"Love Photography" ~[Minsung]~

Capituló 10º

Desde aquella pequeña charla que tuvo con Jisung se sentia mas feliz que de costumbre, habló con su hermano Bin para averiguar el nombre del pelinegro y aunque trataba de acercarse a él siempre se encontraba con otros dos chicos más, entendía que eran sus amigos pero tampoco queria incomodar asi que decidio esperar una oportunidad nueva para acercarse a él.

Un viernes Minho estaba agotado por las clases y se sentía aún más frustrado porque la profesora de artes, la señorita Lee les había dejado tarea y él era el peor de su clase, al salir de su salón alcanzo a notar a lo lejos la presencia del pelinegro en el pasillo a lo que algo se le ocurrió, su hermano Bin se había acercado a esos tres chicos y había entablado una amistad con el pelinegro, recordó que alguna vez le había comentado que Jisung era muy bueno para dibujar solo que a veces ya no lo hacía. De inmediato se dispuso a caminar hacia él y cuando estaba de frente sus dos amigos aparecieron de la nada, no sabia que hacer pero darse la vuelta y correr no iba a dejar una buena impresión si quería pasar más tiempo con el menor.

—H-Hola Jisung— se sentía aún más nervioso de lo que imaginaba pero trataba de controlarlo.
—Hola...— el pelinegro se sentía un poco confundido porque no recordaba haberle dicho su nombre —¿Cómo sabes mi nombre?

Esto provocó una mirada penetrante al castaño por parte de Chris.
Las manos del castaño comenzaron a sudar -Idiota, lo acabas de arruinar-.

—Ah, accidentalmente mi hermano Bin me lo dijo— quería cavar un hoyo de cincuenta metros de profundidad y enterrarse ahí —espero que no te moleste.

—No me molesta, no te preocupes—.
—Me llamo Minho, es un gusto conocerlos— hizo una reverencia a los tres chicos delante suyo.

—Hola me llamo Felix, me alegra por fin conocer al hermano de Bin— el rubio le obsequió una amable sonrisa.
—Me llamo Chris, es un gusto igual conocerte— el chico era intimidante pero cuando sonreía se veía realmente adorable.

—¿Podemos hablar?— el castaño se dirigió a Jisung rompiendo la tensión que se había creado.
—Claro— los otros dos chicos se alejaron para darles un poco de espacio.

—Necesito tu ayuda.
—¿Mi ayuda? ¿Para qué?— el chico estaba aún más confundido.
—Mi hermano me comentó alguna vez que eres muy bueno dibujando y necesito ayuda con mi tarea de artes ¿Podrías ayudarme?

El pelinegro dudo un poco porque últimamente no disfrutaba de dibujar, había algo del pasado que le dolía aún pero al ver la cara de cachorro desesperado por parte del mayor aceptó.

—Podemos ir a mi casa, de todas maneras no tengo nada que hacer.
—Muchas gracias por la ayuda.

Se acercaron a los dos chicos que los estaban esperando y Jisung les comento la situacion asi que se despidió de sus amigos que cada uno tenía deberes y se encaminó a su casa junto con el chico castaño a su lado, es cierto que se sentía un poco nervioso con su presencia pero no negaba que disfrutaba su compañia.
Lo hacía sentir seguro.

Ambos caminaron a un paso relajado, la casa del menor estaba un poco lejos pero ninguno tenía prisa en llegar rápido, Jisung cargaba su cámara a todos los lugares incluso a la escuela durante el camino tomó algunas fotos que le parecían interesantes -cosa que hacía sonreír al castaño-. A su izquierda en el jardín de una casa había una pequeña fuente en la que una pareja de pajaritos se estaba bañando cosa que le pareció demasiado adorable y decidió tomar la foto pero al colocar su ojo en el lente de la cámara esa sensación se apoderó de él, todo su alrededor giraba y la punzada en su cabeza se hizo más intolerable, desde que salió del hospital tenía los mismos síntomas pero decidió no tomarlo en cuenta porque no eran tan frecuentes, por otro lado Minho observó que el menor se tambaleo un poco pero cuando estaba a punto de sostenerlo este se enderezo y le dedicó una sonrisa.

—¿Estás bien?
—Si no te preocupes, no me dio tiempo de comer algo creo que es por eso.

El castaño asintió, él a veces no comía pero aun así no podía evitar sentirse un poco triste.

Mantuvieron un silencio durante todo el camino, Jisung disfrutaba de los paisajes y tomaba muchas fotos mientras que Minho disfrutaba ver el rostro del menor cada que tomaba fotos. Llegaron a su destino, el pelinegro subió las escalera y abrió la puerta invitando al mayor a pasar, este dudo un poco por la pena pero paso de manera delicada observando cada pequeño detalle de la casa, es cierto que no era una casa enorme pero por dentro se veía más amplia, al girar su cabeza hacia la sala se encontró con aquella mujer que había visto en el hospital aquella vez, los recuerdos lo inundaron un sintio un nudo en la garganta.

—Hola mamá, ya llegue y traje a un amigo para hacer tarea.
—Hola señora Han, mi nombre es Lee Minho y es un gusto conocerla.
—El gusto es mío Minho, se ve que eres un chico educado, adelante— guió su mano con dirección a las escaleras dándoles una sonrisa. Su madre era muy amable a pesar de todo lo que había pasado sola con su hijo, el ya estaba asistiendo a terapias y seguía con sus citas con el médico.

Ambos chicos subieron a la habitación, era muy acogedora a simple vista tenía una ventana justo al lado del escritorio en donde descansaban los libros del menor, en la pared de la derecha tenía varios posters de paisajes pegados, su cama no era tan pequeña, también había un closet y una puerta que suponía que era el baño.

Es cierto que existía un poco de incomodidad ya que tenían muy poco tiempo de conocerse pero a su vez también se sentían cómodos con la presencia del otro se enfocaron en la tarea del castaño pero a su vez también bromeaban o trataban de conocerse más, sintiéndose cómodos ambos. Pasó el tiempo y la tarea ya estaba lista así que el mayor decidió que era momento de irse no sin antes preguntarle algo al pelinegro.

—¿Podemos salir mañana? Vamos al cine, yo invito— estaba un poco nervioso pero el tiempo que había pasado con el menor realmente lo había disfrutado y quería más tiempo.

Jisung dudo un poco antes de responder -¿Por qué este chico sigue tratando de acercarse a mi?- pero ignoro sus pensamientos que solo lo hacían sentir inseguro de si mismo, también había disfrutado el tiempo con el castaño asi que accedió.
—Claro, te veo en el cine a las 4 mañana.

Ambos se despidieron y el castaño se fue, dejándose a cada uno sentimientos y pensamientos confusos.

Capítulo un poco aburrido, gracias nuevamente por los votos y gracias a todas las personas que me están apoyando. 🥺❤️