El día había sido perfecto, el partido con Manuel había terminado en un amistoso empate justo antes de que le ganara por un gol, porque obviamente él hubiera anotado; y su mamá lo habia invitado otra vez al estreno de una nueva película romántica que según su mamá, por tanto totalmente cierto, iba a ser la película que marcaría la época.
Al principio Martín se aburría acompañando a su mamá al cine, la oscura sala y las voces susurrantes de los protagonistas le hacían rápidamente caer dormido, despertándose ya cuando las luces volvían a prender mostrándole la expresión frustrada de su madre. Pero un día a Martín se le ocurrió una idea para mantenerse despierto en la interminable película, imagino que él, sus primos y Manuel estaban dentro.
Él era el asombroso protagonista que tenía de pareja a la empresaria bonita, estaban apunto de casarse y sus amigos (en su mente interpretados por sus primos) le intentaban convencer de no hacerlo, mientras que Manuel era la amiga inteligente y trabajadora que lo apoyaba en todo momento. El papel encajaba perfecto para el castaño, sus personalidades se parecían, eran estudiosos, tímidos y muy tiernos cuando se enojaban.
Todo iba bien en la primera mitad de la película pero derrepente la trama se volteó y el protagonista terminó confesandose a la amiga... Él terminó confensandose a...
La madre de Martín se volteó a ver si se había dormido pero se sorprendió al verlo encongido en su asiento con la cara roja atento a lo que sucedía en la patanlla, "por fin le agarró gusto" pensó y continuó viendo la película.
Desde entonces comenzo a ser más consciente de Manuel y de cómo se comportaba frente a él, no podía evitar ponerse nervioso, se sentía ridículo, solo por una tonta película estaba actuando raro, sabía que todo había sido una fantasía que se salió de control, ficción nada más ¿Por qué le estaba afectando tanto? En un recreo Martín se aisló y comenzó a pensar de esta manera, lágrimas de verguenza salieron de sus ojos pero fueron rápidamente secadas por una mano, él miro en su dirección, Manuel le acariciaba su cara con expresión preocupada.
-¿Tincho por qué estai llorando?- Martín bajó la mirada aún más avergonzado, no podía creer que Manuel viera un lado tan patético del él, Manuel suspiro y apoyo su frente contra la de él- Si no quieres decirme está bien, estaré aquí hasta que se te quite la pena.
-¿Y si eso demora?
-Te esperare, no importa cuanto.
Las mejillas de Martín enrojecieron y su corazón latió con fuerza pero se sentía tranquilo.
Ya había pasado un año de eso, ahora Martín entendía perfectamente sus sentimientos y ocupaba las películas románticas para hayar la mejor manera para confesarse a Manuel, hasta el momento todas sus ideas habían sacado risas de parte del chileno por lo que ninguna era la correcta, algún día esperaba que unas de esas historias conmoviera a su Manu y entonces empezarían sus planes para replicarlo en la vida real.
Esta vez la película no había estado tan buena, los protagonistas terminanan alejándose por un rival amoroso que llegaba de la nada, su mamá decía que probablemente habría una secuela pero eso no lo dejaba satisfecho, era frustrante que un desconocido arruinara una relación de tantos años. En ese momento la cara de la alumna nueva y los comentarios de sus primos volaron a su mente.
-¿Qué sucede bebito? ¿No te agradó la película? Ya te dije que le van a sacar segunda, no te preocupes- Su madre vio por el retrovisor cómo Martín comenzaba a refunfuñar en su asiento cruzándose de brazos.
-No es eso... Solo me acordé algo que pasó en el colegio
-Oh pero lo del colegio dejalo en el colegio, arregla la cara que hoy le daremos una sorpresa a tu padre llegando temprano.Automáticamente la sonrisa de Martín volvió, su padre siempre llegaba tarde del trabajo y las veces que no siempre había algo que evitaba que se encontraran, como por ejemplo los ya comprados boletos de una película. Incluso era difícil verlo el fin de semana puesto que su trabajo y sus jefes eran muy demandantes y lo obligaban a hacer horas extras muchas veces.
"Ese italiano es un rompe bolas, se le olvida que sus trabajadores tienen familia" A veces oía decir a su mamá.Sin embargo las cosas no fueron tan felices como se esperaba. Ambos se extrañaron de encontrar la casa a oscuras, su madre subió al segundo piso a comprobar si su padre estaba durmiendo mientras Martín dejaba los dulces que sobraron en el comedor, mientras abría el refrigerador en busqueda de un refrigerio un grito se escuchó. Martín se quedo paralizado, objetos se escucharon caer, insultos, maldiciones y luego su padre con un colega del trabajo que había venido a comer algunas veces aparecieron corriendo escaleras abajo desnudos, cuando el papá de Martín lo vió agarro un cojín y rápidamente cubrio a su compañero, la madre de Martín salio detrás de ellos gritándoles mientras lloraba, su padre intentaba excusarse.
La madre de Martín lo tomó del brazo y lo subió al auto, Martín aún no lograba estar en todos sus sentidos, su madre lloraba cada vez más fuerte.
Lo que trajo a la realidad a Martín fue cuando entre los gritos e improperios su madre dijo
-¡Un hombre! ¿¡Qué hice yo para merecer esto!? ¿¡Con un hombre!?
De pronto los gritos parecieron dirijirse a él y el sentimiento de vergüenza volvió y un amargo llanto estalló en su garganta.Martín despertó sobresaltado, el recuerdo de aquel día seguía fresco en su memoria, se levantó pesadamente y arregló sus cosas para irse, tendría que conseguirse los cuadernos con sus primos puesto que había dormido la mitad de la hora.
-Oye ¿puedes hoy?
Martín se giró sorprendido hacia la voz, su cara quedó demasiado cerca de la del chileno el cual retrocedió unos pasos.
- Prefiero empezar al tiro con el trabajo para no atrasarme.
-S-Sí
-Ya, entonces ¿Nos juntamos en mi casa?
-Sí!
-Yapo- una pequeña sonrisa escapo de los labios de Manuel- Te espero afuera.
Miestras Manuel se dirigía a la salida el cerebro de Martín se derretía.
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En Trance [ArgChi]
FanfictionMartín y Manuel tienen una discusión pendiente pero cuando están apunto de resolverla Manuel es hipnotizado. Martín y Alice (la amiga de Manuel) deben buscar la forma de sacarlo del trance antes que se vuelva permante y la discusión no vuelva a toca...