Típica chica mala. (Catradora AU)

No puedo competir contigo.

Tras esa conversación todo fue silencio, Catra parecía estar tranquila, yo por otro lado solo estaba dando vueltas por el apartamento mientras murmuraba intentando llegar a una resolución comprensible, Cat se mantuvo sentada en la cama siguiendo mi caminar con ojos pasivos. De repente habían pasado muchas cosas, DEMASIADAS cosas, es decir no es por nada, pero prácticamente me había declarado SIN QUERER y no solo eso, Catra me correspondía o algo así, como sea ambas estábamos interesadas en la otra, y eso es otra cosa a mencionar ESTOY INTERESADA EN CATRA, ha sido descubrirlo y soltárselo en la cara ¿Por qué tengo que ser tan bocazas? Comencé a despeinarme a través de mis manos frustradas, Catra había respondido a mis dudas, pero aún quedaban demasiadas incógnitas ¡Joder!

- ¡ADORA! - Miré a Catra quien de repente estaba más tensa que antes con sus puños apretados sobre sus rodillas y el ceño levemente fruncido. - Te he llamado como cuatro veces ¿Dónde estabas? - Intente hablar, pero de mi boca solo salieron balbuceos. La mayor suspiro se levantó y se dirigió hacia mí. -Tienes el pelo hecho un desastre. - Me terminó de deshacer la coleta quedándose con el coletero en la mano, no pude evitar sonrojarme y quizás por la vergüenza o por la saturación de no entender aun por completo la situación, retrocedí un paso cosa de la que me arrepentí en el acto al ver como por un momento la mirada de Catra se tornó un tanto triste. - ¿Tienes más dudas? ¿Hay algo que no entiendas? - Me habló con un tono bajo y tranquilo manteniéndose en el mismo sitio sin dar un paso adelante, aquel que yo retrocedí, como si realmente quisiera respetar el espacio que yo decidía poner.

- ¿Cómo sabes que es por eso? - Apartaba la mirada mirando mis propios pies ¿Por qué de repente me comportaba como una cría pequeña?

-Eres perfeccionista y esta es una situación nueva, desconocida, para una persona que necesita sentirse en control es normal sentirse abrumada. Aunque solo es suposición mía. - Cat se mostraba relajada con las manos metidas en los bolsillos. Decidí avanzar un paso y pude ver como en Catra se trazaba una leve sonrisa.

-No sé qué tengo que hacer.

-No tienes que hacer nada. -Puso uno de mis mechones tras mis orejas. -Lo que tenga que pasar pasará de forma natural.

- ¿Cuándo? - La morena me miró divertida antes de soltar una breve carcajada

- A saber, puede ser en diez minutos, en dos días, ahora mismo...- Volvió a reír. - Aunque algo me dice que no te vas a dar cuenta. - Le miré confundida mientras inclinaba levemente la cabeza.

- ¿A qué te refieres? - Catra volvió a reír mientras me miraba con ternura, no pude evitar hacer un puchero. - ¿Qué es tan divertido? - Cat negó con la cabeza.

-Nada, no es nada deberíamos intentar estudiar un poco antes de llevarte a casa. - Mi puchero solo se acentuó aún más.

-Estas cambiando de tema.

- ¿Y está funcionando? - Mi ceño se frunció y mis mofletes se inflaron provocando más risas de la mayor. - Me tomaré eso como un si ¿Comenzamos viendo los ejercicios online que hice ayer? - Mientras decía esas palabras Cat fue sacando y encendiendo el portátil. Suspiré derrotada al notar que no iba conseguir más respuestas.

Tal y como dijo nos pusimos a repasar los ejercicios que hizo a lo largo de la tarde del día de ayer, los cuales eran bastantes. Corregí sus ejercicios consiguiendo ver como a cada que tenía un ejercicio correcto un brillo lleno de ilusión se acentuaba en su mirada, además de una sonrisa que ya no se molestaba en ocultar.

-Te dije que pillarías rápido las ecuaciones con incógnitas, se te dan bien las matemáticas.

- ¿Tú crees? - No pude evitar reír internamente ante el tono de ilusión con el que habló la morena. Asentí portando una sonrisa genuina.