Miedo de ti mismo - Cap. 20

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Yoongi escapó del lugar que hacía llamar hogar; por momentos veía sus manos de sangre y luego regresaban a la normalidad. Estaba aterrado, estaba  asustado de sí mismo, pero ¿cómo escapar de sí mismo? Ahora él era un monstruo, no tenía idea que había pasado, pero estaba seguro de que él era un peligro, no podía estar cerca ni de sus seres amados.

Seguía corriendo entre la gente y cada vez que tenía mínimo contacto con alguno, se alejaba bruscamente, como si tocarlos, quemara.

Los pies le dolían, pero el dolor en lo más profundo de su pecho superaba todo sufrimiento físico. Llegó a una casa, la casa de playa de su madre fallecida, ella especialmente se la regaló a él.

Entró con las llaves que estaban debajo del tapete.

Inicio del flashback

—Mira Yoongi, te voy a revelar un secreto, ni siquiera tu padre lo sabe —sonrió traviesa.

—Está bien mami —miraba curioso a su mamá.

—Debajo de este tapete… —levantó el objeto.

—¡Es la llave de la casa! —se sorprendió el pequeño, colocando sus manitas sobre su boca.

—… ¡Sí! Mi bebé tan inteligente, ahora sabes que puedes entrar cuando quieras —Sun Hee acarició la mejilla de su hijo.

Fin del Flashback.

Yoongi sonrió, recordando los momentos con su madre, a veces se preguntaba porque tuvo que irse tan temprano. Un niño jamás debía sufrir el dolor de perder a una madre, nunca. Una lágrima descendió por su rostro.

Entró y observó el interior de la casa, se notaba que nadie había estado limpiando en años, pero eso no le importó a Yoongi y entró en una habitación en particular.

El cuarto era el más pequeño de todos y por sus pinturas y adornos, se podría decir que era de un niño.

El pálido se sentó en el empolvado colchón, viendo desde su lugar un retrato, lo tomó entre sus manos temblorosas y las lágrimas seguían saliendo; en ella se podía ver a la mujer de su vida, a su madre y a él, cuando estaba pequeño; ambos sonrientes y abrazados, en este se notaba que se querían, que a pesar de todo, ellos eran felices si estaban juntos.

—Mamá, conocí al amor de mi vida —acarició el rostro de la mujer en la foto—. Él es precioso, ojalá lo vieras, su nombre es Jimin —sonrió— Seguro te agradaría con solo verlo, se llevarían muy bien, incluso tendría celos de que te quisiera más que a mí, porque mamá eres una de las mujeres más bondadosas que he conocido —otra vez esa sonrisa melancólica.

Yoongi siguió contemplando la foto, recordando los buenos momentos y anécdotas en el poco tiempo que estuvo con ella.

Inicio del flashback:

—Yoongi, cariño, ¿te gustan las mandarinas, verdad? —río suavemente a la vez que ponía sus brazos en jarra.

—¿Por qué lo dices mamá? —dijo el pequeño, mientras peleaba su fruta.

—Porque está es la séptima mandarina que vas comiendo —se acercó a su hijo—. Oh mi niño bonito, come sus mandarinas —dijo jalándole los cachetes a Yoongi y estampando un beso en cada una de sus mejillas.

—Ma-mami, ¡N-no hagas eso! —dijo riéndose.

—Te amo mi pequeño.

—Yo también mami.

Fin del flashback.

Y el llanto del pálido empeoró, esta vez recordó la vez en que le había hecho una pregunta importante al rubio, quien lo hacía suspirar cada segundo.

Inicio del flashback

—¿Podrías vivir sin mí? —giró a verlo.

Jimin se tomó el tiempo de contestar, viendo un punto fijo de la cama y cuando tuvo la respuesta, lo miró a los ojos.

—Claro que sí amor, seguiría vivo, pero sin duda se me quedarían retazos de nuestros recuerdos juntos, nuestros momentos felices, me dolería bastante perderte, pero… seguiría adelante, por mí —le sonrió con melancolía.

—Me alegro, estoy orgulloso de que tú seas mi omega —le dio un beso en los labios y Jimin no dudo en corresponderle, disfrutando del placentero toque.

Fin del flashback

Yoongi no le contó a Jimin el porqué le había hecho esa pregunta, pero en realidad sí tenía una razón y esa era su madre.

Inicio del flashback:

—Hijo, ¿podrías vivir sin mí? —Una bella mujer acariciaba la cabecita de un pequeño niño.

—No, mami ¿por qué lo preguntas?—alzó su rostro para poder verla, notando cómo el rostro de su madre era iluminado por la Luna que se asomaba por la ventana.

—Mi bebé Yoongi, algún día tendré que irme y cuando llegue ese día, yo quiero que tú seas feliz por ti y aprendas a vivir acompañado de nuestros mejores recuerdos y que sepas que a pesar de que me vaya, siempre que me recuerdes, viviré por siempre dentro de tu corazón —Sun Hee sonrió poniendo su índice sobre el pecho de su hijo para luego besar su frente —¿Prometes que harás eso? —la mujer de ojos verdes alzó su meñique

—Lo prometo, mami —Yoongi hizo lo mismo, estrechando el meñique de su mamá con el suyo.

El pequeño Yoongi no entendía muy bien a qué se refería su mamá, pero de alguna forma lograba comprenderla y luego se tomaría el tiempo de pensarlo bien.

Esa noche durmieron abrazados, sin saber que esa sería su última noche juntos.

Fin del Flashback

Sí, esa fue la última noche en que durmieron juntos, fue irónico que justo ella una noche anterior a su muerte, le hiciera prometer que saldría adelante, aunque ella no esté. Ahora se sentía decepcionado de sí mismo, porque no había cumplido su promesa, se estaba hundiendo y muy hondo.

—¿Tocaré fondo? —se preguntó.

Así, entre millones de recuerdos, viajes al pasado y llorar, Yoongi se quedó dormido profundamente. Ahora la pregunta era… ¿podría, Yoongi, salir de ese hoyo?









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Besos 💔

Let me Love You  [YOONMIN] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora