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Hi, pequeños traviesos, espero que lo disfruten, la foto es de abu dhabi.

Narra Joseph

-se puede saber por qué diablos besas a mi esposo- esa voz, levante la vista y un Williams hechando humo por las orejas nos veía, me separe lentamente de Ivan y vi con cara de pocos amigos a Will.

-futuro ex esposo, acuérdate- dije guiñandole un ojo, vi como su mandíbula se tensaba y sus nudillos se volvían blancos de tanto apretarlos, yo lo vi con prepotencia.

-no nos divorciaremos Joseph, que te quede eso claro- dijo con voz firme, me enoje al pensar que el era tan estúpido que pensaba que podía seguir mandando en mi.

-no voy a discutir contigo Williams así que retírate y déjame disfrutar de la noche con Ivan.

-sabía que te me hacias familiar, así que eres tu Ivan, sigues siendo el mismo tonto de hace años, piensas que Joseph, mi Joseph me dejara por ti, te equivocas- dijo con prepotencia.

-ya lo hiso- dijo viéndolo, cuando supe que Williams iba a lanzarse sobre el a golpearlo intervine.

-Ivan vamos a seguir saludando, con permiso Williams - dije, Ivan se paró y me tomó de la mano, antes de seguir avanzando will me tomó del brazo y me detuvo.

-Cariño- dijo con ese tono meloso que me derretía- te extraño- me solté de su agarre y me fui con Ivan, si lo seguía escuchando iba a comenzar a llorar delante de todos y no quería eso, tenía que ser fuerte delante de él, salimos un rato al balcón donde nos quedamos tomando aire.

-Joseph- dijo Ivan, dirigí mi mirada a él- que paso contigo y Williams, se ve que se aman aún, porque estaban peliando  - yo aguante las ganas de llorar como una niña y dije.

-me volvió a engañar- dije con voz débil, sentí como el agarre de Ivan en mi mano se tensaba.

-lo siento, no sabía perdona por preguntar- dijo con voz llena de culpa, yo negué con la cabeza.

-no te preocupes, todo esta bien me olvidare de él, no quiero seguir sufriendo, se que si no lo supero me romperé tanto que nadie podrá volver a unir mis pedazos- sentí sus brazos rodeandome y le correspondí el abrazo, Ivan es un gran amigo, desde que lo conocí siempre a sido muy buena persona conmigo.

-Joseph, lo siento pero yo no puedo ayudarte con esto- sabía que no lo haría, Ivan siempre buscaba la felicidad de los demás- y se que sabes porque, no puedo apoyar que no seas feliz, y se que te duele que Williams te allá engañado, pero sabes que tu vida esta al lado de él y eso no cambiará, lo amas y el te ama a ti, espero que puedan los dos superar esté tropiezo en su relación y todo vuelva a la normalidad.

-gracias Ivan, eres un gran amigo- dije cuándo nos separamos, el me sonrió y acarició mi rostro.

-te quieres ir o prefieres dar una vuelta por el patio.

-lo segundo- dije tímido, él me sonrió y asintió, me guió por medio de las personas a la salida que se encontraba en la parte de atrás, durante el recorrido al patio, nos mantuvimos en silencio admirando la soledad y el delicado sonido del viento, nos sentamos en un banco y me dispuse a comenzar una conversación, cuando algo tapó mi rostro y sentía que era cargado y alejado de donde antes estaba.

Pero que diablos, intente gritar pero antes de que lo pudiese hacer algo tapó mi boca y nariz, llevándome a una oscuridad.

Cuando me desperte, estaba acostado en una cama de una habitación desconocida para mi, que diablos me paso, tengo un horrible dolor de cabeza cuando pude acordarme de algo, supe que había sido "secuestrado", sentí sonidos proveniente de una puerta y como esta se abría y alguien salía envuelto en una toalla, cuando vi quien era quería tirarle un jarrón en la cabeza.

-Maldición Williams, en serio secuestrarme- vi como esa sonrisa que seguro había roto miles de corazones en su juventud y que hacía que el mío se acelerará hasta tal punto de que pensará que me daría un paro cardíaco, aparecía.

-Buenos días hermoso esposo- dijo acercándose a mí.

-donde diablos estamos Williams- dije viendo que no reconocía nada de lo que había en la habitación.

-bienvenido a abu dhabi, amor -mis ojos se abrieron tanto que pensé que me quedaría sin ellos.

-Abu dhabi, pero que diablos Williams, como llegamos aquí sin mi consentimiento. - pregunté confundido.

-estamos casados, así que hize pasar como si estuviste dormido y me dejaron entrar a este suculento país, donde estaremos un largo tiempo cariño.

- no, yo me voy de aquí, ni pienses que estaré aquí contigo.

-pequeño y hermoso esposo mío, Parece que no te acuerdas quien soy, hay unas diez personas de seguridad afuera de la habitación que no te dejarán salir nunca solo, y tu pasaporte esta en una caja fuerte donde la única persona que tiene acceso soy yo.- pero este que se cree para tenerme en este lugar bajo presión.

-pero quien diablos te crees - fui interrumpido a mitad de la frase por él.

-tu esposo, y escucha haré todo lo que pueda para ser personado por ti y volvamos a ser la pareja de antes- dijo de una forma que me hizo retroceder y el acercarse- entendiste amor- joder por que me tuve que casar con alguien que nunca se da por vencido.

Disculpa por quererte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora