Adore You♡ | Sungwon

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La última vez que Jungwon había pisado el hospital había Sido unos días antes, para ser preciso, el día en el que habían internado a Sunghoon de emergencia.

Sabía que su estado de salud había Sido un poco estable debido a lo que su madre le informaba. Dos días antes su semana de exámenes había iniciado, así que no podría ir a visitar a Sunghoon, pero tenía la esperanza de hacerlo cuando sus responsabilidades acabaran.

Todos los días eran ordinarios para Jungwon, pero desde su acercamiento con Sunghoon se había vuelto extraordinario. Pero ese día en especial se sentía extraño, por alguna razón no había podido concentrarse en el examen que aseguraba, sabía todo lo que podrían preguntarle.

Al salir de la universidad, el sol se había metido y ya era de noche. Muchas estudiantes iban y venían entre los pasillos. Sus amigos se habían ido rápido así que antes de tomar el autobús decidió comprar un café en aquella cafetería donde había compartido momentos felices con Sunghoon.

Después de algunos minutos llegó finalmente a su casa. Su madre lo recibió con la cena ya lista, pues sabía que su hijo estaba ya exhausto no solo por la escuela, sino por la situación de Sunghoon.

Después de la cena fue directamente a su habitación a seguir estudiando y tratar de concentrarse, era casi media noche y no llevaba si quiera la mitad de los temas comprendidos.
Tenía sus ojos medio abiertos mientras trataba de concentrarse siendo casi imposible, decidiendo bajar a hacerse un café para mantenerse con energía. Si madre estaba dormida así que en silencio bajó hasta la cocina mientras preparaba con tranquilidad la taza.

Pudo escuchar como el teléfono de su madre sonaba en su habitación. Con cuidado meneaba el café escuchando que su madre contestaba. Era apenas audible lo que decía así que con cuidado volvió a subir para poder escuchar de cerca. Y hubiera deseado jamás hacerlo

-Esta bien, yo le diré, de verdad lo siento.

La mujer colgó mientras se sobresaltaba al ver a su hijo parado en la puerta con su taza en la mano y su mirada confundida al ver la mirada tan extraña que su madre tenía.

- Jungwon yo... Creo que estaban estudiando no te escuché. Tuve un mal sueño y yo...

- ¿Quién era? - Preguntó dejando su taza sobre uno de los muebles de la habitación yendo hacia su madre quien seguía con la mirada llena de sorpresa, no parecía que hubiera tenido una pesadilla - Mamá, dime quién era.

- Jungwon... - Su madre comenzó a titubear sin saber realmente como decirle a su propio hijo algo que lo lastimaría por completo - Era la mamá de Sunghoon.

- ¿Le pasó algo?

- Sabes que estaba muy débil, su cuerpo estaba desprotegido y atrapó una bacteria que le hizo daño a su cuerpo así que tuvieron que llevarlo a terapia intensiva de emergencia...

- ¿Terapia de emergencia? Tenemos que ir a verlo - Jungwon se sobresaltó dirigiéndose a la puerta de la habitación apresurado hasta que sintió en el hombro la mano de su madre girándose y notando como los ojos estaban llenos de lágrimas.

- Cariño, Sunghoon tuvo dos paros respiratorios los cuales lo llevaron a terapia intensiva y el tercero... Su cuerpo estaba tan débil que no lo resistió. Sunghoon... Cariño, él murió.

En cuestión de segundos el mundo de Jungwon se paralizó por completo y a su mente solo llegaban como pequeños destellos todas las veces que había pasado con Sunghoon. Sus abrazos, besos, las veces que lo molestaba tanto pero también lo hacía reír. Todo aquello se había esfumado, la vida le había quitado a la persona que adoraba, por quién habría dado todo sin importar nada a cambio. Pero Sunghoon no había Sido fuerte como prometió y se había ido, llevándose con él una el corazón de Jungwon.