Matrimonio a cambio de Dinero I ©

Capítulo 48.

--No Jessica, no te lo daré.--Se paró ante mí
--¿Por qué? Ya todo está perdido.-- Dije con cierta tristeza.
--No, nada de eso.--Me iba a besar, pero lo detuve.
--No Christian, mañana cuando no estés borracho hablamos.--Levanté mis zapatos del suelo y subí las escaleras.
Abrí la puerta de la habitación y deje los zapatos a un lado, me ponía triste la reacción de Christian, me dolía que se comportará así conmigo después de todas las oportunidades que le he dado. Lo he perdonado de todas las estupideces que me ha hecho y aun así el sigue comportándose de esa manera. Suspire con cierto dolor, fui al baño, me quite todo exceso de maquillaje. Lave mis dientes y me coloque mi pijama.
Salí del baño y ahí se encontraba Christian, sentado a los pies de la cama.
--¿Qué haces aquí?-- Caminé al otro lado de la cama y me acosté.
--Quiero hablar.--Se colocó a un lado.
--Y yo ya te dije que hablaré contigo mañana, tengo sueño y no me apetece discutir.--Me puse la almohada en la cara evitando mirarlo.
Se escuchó un suspiro, quité la almohada de mi rostro y miré a un lado.
Christian se había quedado dormido de tan borracho que estaba.
Bufé, me levanté de la cama, agarré mi celular junto con el cargador y fui hacia la habitación de Matt. Coloque el pestillo en la puerta y me acurruqué en la cama. Pensándolo bien, sería excelente de que tuviera a otro bebe que cuidar y amar.
Con ese pensamiento caí en un sueño profundo, donde era feliz a lado de mi esposo e hijos pero eso sería imposible.
A la mañana siguiente, me levanté y me di una ducha larga, salí y me coloqué mi ropa interior y una bata. Al salir del baño me encontré a Christian sentado.
--¿Qué quieres?--Dije sin prestarle mucha atención.
Abrí el armario y saque un vestido color rojo con flores, lo deje en la cama y después me senté en la silla de mi tocador. Agarre mi crema hidratante y la extendí por toda mi pierna, sentía la mirada de Christian en todo lo que hacía.
--Quiero hablar.-- Se paró de la cama y quedó delante de mí.
--Christian estoy harta, cuando quieres hablar siempre terminamos gritando, eso para mí no es hablar.--Seguí colocándome la crema aún con su atenta mirada.
--Me estas provocando.--Dijo Christian con la respiración agitada.
--Hago lo que toda mujer después de bañarse.--Me encogí de hombros y después me puse de pie, dejé caer la bata al suelo para colocarme el vestido, Christian recorrió mi cuerpo.
Antes de siquiera poder agarrar el vestido, Christian me pegó en la pared y recorrió con sus manos mi cuerpo, de un momento a otro me besó con ímpetu y con ferocidad.
--¡No!--Me separé de él.-- ¡A ti qué diablos te pasa! Christian estoy verdaderamente cansada de ti, de que sólo me tires y recojas las veces que quieras. Te he perdonado todo lo que me has hecho ¿y esto es lo que yo recibo de ti?--Mi voz cada vez era más débil.-- ¿Sabes por qué siempre termino perdonándote?--Christian solo me miraba sorprendido.-- Te amo Christian, pero yo no merezco a una persona como tú, a la que huye de sus responsabilidades, a la que siempre pelea y que nunca es capaz de atenerse a las consecuencias.--Caí de rodillas en el suelo, sollozando.
Christian inmediatamente se arrodilló junto a mí y me abrazó, yo traté de resistirme, pero si esta sería la única vez que estaría así con él, me dejé y lo abracé.
--Perdón.--Susurró.
Antes de que pudiera contestar, sonó mi celular y finalmente me levanté y contesté.
--Mi cielo.--Dijo mi padre al otro lado del teléfono.
Respiré profundo un par de veces para tratar de sonar tranquila.
--Hola papá, me sorprende tu llamada.--Mordí mis uñas nerviosa.
--Te hablo para invitarte a comer, Matt está desesperado por verte.--Se le escuchaba muy alegre.
--Vale, en 30 minutos estoy ahí.--Colgué la llamada y me giré para ver a Christian, pero lo cierto es que el ya no se encontraba ahí.
Resignada terminé de arreglarme y después baje a desayunar. Me preparé un sándwich y me serví zumo de naranja.
Al terminar fui por las llaves del auto y con la bolsa en mi mano y unos cuantos juguetes para Matt, salí de la casa. Cuando iba manejando volvió a sonar mi celular, conteste cuando pare en un alto.
--¿Hola?
--¿Qué tal va todo preciosa?--Dijo Marck.
Fruncí el ceño.-- ¿Qué no deberías estar en tu luna de miel?--Dije extrañada y avanzando pues el semáforo se había puesto en verde.
--Sí, pero quería saber cómo estabas, quedé preocupado por lo de ayer.
--No te preocupes Marck, estoy bien gracias por preocuparte.--Sonreí.
--No hay de que preciosa, para eso están los amigos y ahora te dejo porque mi esposa me llama.
Reí.--Vale, nos hablamos después.
Al llegar a la casa de mis padres me encontré con el auto de los papás de Christian, bajé tratando de tranquilizarme y toque el timbre.
--Cielo, llegas a tiempo.--Mi madre me abrazó y yo fruncí el ceño.
--¿A tiempo para qué mamá?--Me introduje en la casa y toda esta se encontrar adornada con globos de colores, bocadillos y muchas cosas más.-- ¿Qué estamos festejando?
--El embarazo de Melina.--Mi madre sonrió.
Y yo lo había olvidado, seguí a mi madre en la cocina y terminamos de preparar todo para la gran sorpresa que se llevaría Nico.
Tiempo después yo jugaba con Matt y segundos después se escuchó el timbre, mi madre abrió y por ella entraron todos incluyendo a Christian.
Genial, ¿no creen?
--Cariño.--Gritó Mel, yo me levante con una sonrisa y fui abrazarla.
--Muchas felicidades, se merece esto y más.--Le dije en su oído y ella solo me abrazo más fuerte.--Señor.--Lo salude con un beso en la mejilla.
--Pasemos al comedor, ya está todo listo.--Dijo mi madre y todos fuimos, senté a Matt en su silla y le di de comer.
Todos hablaban y sonreían, al contrario de Christian y yo que los dos estábamos más serios que nada. Melina nos sorprendió levantándose con una copa de agua en su mano.
--¿Te sirvo?--Dijo mi padre con la botella de vino en su mano.
Negué con la cabeza.--Preferiría una copa de agua.--Todos me miraron sorprendidos, no quería tomar por sí resultaba embarazada.
--Oh por dios.--Dijo Grace con los ojos cristalinos y yendo hacia mí.
Todos miraban fijamente a Grace sin entender nada, Christian ya lo sabía así que no se sorprendió por el arrebato de su madre.
Grace hizo que me levantará y me dio un fuerte abrazo, con lágrimas en sus ojos. --Felicidades cielo, me alegro tanto de que vayas a darme otro nieto.
-Aun no estoy segura.-Sonrei apenada.
Poco después los demás entendieron y me abrazaron y felicitaron.
--Gracias, pero estábamos aquí para celebrar lo de Grace de que también está embarazada.--Sonreí.
Todo era felicitaciones y sonrisas, Nick se alegró mucho de volver a ser papá y Christian igual, él era el más emocionado de tener a otro hermano.
Yo sonreí melancólica y los dejé a ellos celebrando, necesitaba respirar el aire fresco. Salí al jardín, pero mis ojos se abrieron a tope con lo que me encontré.
--¿Qué dices?--Christian se encontraba detrás mío al igual que mis padres y los de él.

Un beso enorme y este capítulo se lo dedico a  Espero que te guste :)

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