirando específicamente a la más alta. Esta asintió ilusionada. - Pues... según lo que me contó Adora, tu novia le dio la idea.