Llegado el atardecer, todos en la manada se preparaban para celebrar el cumpleaños de la única hija mujer del alfa.
Todos se apresuraban en ayudar con cualquier insignificante detalle para que la fiesta fuera realmente amena, toda la manada era una gran familia y aun mas con la dicha de tener a dos mensajeras de la diosa con ellos.
Aún cuando Ania debía marcharse al lado de su mate, todos en la manada la apreciaban por su gran bondad como así su gran fortaleza.
Connor junto a Jake y Maison habían salido al gran patio que rodeaba la casa del alfa, los tres vestían trajes oscuros pero al llegar al patio notaron que había sido decorado no tan ostentoso para la celebración.
Jake- Uno pensaría que el alfa Andrew haría algo mucho mas elegante para su única hija no creen??
Pero Tayler se encontraba cerca con su hembra y escucho la conversación, sonriendo se acerco.
Tay- Pues resulta que la diosa Selene le ha concedido al alfa aquí presente -tomo firme pero amable el hombro de Connor - la luna mas humilde que puedan llegar a conocer además de su madre.
Jake- Perdón Tayler, no entiendo??
Tay- Fue la misma Ania quien quiso su celebración de esta forma, a ella no le gustan las cosas a lo grande o muy lujosas, ella, al igual que luna Dakota, son sencillas- mirando a Connor -solo es un conejo de amigo, no la agasajes con obsequios costosos, solo la desilusionarás así.
Connor sonrió feliz, no creía posible amarla aun mas, pero cada minuto que pasaba a su lado ese sentimiento crecía mas de lo que él creía posible.
Él estaba seguro, su luna era realmente hermosa y no solo en lo físico, sino su alma también lo era.
Cuando ya toda la manada estaba reunida, Dakota apareció por las puertas de la mano de su hija, ambas estaban hermosas, múltiples ronroneos se escucharon y fueron acallados por tres furiosos rugidos, Dylan Max y Zac mostraban que estaban presentes en los ojos de sus cambiantes, con eso todos los machos bajaron la cabeza.
<<Dy- Creía que con los años estos aprenderían pero parece que son mas duros que Tayler- estaba furioso.
Max- No podemos dejar salir a nuestra hembra sola, es una pesadilla.
Zac- Le daré una paliza al que ronronee cerca de Ania.>>
Y tras llegar a donde se encontraban los tres, las dos sonrieron al ver sus caras.
Vestimenta de Dakota
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La Mensajera Divina del Alfa
WilkołakiÉl supo que ella era suya desde que estaba en el vientre de su madre, ahora ya con 18 años a llegado a reclamarla como suya, nadie lo apartara de ella ni siquiera la diosa misma. Cuarto libro saga El Alba, El Beta y la Cazadora