¿Y si te digo que sí?

CAPÍTULO X

•A la luz de la luna•

Capítulo diez.

Alessia Pellicer.

-¿Una playa?-Me quedé mirando la costa-¿Qué hacemos en una playa?

-Ya lo verás-Sonrió de costado y me tendió la mano-Ven.

Acepté su mano y bajamos por las escaleras que nos llevaban a la costa.

Al bajar lo miré y sonreí. Allí había un pequeño parador que era lo único que tenía luz, además de la luna, obviamente. En el parador había una pequeña mesa y dos sillas, arriba de la mesa habían algunas cosas que no pude distinguir.

-¿Qué es todo esto, Eros?-Pregunté sonriendo.

-Esto, linda, es el comienzo de nuestra historia.

Ok, no voy a negar que el gesto me ha gustado, el hecho de que busque cualquier cosa para intentar "conquistarme".

Se que tiene bastantes cosas mal en el, pero todos tenemos nuestras cosas, y se pueden trabajar.

-¿Nuestra historia?-Dije con una carcajada.

-Aunque no lo creas, estoy seguro que nosotros terminaremos juntos, y tendremos una historia hermosa.

-¿Qué dices?-Solté otra carcajada.

-Lo que oyes, voy a hacer todo lo posible para que te enamores de mi, y diciendo lo que sea, es lo que sea.

-Estás completamente loco.-Me reí-Apenas me conoces, nos conocemos hace que, ¿Una semana? ¿Menos?

Colocó una mano en mi mejilla izquierda.

-Puede ser.-Se encogió de hombros-Pero ya estoy decidido a hacerte caer y enamorarte de mí.

-Pregunta-Tuve que decir-¿Cuál es tu signo?

El se rió.

-¿Mi signo?-Me miró directamente a los ojos-¿Para qué?

Me contuve de voltear los ojos.

-Solo dime.

-Cáncer.

-Mmm, okey.

-¿Por? ¿Es malo?

Si.

-No, todo perfecto.

-Entonces, ¿Vamos?

-Claro.

Caminamos hacia el parador, antes de tocar la arena, me quité los tacones.

Llegamos al parador y las figuras que vei sobre la mesa tomaron forma. Había un champán, y un vino. También había quesos y panes. La cosa que tomó mi atención fue el telefono celular que estaba sobre la mesa.

-¿El teléfono es tuyo?-Pregunté.

-No, pensé que era tuyo.