Eres Tú

capítulo XVI

Antes de que lean...
Hoy es cumpleaños de Hyoga ^^

No pude escribir un capítulo especial, pero tal vez después lo haga.

(Narrador)

Miércoles por la madrugada, Shun se despertó porque se sentía algo incómodo, pues en la posición que estaba le lastimada la espalda y sus brazos estaban mal acomodados sobre el cuello de Hyoga.

Cuando se levantó y vio la situación, se dió cuenta que tal vez no era el único que estaba durmiendo con incomodidad. Pues Hyoga estaba al borde del sillón, a punto de caer y se notaba como es que se aferraba a sus piernas de Shun para no caer al suelo.

Shun se levantó e intento moverlo un poco para que se despertara, pero sin querer término por tirarlo del sillón.

Hyoga de inmediato despertó, un poco asustado y agitado.

Hyoga:¿que pasó?.

Shun:lo siento, sin queres te tire. Solo quería que te despertaras para que nos acomodaramos y no eatuvieramos tan incomosos -dijo muy apenado-.

Hyoga:no te preocupes, no pasa nada -dijo dándole una sonrisa para calmarlo un poco-. Mejor vamos a dormir a las habitaciones.

Shun:claro, mejor...

Ninguno de los dos tenía idea de como habían llegado a esa posición.

Pero algo de los que Hyoga no se dio cuenta, era de que el estaba abrazando las piernas de Shun, y Shun de aferraba al cuello de Hyoga.

Shun si se había dado cuenta de eso, pero no dijo nada por la pena que tenía, además de que no encontraba razón para decirlo.

No paso ni una hora de que se habían ido a dormir y Hyoga escuchara como alguien tocaba la puerta del cuarto en el quetaba.

Se levanto a abrir y ahí vio a Shun, con un pequeño pato de peluche en sus manos y una expresión que mostraba miedo y pena.

Shun:¿pu...puedo dormir aquí... contigo? es que... no puedo dormir y me asusta estar solo -dijo con toda la vergüenza del mundo-.

Hyoga:claro que si, adelante pasa.

Ambos se acostaron, Shun de daba la espalda a Hyoga y abrazaba a su pato de peluche, y Hyoga veía la espalda de Shun.

El ruido de una rama golpeando suavemente la ventana asustó a Shun, lo que hizo que se diera la vuelta y abrazara rápidamente a Hyoga, este le correspondió el abrazo.

Hyoga:creo que no volveremos a ver películas de terror por un tiempo.

Shun:lo siento, pero en verdad me dió miedo la película.

Hyoga:no te preocupes -le dio una validation sunrise que Shun que devolvio-.

Ninguno de los dos malinterpretaba las acciones del otro, pues para ellos era costumbre abrazarce e incluso dar pequeños besos en la frente o mejilla del otro.

Ambos durmieron así, abrazados.

Shun acurrucado en el pecho de Hyoga y abrazandolo por el regazo.

En cambio Hyoga tenía una mano sobre la cintura de Shun, y la otra por debajo de la cabeza de este.

Al otro día, ambos se despertaron casí al mismo tiempo, así que juntos prepararon el desayuno y comieron mientras charlaban.

Shun:me dijo Seiya que vendría mañana a verme.

Hyoga:al fin pudiste dar con su ubicación.

Shun:no es de sorprenderse, como siempre estaba de fiesta.

Hyoga:¿tres días seguidos?.

Shun:cuatro contando hoy. Por eso va a venir mañana.

Hyoga:ese niño si que se divierte. Lo curioso es que el amante del alcohol, antros y fiestas, y tú eres fan de quedarte en casa a hacer la limpieza y ver películas.

Shun:pues ñe, es a lo que me acostumbré.

Y así siguieron su plática hasta terminar de comer.

Después de eso Hyoga se dió una ducha en el baño que estaba en la parte superior de la casa.

Cuando el salió del baño, solo llevaba una toalla alrededor se su cintura, y toda la parte de arriba destapada.

Shun, que se encontraba por ahí en ese momento, no pudo evitar ver a Hyoga. De inmediato un tono carmín se poso sobre sus mejillas, dándole cuenta de lo que estaba viendo.

Para evitar que Hyoga se diera cuenta y hubiera algún malentendido, bajo a la Sala y allí se quedó.

Pero la imagen que había visto unos minutos atrás lo había deslumbrado

-su espalda, su torso, sus músculos. Hyoga tiene un cuerpo muy bien formado- al pensar eso se lleno de vergüenza -¿a ese chico fue al que abrace y con el que me quedé anoche- pensaba -que vergüenza, no sabía cómo era su cuerpo, realmente nunca lo había visto sin ropa... y vaya que tiene una buena figuta- al pensar éso sacudió un poco su cabeza, pues no razonaba lo que pensaba. Era como oir a Seiya después de pasar la noche con un hombre. O así pensaba Shun que sonaba.

Cuando Hyoga bajo noto que Shun estaba muy distraído viendo sus manos, fue hasta donde estaba y lo movió suave del brazo.

Hyoga:¿que pasá Shun?.

Shun:ohh, no me dí cuenta en que momento bajaste, pero no pasa nada -dijo con una pequeña sonrisa-.

Hyoga:okay... oye ¿te parce si pedimos una pizza y vemos una série?, yo invitó.

Shun:claro, yo la pido.

Shun pido la pizza, mientras que Hyoga elegía la série que verían.

Cuando ya había llegado la pizza y tenían la série elegida, se sentaron en el sillas y, como la noche anterior, se quedaron allí juntos. Acurrucado uno con otro, comiendo y viendo la tele.